7. Desesperadamente

 

7. Desesperadamente

Yoon Se-won lo había rechazado rotundamente.

Woo-hyun, que salió de la habitación de Se-won como si lo hubieran echado, recordó vívidamente la expresión fría con la que Se-won le había hablado.

‘Cumpla su promesa.’

‘¿Espera que le diga algo? Dije que no quería nada de usted.’

Se-won no le dio ninguna cualidad o esperanza.

Simplemente lo rechazó sin cesar y sin dar una razón.

Aunque Woo-hyun se había dado cuenta de sus sentimientos, no podía hacer nada.

Quería ser amable con él, pero Se-won lo rechazaba.

¿Cuál era el problema?

La primera vez que lo vio después de seis años, Se-won no solo se mostró excesivamente cauteloso con Woo-hyun, sino que lo miró como si fuera una mala persona.

La situación llegó al punto en que Sung-jin tuvo que intervenir.

‘Estás muy raro últimamente. Yoon Se-won te odia, ¿no deberías buscar a otra persona?’

Un día, Woo-hyun le preguntó a Sung-jin:

‘Siento que hice algo mal, pero ¿qué pasa si no sé la razón?’

En ese momento, la expresión del director Im fue como si dijera: 'Mira quién lo dice'.

‘¿Estás hablando del señor Yoon Se-won? ¿Estás seguro de que hiciste algo mal?’

Woo-hyun era alguien que no se interesaba mucho por los asuntos de los demás y actuaba solo para su propia satisfacción.

Además, por lo que Sung-jin había observado al investigar a Se-won por orden de Woo-hyun, Yoon Se-won no era alguien que odiara a alguien sin razón.

En su tienda, trataba amablemente a los clientes y su reputación era buena.

Si él odiaba a Woo-hyun, ¿no habría una razón para ello?

Sung-jin, que conocía a Woo-hyun de cerca desde que era joven, pensó eso, dejando de lado su imagen pública.

‘No lo sé. Me rechaza con tanta fuerza, a pesar de que es la primera vez que me ve en seis años, que siento que hice algo mal, pero no sé qué hice mal.’

‘¿Y el señor Yoon Se-won no dice nada?’

‘...No.’

‘Entonces, discúlpate primero. No tienes nada que perder. Si realmente hiciste algo malo, es correcto disculparte. Y si no, si te disculpas sinceramente, ¿no crees que él te diría por qué está enojado?’

Como dijo Sung-jin, si él había hecho algo mal y necesitaba disculparse, lo haría.

Diría que lo sentía, que lo perdonara.

Woo-hyun estaba dispuesto a pedir perdón de todo corazón. Quería aliviar el resentimiento de Se-won y acercarse a él, incluso si tenía que humillarse.

Pero Se-won nunca le dijo qué lo había enfadado ni cuál era su error.

Woo-hyun se sentía frustrado y con el pecho oprimido porque no tenía forma de saberlo.

Luego, al seguir dándole vueltas, se enfadó.

Si tan solo le hubiera dicho la razón claramente, él lo habría entendido y aceptado.

Pero Se-won continuaba tratando con él a la defensiva, ocultando algo.

‘De acuerdo. Si eso es lo que deseas, no tengo por qué no acceder.’

Así que, impulsado por la rabia, dijo esas palabras y abandonó la habitación de Se-won.

Aunque se había dado cuenta de que lo amaba, esta forma unilateral de actuar era problemática.

Aunque era la primera vez que amaba a alguien, eso sí lo podía entender.

Que había un muro fuertemente sellado entre Se-won y él.

Para romper ese muro, necesitaba el perdón de Se-won, pero él no le daba ninguna forma de pedirlo.

Woo-hyun sintió un latido que le dolía ante esta situación desconocida.

Era la primera vez que una persona hacía que su corazón se agitara de esa manera.

Al principio, la actitud fría de Se-won lo enfureció, y condujo a casa sin pensar. Al regresar a su casa vacía y mirar la vivienda monocromática, sintió un profundo vacío.

Fue entonces cuando comprendió lo que significaba el dolor de ser odiado por la persona que amaba. Las palabras que solo conocía por definición:

Atracción, afecto, amor, amor no correspondido, mal de amores.

Ahora entendía el sentimiento que encerraban esas palabras.

Por primera vez, aunque torpemente, lo sintió. En su primer amor no correspondido, se dio cuenta de que, a pesar de haber nacido con todo, la única cosa que no podía controlar era el corazón de otra persona.

‘...En una situación como esta, es más apropiado recibir tratamiento de la persona con la que me voy a casar que de un sunbae con el que no tengo nada.’

‘¿Voy a casarme de mentira?’

‘Dice que viene ahora. Acepto el tratamiento con él.’

Matrimonio...

Yoon Se-won estaba decidido a casarse con ese Alfa. Y lo había llamado de forma muy familiar como 'esa persona'.

Woo-hyun había pensado que, si él se lo proponía, podría casarse con Yoon Se-won en cualquier momento.

Aunque no había considerado seriamente casarse con Se-won, si el matrimonio era lo que se necesitaba para tenerlo, estaba dispuesto a hacerlo de inmediato.

Para él, el significado de asegurar a Se-won era más importante que el significado del matrimonio en sí.

Al pensarlo de nuevo, fue un pensamiento arrogante. ¿Por qué pensó de esa manera?

Se-won solo lo había rechazado de principio a fin.

Se burló de sí mismo en el pasado por pensar que si el matrimonio era lo que se necesitaba para tenerlo, entonces él podía hacerlo.

¿Estaba tan hechizado por él? O...

El matrimonio no era algo que él pudiera hacer unilateralmente; requería el consentimiento de Se-won.

A pesar de esto, se había dejado llevar por los celos al verlo con otro Alfa y se había mostrado arrogante.

Nunca lo había tenido, y solo lo estaba perdiendo. Era un sentimiento que no se podía expresar con la palabra 'lástima'.

Estaba furioso por su impotencia y su corazón latía con fuerza por el deseo de arrebatárselo. Y aun así...

Aun así, no sabía cómo hacerlo.

Cómo cambiar sus sentimientos.

Cuando escuchó por primera vez que iba a tener una cita a ciegas, le pareció ridículo.

Sintió una superioridad natural ante la imagen de ese Alfa común, mucho menos atractivo que él, un hombre sin nada especial.

Pensó que si él se lo proponía, Se-won lo elegiría a él en lugar de a ese Alfa.

Además, al recordar la noche que pasaron juntos por primera vez, al recordar cómo él había extendido sus brazos hacia él, creyó firmemente que él volvería con él esta vez también.

Sin saber que esa superioridad o su estatus de ser superior no le servían de nada.

Aunque acababa de despertar a esos sentimientos, parecía que ya era demasiado tarde.

Si no pasaba nada, Yoon Se-won y ese Alfa se casarían según lo planeado.

Él no encontraba ninguna forma de colarse en ese espacio.

El primer amor no correspondido era difícil y torpe, como era de esperar de la primera vez.

Entonces... era hora de dejarlo.

Porque era un desgaste emocional ineficiente, que no le haría bien a nadie.

* * *

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Habían pasado unos días desde entonces.

Woo-hyun iba y venía del trabajo como de costumbre, y no había visitado la tienda de Se-won. Había sido así desde el momento en que decidió dejar sus sentimientos a un lado.

El rostro, los gestos, la mirada de Se-won...

A pesar de que aparecían en su mente justo cuando creía haberlo olvidado, revolviendo su cabeza, solo se quedaban en pensamientos.

Se había esforzado por olvidarlo y, en apariencia, estaba borrando sus emociones sin que se notara.

Pero eso era solo lo que pensaba Woo-hyun.

En los últimos días, su rostro demacrado sentado en el escritorio hacía que el personal de la oficina ejecutiva estuviera nervioso, tratando de no llamar la atención de Woo-hyun.

Sus nervios estaban muy sensibles y su mirada era más penetrante que antes.

Aunque no se comportaba de forma particularmente irritable, la atmósfera de que nadie podía acercarse hacía que la oficina ejecutiva fuera un campo de hielo.

Aunque nadie había sido regañado todavía, las secretarias estaban orando para que no fueran ellas las próximas.

Woo-hyun, la fuente del problema, no tenía ni idea de la angustia de sus subordinados, y solo Sung-jin, atrapado en el medio, estaba inquieto.

‘¿Le habrá pasado algo con el señor Yoon Se-won? ¿No se habrá disculpado bien?’

Sung-jin, que golpeteaba el escritorio con la punta de los dedos sin cesar, miró el reloj de mesa y se levantó.

‘Ay, no sé. No es un niño, se las arreglará solo. Uf...’

Como no había nada urgente, pensó que sería mejor que se fueran temprano para que las secretarias pudieran respirar.

Sung-jin llamó a la puerta de la oficina de Woo-hyun.

Hoy, el abuelo de Woo-hyun lo había llamado a la casa familiar. Sung-jin planeaba llevar a Woo-hyun a la casa familiar y luego él mismo se iría a casa.

Sung-jin entró en la oficina de Woo-hyun y se acercó a él, que estaba leyendo documentos con un rostro agotado.

"¿Terminaste con el trabajo urgente?"

Woo-hyun levantó la cabeza y miró a Sung-jin.

"...¿Por qué? ¿Hay algo más que hacer?"

Como era de esperar, su mirada fatigada era feroz. Pero Sung-jin no se inmutó y dijo lo que tenía que decir.

"No. El presidente te llamó y, como te ves muy cansado estos días, pensé en irnos un poco antes."

Cuando Sung-jin sugirió irse con bastante audacia, Woo-hyun se rio entre dientes.

Woo-hyun también entendió lo que Sung-jin quería decir.

¿Parecía tan cansado últimamente como para que le sugirieran irse a casa?

Así que no dijo nada negativo, dejó el bolígrafo y bromeó:

"...Tienes talento. Un secretario decidiendo la hora de salida de su jefe."

"Tiene suerte de tener un secretario tan fiable."

"Por primera vez, bromeas."

Como Sung-jin no solía gustarle bromear, Woo-hyun reaccionó sorprendido.

Entonces Sung-jin volvió a su tono informal, golpeó el escritorio un par de veces y dijo:

"Si te pareció divertido, ¿por qué no te levantas? Tienes ojeras hasta la barbilla. ¿Te has mirado en el espejo?"

"¿No me miro en el espejo dos veces al día? Lo sé."

Se miraba en el espejo mientras se duchaba por la mañana y por la noche. Sabía que su piel estaba un poco seca y apagada.

Sung-jin suspiró y le dijo a Woo-hyun, que hablaba con indiferencia:

"Si lo sabes, cuídate un poco. Dudo mucho que al presidente le guste verte con esa cara."

Pero Woo-hyun no era una celebridad y no tenía intención de cuidarse solo porque su piel estuviera un poco peor.

Woo-hyun no respondió a las exageradas palabras de Sung-jin y se levantó de su asiento.

Porque pensó que, como dijo Sung-jin, no habría problema en irse un poco más temprano hoy.

* * *

De camino a la casa familiar, Woo-hyun cerró los ojos por un momento.

Sin embargo, no pudo conciliar el sueño, así que viajó todo el tiempo con los ojos cerrados, abriendo los párpados de golpe tan pronto como llegaron a la casa familiar.

Woo-hyun salió del coche, se arregló la ropa que se había desordenado al sentarse y empujó la puerta de la mansión.

Una gran mansión construida en el corazón de Seúl.

El presidente Kang, el abuelo de Woo-hyun, sus padres, el vicepresidente Kang y su esposa, e incluso el matrimonio de Woo-hee, que vivía allí mientras criaban a su hijo, aunque tenían su propia casa de recién casados.

Era una gran mansión donde vivían tres generaciones, excluyendo a Woo-hyun.

Woo-hyun se había mudado solo después de regresar de estudiar en el extranjero porque le resultaba más cómodo vivir solo, pero aun así, a menudo lo llamaban a la casa familiar.

Al ser una casa donde vivían tres generaciones, era difícil negarse cuando le pedían que fuera a mostrar la cara por un rato.

Mientras pensaba en esto, abrió la puerta principal y un olor a comida lo recibió.

Parecía que estaban preparando la cena, ya que era casi la hora, pero Woo-hyun, que no tenía apetito, frunció el ceño ante el olor.

"Ya llegué. Madre, ¿y el abuelo?"

"Ah, está en el estudio. Ve a saludarlo."

"Sí, madre."

Pensando que tenía que escuchar el asunto rápidamente y volver a casa, Woo-hyun respondió brevemente y se dirigió al estudio para llamar a la puerta.

"Ya llegué, presidente."

Entonces escuchó una breve voz desde dentro, diciéndole que entrara.

* * *

El presidente Kang estaba sumido en sus pensamientos.

Había pasado bastante tiempo desde que le ordenó al director Kim que encontrara al padre biológico de Eun-bom, pero seguía siendo desconocido.

El director Kim investigó la vida universitaria de Se-won desde su ingreso. Sin embargo, no había nada que destacara.

Esto se debía a que Se-won había llevado una vida universitaria muy discreta y, en medio de sus estudios, había tomado una excedencia abruptamente, cortando de raíz sus relaciones interpersonales.

Tampoco se pudo averiguar la razón de su excedencia.

Ni sus compañeros de departamento ni sus sunbaes o hoobaes lo recordaban. Y los que lo recordaban solo decían cosas como: 'Ah, solo sé el nombre. Apenas recuerdo su cara'.

Por lo tanto, aunque buscaron entre los residentes del vecindario donde vivía Se-won, los comerciantes cercanos a su tienda, e incluso a sus padres, no se pudo obtener ni una sola información sobre el padre biológico de Eun-bom.

‘¿Entonces, no encontraron nada en la universidad?’

‘No. Parece que se aisló inmediatamente después de tomar la excedencia.’

‘Tsk. ¿Y la gente del vecindario? O los abuelos del niño, también deben de estar.’

‘Es que... busqué en el vecindario donde vivía el señor Yoon Se-won y revisé minuciosamente los alrededores de la tienda, pero nadie sabe nada del niño.’

La razón era que Se-won había sido muy estricto, pasando casi cinco años desde el nacimiento del niño solo en casa, sin encontrarse con nadie.

Sus únicas salidas eran para llevar al niño a jugar al aire libre o de picnic, y no había registros de que saliera solo para encontrarse con alguien.

Además, durante un tiempo, se dijo que no tuvo contacto con sus padres.

‘Solo hace un año que se comunica con sus padres. Esto es un aislamiento total y voluntario.’

Al analizar esta situación, el presidente Kang pudo inferir que Se-won quería ocultar la existencia del niño.

'Parece que sabe lo que significa dar a luz a un hijo ilegítimo de una familia chaebol.'

Pero el presidente Kang no podía ignorar a Se-won y al niño.

Independientemente de los seis años que Se-won lo había criado, el niño era sin duda la línea de sangre de Woo-hyun.

Por lo tanto, debían traerlo a la familia ahora.

Era su propia sangre y su bisnieto, y no podía permitir que siguiera siendo criado por extraños.

El presidente Kang finalmente ordenó una prueba de ADN entre Eun-bom y Woo-hyun.

Como no podía hacerse en el país, contrató a alguien para que se hiciera pasar por el tutor de otro niño en un café infantil, trajera un cabello del niño, enviara la muestra al extranjero y esperara los resultados. Aún no se había revelado nada, pero una persona que había vivido tanto tiempo tenía una especie de intuición.

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Según el presidente Kang, Eun-bom era definitivamente el hijo de Woo-hyun.

Su apariencia era idéntica a la de Woo-hyun de niño, y el hecho de que hubiera nacido con una naturaleza Alfa cercana a dominante lo confirmaba.

Considerando la energía que sintió al verlo por primera vez, era evidente que, aunque no fuera dominante en ese momento, se manifestaría como un Alfa dominante en cualquier momento.

El presidente Kang estaba asombrado por la falta de perspicacia de Woo-hyun, quien no reconocía a su propio hijo a pesar de verlo. Un padre y un hijo están unidos por un vínculo celestial, ¿cómo es que no lo reconoce estando a su lado?

El presidente Kang incluso dedujo que la razón por la que Se-won consideraba casarse tan rápidamente después de su cita a ciegas era por el niño.

Desde que Woo-hyun apareció, la vida de Se-won, que se podría considerar relativamente pacífica, había estado plagada de problemas frecuentes.

'Chocan tanto, que en algún momento lo descubrirá. Por eso se apresura a casarse.'

Ahora que Woo-hyun había aparecido, ¿quería casarse para evitar involucrarse con él?

Pensando así, el presidente Kang descubrió algo extraño.

¿Por qué se casaría con otra persona en lugar de Woo-hyun?

En realidad, si Se-won se casaba con Woo-hyun y entraba en la familia, el problema se terminaría.

Pero, a pesar de rechazar a Woo-hyun, Se-won se había citado con otro Alfa y estaba planeando casarse. El presidente Kang estaba un poco perplejo.

Claro, introducir a un hombre Omega de ascendencia común y Recesivo no era algo que le agradara, pero ya había dado a luz a un Alfa cercano a dominante, por lo que la sucesión no sería un problema.

A juzgar por la información que había investigado hasta ahora, la familia era honorable y no tenía problemas mayores.

Incluso si no era de ayuda, siempre que no causara daño, no importaba.

Dado que ya tenía un bisnieto, el presidente Kang podía pasar por alto eso. Después de todo, el presidente Kang también era un hombre de la vieja escuela.

Aun así, la situación entre Woo-hyun y Se-won era realmente sutil.

Era como el engranaje de un reloj que estaba desalineado.

A duras penas habían girado desalineados unas cuantas veces, pero ahora ni siquiera se encontraban... y Woo-hyun tampoco iba a buscarlo...

Desde el punto de vista de un observador secreto, era una situación en la que era imposible entender las intenciones del otro.

El presidente Kang ya lo sabía todo por el director Kim. Desde el momento en que Woo-hyun apareció ante Se-won por primera vez, hasta el presente.

Sabía lo que había sucedido y cómo había sido la actitud de Woo-hyun y Se-won en cada momento.

En situaciones como esta, se sentía realmente frustrado. Woo-hyun ni siquiera sabía qué cartas tenía en la mano.

Al presidente Kang, que era impaciente, esta situación le resultaba muy agobiante.

Aunque los resultados de la prueba de ADN aún no habían llegado, quería acelerar el proceso.

¿Qué se ganaba con perder el tiempo en este asunto?

De todos modos, el resultado era solo uno, y si no entendía lo que pensaba, simplemente preguntaría.

En lugar de preocuparse por las historias que le contaban, podía llamarlo y escucharlo directamente.

Esta era la razón por la que el presidente Kang había llamado a Woo-hyun hoy.

 

Toc-toc. Ante el simple golpe, el presidente Kang se aclaró la garganta.

"Adelante."

Cuando respondió con una voz grave y áspera, la puerta se abrió y Woo-hyun apareció.

Woo-hyun saludó brevemente y se sentó en el sofá donde estaba el presidente Kang.

El presidente Kang, que estaba leyendo el periódico con gafas de lectura, lo dobló de golpe y lo arrojó sobre la mesa. Luego se quitó las gafas y las puso en la mesita auxiliar junto al sofá.

Sus penetrantes ojos se fijaron en Woo-hyun.

"Me dijiste que tenías algo que decir."

Cuando Woo-hyun preguntó con calma, el presidente Kang asintió.

"Sí. Te lo dije una vez durante el cumpleaños de tu padre, ¿lo has pensado?"

"...Todavía no tengo intención."

Aunque lo esperaba, la respuesta lo desanimó.

Woo-hyun respondió con rostro cansado. Entonces el presidente Kang se incorporó y miró fijamente a Woo-hyun.

"¿Por qué, no tienes a una familia u Omega en mente? ¿Ni uno solo?"

Los ojos de Woo-hyun se entrecerraron.

'Debió haber ordenado al director Kim que me investigara, entonces.'

Woo-hyun ya sospechaba que el presidente Kang seguía sus pasos.

Por eso pudo entender fácilmente que la pregunta del presidente Kang significaba si todavía estaba saliendo con el Omega que había estado viendo hasta hace poco.

Pero desde que salió del hospital ese día, Woo-hyun no había tenido ningún encuentro con Se-won.

El presidente Kang probablemente lo sabía, pero era un poco extraño que intentara tantear el terreno en lugar de simplemente asumir que la relación había terminado.

"Abuelo, sabes que no estoy saliendo con nadie ahora."

Aun así, Woo-hyun no mostró ninguna emoción y marcó límites ligeramente.

Entonces el presidente Kang de repente levantó un dedo y señaló a Woo-hyun, luego golpeó la piel del sofá con la mano.

"Bien, has dicho algo sensato. Sabes que te estoy siguiendo, así que te preguntaré directamente, ¿eh?"

'...Como era de esperar.'

Woo-hyun asintió y escuchó atentamente al presidente Kang. No, eso intentó.

Hasta que el nombre de Se-won salió de la boca del presidente.

"Woo-hyun, ¿por qué ya no ves a ese Omega de la tienda de ropa de bebé con el que parecía que ibas a salir hasta hace poco? ¿Tuvieron una pelea fea?"

"No... ¿Pelea? Abuelo, él... Ni siquiera estábamos saliendo, solo nos encontramos un par de veces."

Woo-hyun se sorprendió ante la pregunta directa del presidente Kang. Luego suspiró en silencio.

Cada vez que se encontraba con Se-won, tenían una discusión, y eso siempre ocurría en la tienda de Se-won o en el edificio comercial, así que era imposible que el presidente Kang no lo supiera.

Pero la pregunta descarada sobre si habían peleado fue sinceramente desconcertante.

La pregunta, "¿Pelearon?", sonó como si hubieran roto después de salir.

Cuando Se-won y él nunca habían sido nada.

Pero el presidente Kang siguió preguntando.

"Entonces. ¿Ese Omega no te gusta?"

El presidente Kang nunca había mencionado a las parejas anteriores de Woo-hyun.

Aunque los investigaba en secreto, nunca había preguntado tan abiertamente.

Woo-hyun se sintió desconcertado por su comportamiento inusual, pero pronto recuperó la compostura y se negó de nuevo.

"Le dije que no tenía intención. Todavía es pronto."

El presidente Kang finalmente se enfureció ante Woo-hyun, que repetía las mismas palabras como un loro.

Incluso golpeó sus rodillas y gritó:

"¡Qué pronto! ¡Esa mocosa de Woo-hee también se resistió a casarse a menos que fuera con un Alfa dominante y se casó a los treinta y dos, y tú y tu padre! ¡Ya tenían hijos a tu edad! ejem, no... Bueno, supongo que ya tienes un hijo."

Woo-hyun sintió un dolor de cabeza punzante desde el momento en que el presidente Kang gritó por primera vez.

Por eso, a pesar de que la última frase del presidente Kang llegó claramente a sus oídos, la pasó por alto sin prestarle atención.

"Si va a hablar de matrimonio, me iré. Fui claro, todavía es pronto."

Woo-hyun también respondió con firmeza y trató de levantarse ante el presidente Kang, que insistía en el matrimonio a pesar de que los tiempos ya habían cambiado mucho.

Entonces el presidente Kang murmuró, incapaz de dejar de lado su persistencia:

"Ya que era la persona que habías visto más recientemente, pensé que incluso él estaría bien si tuvieras la intención de casarte..."

Woo-hyun también había pasado unos días difíciles tratando de olvidar a Se-won. Era alguien que se había ido a casarse con otra persona, y él mismo lo había aceptado, pero le resultaba extraño que el presidente Kang insistiera.

Si hubiera traído a los hijos de empresas famosas y le hubiera dicho que eligiera uno, lo entendería...

¿Por qué seguía mencionando a Yoon Se-won?

"Es alguien del pasado, ¿por qué sigue con eso?"

Woo-hyun hizo la pregunta porque no podía entenderlo, y el presidente Kang lo miró fijamente antes de preguntar por última vez.

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"¿De verdad no tienes ninguna intención, verdad? ¿No te casarás con ese Omega?"

"No. Le dije varias veces que no tenía intención."

Si Woo-hyun realmente no tenía intención de casarse con Se-won, el presidente Kang sí tenía un plan.

Buscaría otra candidata para Woo-hyun y, tan pronto como Woo-hyun se casara, traería a Eun-bom para registrarlo en la familia.

Si él no quería casarse con ese Omega, ¿qué podía hacer? Aun así, tenía que traer a su propia sangre y criarla.

El presidente Kang chasqueó la lengua y agitó la mano.

Era una señal para que Woo-hyun se retirara.

* * *

"Se-won, ¿no tienes que ir al hospital estos días? Parece que se te acabó la medicina."

Se-won estaba sentado en el sofá cuando su madre, que había terminado de lavar los platos, se sentó en la mesa y le preguntó.

No les había dado a sus padres los detalles de lo que el médico le había dicho después del examen.

Había pasado aproximadamente una semana desde el día del examen, pero no podía hablar sobre lo que había pasado con Jae-kyung ese día ni sobre el tratamiento, y tampoco tenía ganas de hacerlo.

Ya estaban muy preocupados por su estado, y era obvio que se preocuparían aún más si les decía que había empeorado.

Y entonces, inevitablemente, saldría a relucir que el tratamiento con feromonas que había acordado con la ayuda de Jae-kyung había fallado.

Él no quería hablar de eso. Solo recordar la sensación, el dolor que lo invadió al oler las feromonas de Jae-kyung, le revolvía el estómago.

Y, sobre todo, había un problema mucho mayor.

'No puedo salir de casa...'

Antes, si tenía cuidado, podía salir. Pero ahora, no podía salir aunque quisiera.

Tan pronto como se ponía los zapatos y tomaba el pomo de la puerta principal, le invadían sudores fríos y náuseas.

Luego le dolía la cabeza y la vista se le nublaba, como si el suelo y las paredes se ondularan por sí solos.

Al final, vencido por el mareo, se postraba en el suelo y vomitaba en el aire.

Desde el día en que regresó a casa huyendo del rechazo a las feromonas de Jae-kyung, le daba pánico solo imaginar salir.

Probablemente había desarrollado un trauma hacia las feromonas, o mejor dicho, hacia los Alfas en general.

Instintivamente, sentía miedo y rechazo hacia los Alfas con los que inevitablemente se encontraría al salir.

Los Alfas no desprendían feromonas en todo momento, y no todos iban a atacarlo...

Pensando así, intentaba con todas sus fuerzas superar el miedo a los Alfas y a las feromonas, pero su cuerpo, que ya había experimentado una desesperación terrible por las feromonas de Jae-kyung, se ponía extremadamente tenso y mostraba síntomas de rechazo cada vez que intentaba salir.

No servía de nada repetirse: Estoy bien, No voy a encontrarme con feromonas al salir, No pasará nada, si se paraba frente a la puerta.

Simplemente, todo tipo de emociones negativas le envolvían, y su cuerpo se ponía rígido y su visión se desvanecía, como si se negara a salir.

Solo después de sufrir un buen rato frente a la puerta, lograba salir del pánico.

Varias veces había acabado llorando solo, sentado en el suelo de la entrada.

Había intentado ir al hospital, pero todos sus intentos habían fallado.

Aun así, por el momento, se había consolado tomando la medicina que tenía en casa, diciendo que estaba bien y que lo intentaría de nuevo al día siguiente. Hacía mucho tiempo que ignoraba los efectos secundarios de la medicina de los que había hablado el médico.

Pero ahora la medicina se había agotado, y su madre empezaba a sospechar al verlo sin salir de casa desde el examen.

Tenía que decírselo. ¿Pero cómo?

Todavía no quería hablar de ello.

Él mismo estaba confundido y no sabía exactamente cuál era su estado, y no quería preocupar a sus padres.

Levantó la cabeza y miró a su madre. Ella esperaba su respuesta sin decir nada.

Ante su mirada, sintió un nudo en la garganta.

Después de un largo rato sin poder responder, finalmente logró sacar la voz.

"Voy a ir."

Tenía que ir.

Pero su madre lo miró con ojos sospechosos, como si hubiera más de una cosa extraña.

"No, si solías ir al hospital dos veces por semana. Pero últimamente llevas más de una semana sin salir."

Sabía que se había comportado como un niño despistado desde que volvió del hospital.

Probablemente su madre había aguantado y aguantado antes de decir algo, pero a él no le quedaban ánimos para sonreír y dar excusas. Después de todo, no era como si no lo hubiera intentado.

Así que solo le respondió con voz débil.

"Iba a ir esta semana."

Y se levantó del sofá.

"Mamá, ¿no vas a trabajar?"

"Oh, tengo que ir ya. Bueno, es tu cuerpo, supongo que harás lo que tengas que hacer... Eres tú, Se-won, el que se siente más agobiado e incómodo al quedarse solo en casa así."

"Lo siento. Debe ser difícil para ti ir a trabajar todas las mañanas. Intentaré recuperarme pronto."

Aunque, sinceramente, ahora no podía prometer nada.

Al principio, cuando empezó a tomar la medicina, pensó: ¿Por qué no funciona después de dos semanas? ¿No debería estar mejorando un poco ya?

Pero ahora, no podía ni siquiera estimar cuánto tiempo más viviría con esta enfermedad.

¿Podría curarse?

Si rechaza las feromonas e incluso la medicina tiene efectos secundarios...

¿Qué otra opción hay? ¿Buscar una nueva medicina?

"Haa..."

Suspiró por la frustración, y su madre lo regañó por suspirar por la mañana y se fue a su habitación.

"¡Eun-bom, que te vaya bien!"

"Sí. ¡Papá, tú también cuida bien la casa!"

"Vamos, ¿vamos con la mano del abuelo?"

"¡Sí~!"

Eun-bom sonrió brillantemente y tomó la mano de su padre.

"...Papá, que te vaya bien también."

"Sí. Hoy llevo a Eun-bom al jardín de infancia, y luego voy a ir a un sitio."

"¿Tienes planes?"

"Sí. Así que come bien y descansa mucho."

Diciendo eso, su padre tomó la mano de Eun-bom y salió de la casa.

Con el sonido de la puerta cerrándose, el silencio lo cubrió.

Antes, cuando estaba en casa, intentaba buscar vitalidad creando varios pasatiempos.

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Solía moverse mucho por la casa para pasar el tiempo, pero últimamente, solo se encerraba en su habitación y dormía.

Lo hacía para olvidar, porque al estar solo, se deprimía y le inundaban los sentimientos negativos.

'¿Qué hice mal para que me pasara algo así?'

Por qué su cuerpo estaba así, por qué las feromonas de Jae-kyung le provocaban rechazo...

A pesar de saber que era un problema mental, por qué no podía superarlo y ni siquiera podía salir de casa, por qué era tan débil.

Estando encerrado solo en casa, todo tipo de pensamientos lo oprimían.

Al principio, no solo dormía. Intentaba hacer algo. Pero no podía.

Su cuerpo no lo acompañaba para moverse. Ver la televisión o navegar por internet le daba pereza.

Como resultado, dormía mucho más.

Le gustaba poder no pensar en nada mientras dormía. Pero dormir no lo solucionaba todo.

Cuando dormía, soñaba.

En sus sueños, siempre estaba huyendo de Alfas cuyos rostros no podía distinguir.

Huía con un cuerpo a punto de entrar en celo, buscando un lugar sin Alfas, pero dondequiera que fuera, había Alfas por doquier, sin un lugar donde esconderse.

Al despertar, estaba empapado en sudor.

"¡Huk...!"

Abrió los ojos de golpe.

Parecía haberse vuelto a dormir sin darse cuenta.

Dicen que cuanto más se duerme, más se quiere dormir, y últimamente dormía mucho hasta que Eun-bom regresaba.

Pero siempre se despertaba antes de que Eun-bom llegara, así que pensó que hoy también lo haría.

'Eun-bom. Tengo que ir a buscar a Eun-bom.'

Aunque solo lo recibía en la entrada, se esforzaba por darle la bienvenida a Eun-bom.

'Entonces, primero vamos a lavarnos...'

Justo cuando estaba a punto de levantarse.

"Papá, ¿te duele otra vez?"

Escuchó una voz a su lado.

"¿Eh...?"

"Papá, estás sudando."

No era una alucinación. Eun-bom ya había regresado.

'¿Ha pasado tanto tiempo?'

Sorprendido, giró la cabeza y vio a Eun-bom junto a la cama, mirándolo con preocupación, apoyando la barbilla en sus manos.

"Eun-bom, ¿cuándo llegaste?"

"Um, justo ahora. El abuelo dijo que no entrara porque papá estaba durmiendo... Así que solo quería ver la cara de papá..."

Significaba que estaba preocupado porque estaba sufriendo por una pesadilla.

No pudo ocultar su tristeza ante la reacción de Eun-bom.

Abrazó al niño y lo puso sobre sus rodillas, abrazándolo fuerte.

"Papá no está enfermo, tuve un sueño aterrador. Un sueño de monstruos."

Entonces el niño reaccionó sobresaltado. Se rio al ver que se asustaba al oír hablar de monstruos, pero también se emocionaba un poco.

"¿Dónde? ¿Dónde pasó?"

El lugar que le vino a la mente impulsivamente ante la pregunta del niño fue...

"En el hospital. En el hospital, los monstruos perseguían a papá, ¿sabes?"

"¡Huk! ¿De verdad? ¿Y papá los derrotó?"

"No, ¿simplemente huí súper rápido?"

Como estaba hablando a la altura del niño, Eun-bom parecía tener curiosidad por el final del sueño.

"Entonces, ¿quién castigó a los monstruos?"

"Hmm. ¿Quizás el fuerte Eun-bom salvó a papá?"

"Nooo... Eun-bom es pequeño y todavía no puede luchar contra los monstruos."

Mientras abrazaba a Eun-bom, el niño se tapó la boca y sacudió la cabeza.

"¡Ah, el señor!"

Luego, como si recordara a alguien, gritó en voz alta "el señor" con una cara brillante.

"¿Qué?"

Sorprendido por la mención repentina del señor, preguntó de nuevo, y Eun-bom habló emocionado, sin saber nada.

"¡El señor los va a derrotar! El señor tiene las manos así de grandes, y es así de alto."

"...Señor, ¿de quién estás hablando?"

¿Estaría hablando de Kang Woo-hyun?

¿Por qué de nuevo?

Nunca imaginó que Eun-bom mencionaría a esa persona.

Al final, las cosas seguían sucediendo así.

Se sentía inquieto y con la mente confusa por las situaciones que seguían ocurriendo sin que él las deseara.

Eun-bom también sintió que su reacción no era buena, y balbuceó, mirándolo con cautela.

"¿Um? El amigo de papá, el señor... El que siempre, siempre iba con papá al hospital cuando papá estaba enfermo... ¿Por qué? ¿No quieres que Eun-bom hable del señor? ¿Vas a asustarme de nuevo?"

"...¿Qué dijiste?"

¿Asustarte? ¿Qué era eso...?

Asustado, agarró a Eun-bom. Al mirarlo a los ojos, Eun-bom habló con timidez.

"Papá... Me gritaste feo esa vez. Porque estaba abrazando al señor... ¿Por qué hiciste eso? Y luego papá se desmayó y fuimos al hospital. ¿Eun-bom hizo que papá se enfermara? Papá, no te enfermes. Eun-bom lo siente. ¿Sí?"

Eun-bom finalmente rompió a llorar y se aferró a él, sollozando: "Eun-bom se equivocó, papá, no te enfermes."

Al ver eso, él también rompió a llorar.

No sabía por qué el niño estaba llorando por haberse equivocado. Todo era culpa suya, su propio pecado.

El niño no debería tener que cargar con esa culpa, entonces, ¿por qué tenía que llorar?

Y por qué... no podía entender por qué el rostro de esa persona le venía a la mente en esa situación.

¿Sería porque el niño lo había mencionado?

El rostro de la persona que se había esforzado tanto por no recordar, por olvidar, volvió a su mente.

Era un rostro que había intentado borrar con todas sus fuerzas, porque le venía a la cabeza a menudo en los últimos días, que eran especialmente dolorosos.

Pero sin quererlo, sus emociones se desbordaron.

'Yo... quiero mucho oler tus feromonas.'

Sabía que era desvergonzado después de haberlo rechazado y culpado tanto, pero aun así, las feromonas de esa persona eran desesperadamente anheladas.

Sentía que con solo olerlas una vez, podría sobrevivir...

"Ah, me estoy volviendo loco. Me voy a volver loco, Eun-bom."

Abrazando al niño que lloraba a mares, Se-won también se lamentó en voz tan baja que el niño no pudo escucharlo.

Hasta que su padre entró y calmó la situación debido al llanto del niño, él y el niño solo se abrazaron y lloraron.

* * *

Una vez que se calmó, se tomó un tiempo para estar solo.

Mientras, su padre y Eun-bom habían salido de nuevo para ir al parque, y él se quedó de pie junto a la ventana, mirando el cielo sin pensar.

Había un rostro que le venía a la mente a menudo cuando estaba en medio del pánico, sintiéndose confundido y sufriendo.

Kang Woo-hyun.

En realidad, aunque lo pensaba, lo había ignorado. Lo había rechazado, creyendo que era imposible que pensara en él y que no debía hacerlo.

Pero después de la conversación que acababa de tener con Eun-bom, no tuvo más remedio que admitirlo.

Que había estado pensando en él constantemente. Y que se había esforzado por negarlo todo este tiempo.

¿No era irónico?

Él había sido quien ignoró su oferta de ayuda con el tratamiento, lo echó de la habitación del hospital y eligió a Jae-kyung.

Pero a Jae-kyung ni siquiera podía verlo a causa de las feromonas, y lo único que hacían era intercambiar mensajes de texto o llamadas.

Y en momentos difíciles como este, la persona que le venía a la mente era Kang Woo-hyun, a quien él mismo había rechazado primero.

No solo había rechazado a Woo-hyun, sino que le había hablado con dureza delante de él.

‘Cumpla su promesa.’

‘Haa... ¿Eso es todo lo que tienes que decirme?’

‘¿Espera que le diga algo? Dije que no quería nada de usted.’

Le había lanzado todo tipo de palabras hirientes para marcar una, y otra, y otra línea para que no se acercara.

Pero cuando estaba sufriendo, era a él a quien recordaba primero.

Se sentía como si estuviera siendo castigado de forma ostentosa, como si esa persona lo hubiera maldecido.

Después de hacerse el examen y salir del hospital, no había recibido ninguna llamada suya.

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Tampoco había aparecido ante él, como si fuera a cumplir su promesa.

Claro, él apenas salía de casa, así que no habrían podido encontrarse.

Pero simplemente se sintió así.

La idea de que ya no volvería a buscarlo lo invadió de repente como una ola.

Al principio, se sintió aliviado, pensando que por fin se había librado de él. Se sintió tan feliz de que se hubiera ido, que creyó haber protegido a Eun-bom de él.

Creyó que se pondría bien, porque pensaba que todo su dolor y esta serie de incidentes eran culpa de esa persona.

Pero al cabo de uno o dos días, algo le pareció extraño.

Cuando superaba el pánico y pasaba el tiempo en soledad en la amplia casa, él simplemente le venía a la mente sin razón.

Le parecía oler sus feromonas en algún lugar, y al mirar a su alrededor, se daba cuenta de que ya estaba echando de menos ese olor.

Las feromonas que se dirigían hacia él le daban tanto terror que no podía salir de casa, y se congelaba solo con acercarse a la entrada por miedo a que apareciera un Alfa en cualquier momento...

¿No era Kang Woo-hyun un Alfa? Y además, dominante.

Entonces, ¿por qué era diferente esa persona?

¿Era porque era su primer amor? ¿Porque fue con la persona que tuvo su primera vez?

¿Porque eran las feromonas de alguien que ya le gustaba antes de enfermar?

¿O era porque había estado embarazada de su hijo?

La verdad era que solo pensar en las feromonas de Jae-kyung hacía que su cuerpo se pusiera rígido y se tensara. Pero al pensar en las feromonas de Woo-hyun, eso no sucedía.

Al contrario, pensar en ellas lo calmaba un poco, y las echaba de menos sin cesar.

Cada vez que pensaba en ellas, se entristecía por no poder olerlas en ese momento.

Esta tristeza se sentía como un reproche hacia sí mismo.

Él también lo sabía.

Sabía que no tenía derecho a hacerlo.

Sabía que no tenía derecho a extrañarlo ni a sentirse triste por no poder oler sus feromonas.

Aunque él le había ofrecido tanta ayuda, lo había rechazado solo por ser el padre biológico de Eun-bom.

Pero simplemente... a pesar de su razonamiento, ya estaba sintiendo una profunda melancolía.

Como las emociones que no podía controlar se desbocaban, hubo momentos en que, sin querer, había desbloqueado su número.

Eran días verdaderamente impulsivos y fuera de su control.

Si era honesto, sentía que con sus feromonas podría recibir el tratamiento.

Como no le provocaban ningún rechazo y su compatibilidad era buena, ¿no sería también efectivo?

¿Debió haberlo aceptado en ese momento?

No.

La razón por la que lo rechazó no era otra que el niño.

No era por gusto o aversión... era una razón absoluta.

Pero aun sabiéndolo, de vez en cuando se preguntaba: ¿Qué habría pasado si hubiera aceptado su propuesta en ese momento?

Parecía que estaba muy agotado consigo mismo.

* * *

Ver al niño llorar lo hizo reaccionar de golpe.

"...Papá. ¿Ya estás bien?"

El niño, que había vuelto de jugar en el parque, se acercó tímidamente.

"Sí. Estoy bien, Eun-bom."

Extendió los brazos, y Eun-bom dudó un poco antes de correr y abrazarlo fuerte.

"Papá lo siente. ¿Te asustaste mucho antes?"

"¿Eh? No. Eun-bom está bien."

Diciendo eso, el niño hundió la cara en su pecho y no se apartó por un buen rato.

Sentir el calor del cuerpo del niño lo hizo sentirse fortalecido.

Sí, él tenía a Eun-bom. No podía seguir así pensando en Eun-bom.

Recuperando la compostura, lo primero que hizo fue abrir la ventana, correr las cortinas e iluminar la habitación.

Aún le costaba salir de casa, pero dejó de carcomerse durmiendo todo el tiempo en casa.

Hacía ejercicio ligero en casa y salía a propósito a la sala de estar, que era amplia y luminosa, para leer.

Era un libro de autoayuda que no sabía cuándo había comprado, pero le ayudaba a calmar la mente.

Sin embargo, a medida que pasaban los días sin tomar la medicina, su ansiedad psicológica aumentaba.

Se sentía como si estuviera caminando en la cuerda floja.

Se autohipnotizaba diciéndose que estaba bien, pero la ansiedad no desaparecía y su corazón latía constantemente.

'Está bien. Antes estabas bien.'

Pensando así, se levantó, caminó lentamente, respiró profundamente y logró calmarse.

'Mi corazón late mucho estos días. ¿...Será un problema de presión arterial?'

Justo cuando se había decidido a moverse, su cuerpo no le obedecía.

Pero pensó que era solo por un momento, ya que sufría de presión baja y había estado muy enfermo.

'Seguro que es solo la ansiedad, por eso estoy así un momento.'

Él estaba bien. No, se pondría bien.

Así pasaba sus días con valentía.

Sin saber que ignorar las señales extrañas que le enviaba su cuerpo acabaría convirtiéndose en un enorme tsunami que lo arrastraría por completo.

* * *

"Se-won... ¡Se-won!"

La voz de su padre que lo llamaba se sentía distante. Sus oídos estaban taponados y apenas podía oír, como si estuviera bajo el agua.

Su padre lo estaba llamando, así que tenía que levantarse e ir con él...

Pero su cuerpo no le respondía.

¿Estaba acostado ahora? ¿O estaba soñando? ¿O quizás estaba de pie?

No sentía ninguna sensación.

No sabía si la voz que lo llamaba era real o una alucinación.

Intentó abrir los ojos para ver a su alrededor, pero al final los cerró con fuerza.

Parecía que se había desmayado.

* * *

Acababa de terminar la reunión y Woo-hyun salía de la sala de conferencias.

Como ya era hora del almuerzo, Woo-hyun planeaba ir a comer con Sung-jin.

Pero Sung-jin recibió una llamada.

"¿Diga, Sr Park?"

El título que salió de la boca de Sung-jin hizo que los ojos de Woo-hyun se entrecerraran.

La persona que primero le vino a la mente a Woo-hyun al pensar en un profesor Park era el médico de cabecera de Se-won.

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Woo-hyun se concentró en la conversación de Sung-jin por si acaso.

"Ah, sí. ¿Ahora? Haa... De acuerdo por ahora."

Sung-jin respondía a la llamada sorprendido de vez en cuando, y tan pronto como colgó, Woo-hyun preguntó de inmediato.

"¿Qué pasa?"

Entonces, Sung-jin habló con voz que denotaba fastidio, como si estuviera en un aprieto.

"El señor Yoon Se-won. Parece que perdió el conocimiento y fue llevado a la sala de emergencias."

"...¿Qué?"

"Pero, director, ¿no se había desentendido de los asuntos del señor Yoon Se-won? ¿Por qué me llaman a mí?"

Sung-jin preguntó, pero Woo-hyun no pudo responder. No, no tuvo tiempo. En cuanto escuchó que Se-won había sido llevado al hospital, los pasos de Woo-hyun se aceleraron.

Mientras Sung-jin lo seguía, ya acostumbrado, preguntó de nuevo, y Woo-hyun respondió con el rostro completamente tenso.

"Le dije que me contactara si lo llevaban de nuevo al hospital. Yo se lo pedí."

"¿Por qué?"

"¡¿Qué por qué?! ¿Tienes las llaves del coche?"

A Woo-hyun le molestó inmediatamente que Sung-jin se sentara y preguntara con tanta calma en esa situación. Cuando gritó con frustración, las miradas de los empleados cercanos se dirigieron hacia ellos.

"Dámelas. Director Im, ocúpate del horario después de informar la situación."

Woo-hyun ignoró las miradas y le quitó las llaves del coche a Sung-jin. Al ver la prisa de Woo-hyun, Sung-jin asintió como si lo entendiera.

"Haa... Sí, de acuerdo."

Había pensado que estaba tratando de pasar página después de verlo tan decaído por un tiempo, pero no era así en absoluto.

Woo-hyun todavía tenía a Se-won en su corazón.

Y de una manera bastante desesperada.

La mirada de Sung-jin hacia Woo-hyun estaba teñida de lástima.

* * *

El padre de Se-won deambulaba inquieto frente a la habitación de su hijo.

'Ya pasó la hora de la comida, ¿por qué no sale?'

Aunque Se-won no lo había dicho directamente, él se había dado cuenta de que su estado de salud no era bueno últimamente.

Pero no lo había mencionado porque cada vez que preguntaba si estaba bien, Se-won mostraba incomodidad.

También hoy tenía la intención de dejar a Se-won solo para que tuviera tiempo a solas, pero como había pasado mucho tiempo de la hora de la comida y no mostraba intención de salir, el padre de Se-won dudó un momento y luego abrió la puerta de la habitación.

"Se-won, tienes que comer. ¿Cuánto tiempo vas a dormir?"

Efectivamente, Se-won estaba durmiendo tumbado sobre el escritorio.

"Ay, hijo. Si vas a dormir, hazlo en la cama, ¿qué haces aquí? Te va a doler la espalda."

El padre de Se-won lo sacudió por el hombro para despertarlo. Pero por muchas veces que lo sacudió, Se-won no se levantó.

"¿Se-won? ¿Yoon Se-won?"

Sintiendo que algo andaba mal, el padre de Se-won lo sacudió con más fuerza, e incluso le dio una palmada en la mejilla para despertarlo.

Pero Se-won no se movió en absoluto.

Finalmente, el padre de Se-won, con las manos temblándole, llamó a emergencias.

* * *

"¡Ugh...!"

Nada más recuperar la consciencia, sintió unas náuseas insoportables.

Se levantó de la cama de un salto, y antes de que pudiera pedir algo para vomitar, su estómago expulsó de repente lo que tenía dentro.

Al vomitar directamente sobre la manta, una enfermera sorprendida le trajo rápidamente un cubo.

Se agarró al cubo y hundió la cara en el borde redondo.

Una vez que el vómito comenzó a salir, no parecía tener fin.

Todo su cuerpo le hormigueaba, su cabeza le dolía como si le hubieran golpeado con un martillo, y con las náuseas, realmente quería morirse.

Vomitó todo lo que tenía dentro con tal fuerza que sentía que las venas de su cara iban a reventar y que iba a sacar hasta las entrañas, pero las náuseas no se detuvieron.

Ya no le quedaba nada más que vomitar, y mientras lloraba de agonía derramando solo bilis, su padre, que había estado observándolo todo el tiempo, le palmeó la espalda.

"Se-won, no llores. Ya, vomitar a la fuerza no es bueno. ¿Sí?"

Era la primera vez que escuchaba ese tono desde que era adulto, o al menos desde que era mayor. Un tono suave, como si estuviera tratando con un niño.

Al escuchar la voz de su padre, se sintió aún más triste y gimió y sollozó, haciendo que su padre, perplejo, mirara a su alrededor.

"Ay, mi hijo... ¿Te duele algo más? ¿Eh? Espera un momento. Voy a llamar al doctor."

Él seguía llorando, agarrado al cubo sucio, mientras su padre reconoció al profesor Park y le hizo un gesto.

Aun cuando el médico a cargo llegó, no tenía ánimos para saludarlo ni tiempo para preguntar por qué se sentía así.

Aun así, se esforzó por calmarse para que el médico pudiera examinarlo. Lo dejó esperando detrás de la cortina y siguió con las arcadas un par de veces más.

Solo después de calmarse y enjuagarse la boca, miró el rostro del médico a cargo, y las lágrimas de tristeza simplemente cayeron.

"¿Por qué estoy así, doctor? Mi cuerpo se siente tan extraño... ¿Qué me pasa?"

"Señor Se-won, ¿siguió tomando la medicina que le quedaba?"

"...¿Qué?"

Al escuchar eso, cayó en la cuenta.

Ahora recordaba que el médico a cargo le había advertido varias veces que no debía seguir tomando la medicina.

Pero él había ignorado esto y había seguido tomándola.

"Le dije que podría ser peligroso si tomaba más medicina. ¿A pesar de eso, lo ignoró y la tomó? ¿Por qué no fue al centro? Habían acordado proceder con el tratamiento con el Alfa."

Pero había una razón por la que no había podido ir al centro.

No era que no quisiera ir, sino... una razón clara por la que no podía ir.

Las lágrimas de tristeza volvieron a sus ojos.

"No es que no quisiera ir al centro a propósito, sino que no pude. Por eso, como no había nada más que pudiera hacer, al menos la medicina... Solo tenía que evitar desmayarme, ¿no? La tomé con cuidado."

Balbuceó y dio excusas. Pero la expresión del médico a cargo era firme.

"Eso no es algo que el paciente deba juzgar. Le dije que debía tener cuidado si aumentaba la dosis de la medicina. Debería haber venido al hospital para una consulta."

"...Le dije que no es que no viniera, sino que no podía."

Su tono, que parecía culparlo, hizo que no pudiera controlar sus emociones.

Lloró amargamente y dijo:

"Doctor, estoy raro. Creo que tengo un trauma."

"...¿Un trauma?"

Ante sus palabras, el médico a cargo se sorprendió y lo miró fijamente. Él asintió y se lamentó con frustración.

En realidad, quería contárselo a quien fuera.

Quería que supieran lo mucho que estaba sufriendo.

"No son las feromonas de Alfa, sino que solo pensar en los Alfas me revuelve el estómago y me duele la cabeza como si fuera a estallar. Intenté salir varias veces, pero me da pánico solo con agarrar el pomo de la puerta principal por miedo a encontrarme con un Alfa."

Al recordar ese momento, sus manos volvieron a temblar. Pero se contuvo y continuó hablando.

"Así que me aguanté tomando la medicina que tenía en casa. Pero ni siquiera pude tomarla desde hace tres días..."

Mientras hablaba de forma incoherente, el médico a cargo examinó su expresión con calma y luego preguntó con cautela:

"¿Desde cuándo exactamente le pasa eso?"

"Desde que volví a casa después del examen... En realidad, después de acordar el tratamiento con feromonas, esa persona, quiero decir, el Alfa. Jae-kyung me pidió que liberara un poco de feromonas para ver qué se sentía, y yo acepté."

"¿Quizás en ese momento se estimuló un ciclo de celo por error o..."

"No. No era la sensación de un ciclo de celo. Simplemente... Tan pronto como olí sus feromonas, sentí un fuerte rechazo, y también vomité y me dolió la cabeza en ese momento..."

Tomó aliento y continuó hablando.

"Pero estoy seguro. El problema no son las feromonas de esa persona, soy yo... Yo me he vuelto raro. ¿Por qué me pasa esto?"

Al hablar, sin darse cuenta, se sintió desesperado y agarró la ropa del médico a cargo. Él, a su vez, suspiró con lástima.

"Primero, encontremos la causa exacta. Parece ser un problema con el sistema de feromonas. De todos modos, tendrá que ser hospitalizado, así que subamos a la habitación para que pueda cambiarse de ropa."

Como su aspecto era un desastre y la ropa se había manchado con el vómito, el médico sugirió primero la hospitalización. Él asintió sin fuerzas.

* * *

La habitación que le asignaron seguía siendo la misma que había usado antes.

Pensando para sí mismo que era una tontería que le asignaran la misma habitación por tercera vez, se quitó la ropa sucia y se puso el pijama de paciente.

Mientras lo hacía, sus manos no dejaban de temblar, no sabía cuántas veces se le habían caído los botones.

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Entonces entró la enfermera y le puso una vía intravenosa en el brazo.

"Espere un poco. El doctor volverá cuando terminen los preparativos para los exámenes."

"Gracias..."

Cuando se acostó en la cama para tomar un respiro, su padre, con el rostro lleno de preocupación, movió los labios como si quisiera hablar, pero se contuvo.

Parecía contenerse sabiendo que cualquier cosa que dijera se sentiría como una carga.

"Se-won. ¿Quieres beber un poco de agua? ¿Dijeron que podías beber agua?"

Parecía preocupado, ya que había vomitado varias veces.

De hecho, como había vomitado con tanta violencia, le dolía y le escocía la garganta. Parecía que se había lastimado la garganta.

"Sí. Por favor, agua tibia."

Como en el hospital no le habían dicho nada más, pensó que estaría bien beber agua.

Su padre se ausentó un momento y regresó con un vaso de papel con agua que había conseguido en algún lugar. Pero nada iba como él quería.

"¡Ugh, ugh...!"

Mientras tragaba el agua tibia, extrañamente sintió un olor a pescado en el agua y su estómago se revolvió al instante.

Fue en un momento.

Sorprendido, escupió el agua transparente y miró a su padre, quien le dio unas palmaditas en la manta mojada y le entregó unos pañuelos de papel con una expresión de lástima.

Se había esforzado por calmarse y serenarse, pero...

"Ah, cielos..."

Al volverle las náuseas, de repente se sintió deprimido.

Como no podía controlar sus emociones, las lágrimas le brotaron y sus ojos se enrojecieron.

Cerró los ojos con fuerza y levantó el brazo que no tenía el suero para cubrirse los ojos.

"¿Por qué intentas llorar tanto, si eres un hombre...? Voy a buscar otra manta, espera un momento. ¿Sí?"

Entonces, su padre le ofreció un torpe consuelo.

Después de eso, su padre recogió la manta mojada y salió. Iba a buscar una nueva.

Al no haber nadie que lo viera, las emociones que había reprimido estallaron como un torrente.

"Ay, en serio... Lo odio de verdad... ¿Por qué me pasa esto a mí..."

Salió de él un reproche sin destinatario. A pesar de que debía estar acostado por el suero, hundió la cara entre las rodillas y sollozó.

Fue entonces cuando escuchó el sonido de la puerta de la habitación abriéndose y levantó la cabeza para mirar la entrada.

La idea de que pudiera ser su padre o el médico a cargo se disipó al instante por el olor que llenó la habitación.

Era su olor. Kang Woo-hyun, su olor.

El olor que había anhelado y extrañado con tanta desesperación inundó la habitación.

Su visión estaba borrosa por las lágrimas y no podía ver su rostro ni su figura correctamente, pero supo de inmediato que Woo-hyun había llegado.

En ese momento, se olvidó de la dignidad, e incluso de la preocupación de que pudiera descubrir la existencia de Eun-bom. No, no le vino nada a la mente.

Instintivamente, extendió la mano. Extendió ambos brazos hacia él, incluso el que tenía el suero y no debía tirar con fuerza, y sollozó amargamente.

"Ah. Ah, Sunbae... Sunbae, por favor, sálveme. Por favor, abráceme."

Lloró a mares al verlo, y él se acercó rápidamente y lo abrazó.

Hundió la cabeza en su pecho sin pensar en limpiarse la cara, que estaba hecha un desastre con lágrimas y mucosidad.

Y se apresuró a inhalar las feromonas que emanaban de él.

"...¿Por qué lloras? ¿Por qué lloras tanto, Yoon Se-won? ¿Eh?"

Sus lágrimas no cesaron ante la voz preocupada de él. Agarró con fuerza el cuello de su ropa y suplicó con aún más fervor.

"Por favor, ¿puede liberar más feromonas? Lo siento. Lo rechacé tan fríamente, pero yo... extrañé tanto su olor. Fue tan difícil querer olerlo. Lo siento por ser egoísta, Sunbae."

Las emociones desordenadas salieron de su boca sin control.

Entonces, una gran cantidad de feromonas, suficiente para llenar la habitación, se desató de repente.

Todas esas feromonas se derramaban sobre él, y a pesar de la gran cantidad, no solo no entró en celo, sino que comenzó a sentirse cada vez más tranquilo y sereno.

Después de someterse a exámenes detallados por la tarde, le pusieron un sedante, durmió y se despertó.

Cuando abrió los ojos, el paisaje fuera de la ventana era de un cielo negro. Las horas de sol se estaban acortando gradualmente.

Miró el reloj y vio que aún era de noche, pero la habitación estaba oscura y silenciosa.

'Haa...'

Su cuerpo se sentía extraño.

No era algo malo. Al contrario, su cabeza, que le había dolido a menudo, se sintió clara como si se hubiera curado por completo, e incluso se sentía ligero, como si se hubiera recuperado de una gripe fuerte.

Estaba a punto de sentirse ansioso por la sensación de ligereza que no sentía desde hacía mucho tiempo.

Se levantó con cuidado, y solo entonces se dio cuenta de que había alguien más en la habitación.

"...¿Todavía no se ha ido?"

Cuando preguntó, Woo-hyun, que había estado sentado en el sofá sin hacer ruido, se levantó.

"¿Cómo te sientes?"

"Simplemente, no siento nada en particular."

Tal vez era porque se había despertado después de dormir con un sedante, pero se sentía mucho más tranquilo.

Simplemente, no tenía ningún pensamiento en particular.

Solo pensó: Se ha puesto el sol, al ver el paisaje por la ventana nada más despertar.

Cuando se levantó, él finalmente encendió la luz de la habitación. Al deslumbrarse, bajó la cabeza, y él se acercó y le levantó la cabeza ligeramente.

Como la luz estaba detrás de él, se formó una pequeña sombra.

Gracias a eso, pudo mantener los ojos abiertos y mirarlo a la cara.

Él lo miraba con una expresión bastante preocupada, examinando su semblante.

"Tu cara está muy demacrada. ¿No te has estado tratando todo este tiempo?"

Por eso, extrañamente... no pudo apartar con fuerza la mano que le tocaba la cara y le levantaba la cabeza para examinar su semblante.

En su lugar, bajó la mirada ligeramente, y él, sintiendo su incomodidad, retiró con cautela la mano que le había levantado la cara.

"...No es que no lo hiciera, es que no pude."

"¿Por qué?"

Seguramente había escuchado algo sobre los resultados del examen o las circunstancias de su ingreso mientras dormía.

Por alguna razón, el médico a cargo no había tenido reparos en explicarle su estado a Woo-hyun.

Si era así, él debía saber que tenía un rechazo a las feromonas que no fueran las suyas, y le parecía irónico que preguntara la razón fingiendo no saber.

"¿Me está preguntando a sabiendas?"

Cuando preguntó, él asintió tranquilamente, como era de esperar, sabiendo ya la respuesta.

"...Sí."

"Qué desagradable."

Torció la comisura de sus labios con una sonrisa forzada.

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No sabía por qué volvía a preguntarle después de haber escuchado todo del médico, pero pensando que no importaba, simplemente respondió con honestidad.

"No puedo oler otras feromonas que no sean las suyas, Sunbae. ¿También escuchó la causa?"

Y esta vez, preguntó lo que le intrigaba. Él, asintiendo de nuevo como si ya lo supiera, dudó un momento antes de volver a hablar.

"...Mientras dormías."

"¿Qué le dijeron?"

Era algo que él no había podido escuchar porque cayó en un sueño profundo inmediatamente después de que terminaran los exámenes.

De hecho, si quisiera, podría llamar al médico a cargo y preguntarle.

Pero si él lo sabía, pensó que no importaría escucharlo de él. También tenía curiosidad, y aparte, no le gustaba que los médicos entraran y se alborotaran en la habitación.

Por eso no había llamado al médico, queriendo seguir en silencio por el momento.

Al darse cuenta de su estado, él, que no había dicho nada más, acercó una silla que estaba cerca y se sentó junto a la cama.

"Me dijeron que, como dijiste, el trauma psicológico es la causa principal. Parece que tu estado psicológico era muy malo cuando olías las feromonas de ese Alfa. Me dijeron que no hay grandes problemas con tus órganos sensoriales."

"...¿No hay problemas?"

A pesar de todo, le parecía extraño que no hubiera problemas con sus órganos sensoriales.

Sorprendido por la incredulidad de sus palabras, él le explicó con un ejemplo.

"Sí. Si comes un alimento que normalmente no te causa problemas y te enfermas gravemente, temes volver a comerlo, ¿verdad? Eso es un problema psicológico, no una alergia o un problema de sabor."

Se sintió impactado por esas palabras.

No se dio cuenta de que su estado físico, o mejor dicho, su estado mental, era tan malo.

Entonces él agregó de inmediato, como para evitar malentendidos.

"Claro, eso no significa que no haya nada malo en tu cuerpo. El rechazo a las feromonas es por tu estado psicológico, pero los efectos secundarios de la medicina son otra historia."

"...Supongo que sí. Es sorprendente que sus feromonas, en medio de todo esto, no me hagan nada."

En realidad, si lo pensaba bien, ¿no deberían todas las feromonas de Alfa causarle rechazo?

Pero las feromonas de Woo-hyun no.

No solo no le hacían nada, sino que, además, calmaban su estado de ansiedad. Tan pronto como olía sus feromonas, sentía estabilidad e incluso plenitud.

¿No era esto lo realmente extraño?

Al mirarlo con una expresión de incomprensión, él soltó una risa ligera.

"El profesor Park incluso dijo que mis feromonas son como un 'muñeco de apego' para calmar tus nervios. El profesor Park tiene buenas analogías."

"...Ya veo. Es gracioso."

Al verlo reír, se preguntó por qué se reía de repente mientras hablaba.

Pero al escuchar lo que dijo, entendió por qué se había reído antes y él también se echó a reír de forma similar.

¿Muñeco de apego? ¿Cómo era posible?

Las feromonas eran realmente extrañas.

Aunque venían de su propio cuerpo, estaban fuera de su control.

Él no recordaba haber sentido apego por él... ¿Quién había decidido que se obsesionara con sus feromonas hasta el nivel de un muñeco de apego?

Sinceramente, ya no podía negarlo.

Se sentía vacío y desilusionado.

Había huido tanto y lo había rechazado tanto...

Juraba que todas esas acciones habían sido sinceras, pero en un instante se sintieron como una mentira.

Para él, no sería raro que pensara: Me rechazó y se resistió tanto, pero al final me agarró. Qué persona tan contradictoria.

No tendría nada que decir si Woo-hyun se riera de él.

Al sonreír con una risa vacía por la sensación de frustración, él habló.

"Yoon Se-won. Sé que te vas a casar con ese Alfa y sé que no te gusto. Aun así, haz el tratamiento conmigo."

"...¿Qué dice?"

"Me dijeron que soy el único que puede ayudarte con tu tratamiento. Hazlo así mientras te recuperas."

¿Acaso esta persona no tiene orgullo? ¿No me odia?

¿Cómo puede ser así?

Además, por lo que decía, entendía la situación por la que lo había rechazado y respetaba su elección.

"...¿No quiere burlarse? ¿Decir que me lo merezco?"

Así que, sin querer, soltó palabras hirientes.

Aunque sabía muy bien que gracias a él había mejorado por poco...

Se sentía miserable. Se odiaba a sí mismo por ser una persona contradictoria delante de él.

Lo más miserable de todo era que se sentía aliviado por sus palabras.

"¿Por qué no me dejó y se fue? Yo siempre le dije: Déjeme y váyase."

"Entonces, ¿quieres que me vaya ahora también?"

Ante sus palabras, la expresión de él se endureció de repente.

Mira. Reaccionaba de forma tan sensible a la orden de que se fuera y se ponía serio tan rápido...

No entendía por qué hacía esto con él.

"No es eso... Simplemente no puedo entender por qué hace tanto por mí."

Él era un Alfa dominante y un miembro de una familia chaebol con honor y poder.

Desde el principio no entendía por qué lo buscó solo para ser su pareja sexual, pero lo que menos entendía era eso.

Que siguiera acercándose a él, a pesar de que lo rechazaba tanto.

Realmente...

A menos que él sintiera algo por él...

Pero esta era una pregunta que también había tenido con Jae-kyung.

¿Por qué él? Un padre soltero, un Omega Recesivo con un hijo...

Una persona que lo rechazaba tanto, ¿por qué?

Confundido, la mirada con la que lo miraba tembló. Pero él lo miró con ojos firmes todo el tiempo.

"Eres la primera persona que me rechaza tanto. ¿Sabes por qué?"

"...Porque los demás seguro que te siguieron diciendo que sí. Es obvio."

Él era una persona a la que se le daban tales cumplidos. Un Alfa Superior que todos admiraban, y un chaebol con riqueza y prestigio.

Si no fuera por Eun-bom, quizás él también se habría conmovido.

Aunque solo fuera una propuesta de pareja, si lo buscaba tantas veces por esa propuesta...

Así fue su primera noche con él. ¿No había aceptado su propuesta de pasar una noche juntos, pensando que sería bueno estar cerca de él, aunque fuera un poco?

Quizás lo habría aceptado sin recordar las heridas y el dolor que le había causado en el pasado.

Porque la vez que pasó el celo con él fue bastante buena.

Fue un poco diferente a la noche que vivió a los veinte años, sin saber nada.

Se sintió extasiado, centrado en el placer y la alegría en lugar del dolor que sentía sin saberlo, y se revolvió en un placer terrible.

Ahí fue donde realmente supo lo que era un Alfa durante el celo.

Pero, no podía renunciar a Eun-bom por esas sensaciones.

Aunque fuera obvio.

Ante su respuesta que dio por obvia, él se rio con desdén y sacudió la cabeza.

"No. Nunca me he aferrado tanto a alguien que me ha rechazado. Normalmente, me habría rendido en cuanto me rechazaste por primera vez."

"...¿Y qué?"

La conversación empezaba a sonar extraña.

"En ese momento, no lo sabía. Las primeras veces te busqué sin entender. No podía entenderte, me rechazabas y temblabas al verme, e insistí en que al menos tenía que saber la razón."

No pudo responder. Cuanto más lo escuchaba, más...

Algo que no se atrevía a creer estaba tomando forma.

"Si me hubieras rechazado, no habría necesitado saber la razón, simplemente habría pensado que nuestros intereses no coincidían y me habría marchado."

Eso era lo que él también había deseado, sin cambiar, desde el primer momento en que lo buscó hasta el final. Sin embargo, él siguió buscándolo y eso causó problemas, y finalmente llegó a esto.

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"Pensándolo bien, fue por mi insensibilidad. Por eso tardé tanto en darme cuenta."

Ante sus palabras, instintivamente quiso girar la cabeza. Quería evitar el enfrentamiento con lo que iba a decir a continuación, quería escapar de la confusión. Pero no pudo.

Ese sentimiento del que estaba hablando, que se había dado cuenta demasiado tarde...

Ya se reflejaba desesperadamente en sus ojos.

"Me gustas."

Finalmente, su confesión cayó.

Fue una confesión tranquila y serena.

Entonces, ¿esta persona... acaba de confesar sus sentimientos por mí?

Lo entendió racionalmente, pero le tomó tiempo aceptarlo.

Al no poder responder y balbucear, él bajó ligeramente la cabeza y sonrió. Luego, al instante, recompuso su expresión.

Cuando lo miró con cautela, él tenía una expresión indiferente, como siempre.

Aunque él no respondía, él continuó hablando sin apresurarlo.

"Lo sé. Sé que te vas a casar pronto, y sé lo que piensas de mí. Dijiste que no entendías por qué hacía tanto por ti."

Entonces, la razón por la que se obsesionaba tanto con él y por la que insistía en ayudarlo con un tratamiento que ya había rechazado dos veces...

Era porque le gustaba. Aunque era increíble.

"La razón por la que me odias, no me la has dicho, pero está bien. Lo entiendo. Supongo que hay circunstancias que no puedes contar."

...¿Era él tan maduro?

Su actitud le resultaba extraña y desconocida.

No, pensándolo bien ahora, siempre había sido maduro desde que lo conoció en la época universitaria.

Era amable con los que le rodeaban y no alardeaba de su posición.

Siempre mantenía su dignidad, incluso rodeado de gente.

Al ver esa actitud, él se había enamorado de él.

Al verlo ahora, recordó de repente el momento en que lo conoció por primera vez.

"Solo tengo una razón para preocuparme por ti y desear que te cures. Yoon Se-won, si realmente no quieres verme, ponte bien."

"...¿Es solo eso?"

"Entonces, ¿qué más puedo hacer? Antes, te habría confesado mis sentimientos."

Diciendo eso, él sonrió levemente.

"Mis palabras de ahora no son una confesión, sino una declaración. Sobre todos los días en los que ya es demasiado tarde. Porque es demasiado tarde para tenerte ahora."

Sus palabras implicaban resignación.

No le pidió que rompiera con Jae-kyung ni que reconsiderara su relación con él, solo deseó su salud.

¿Desde cuándo sería? Si pensaba que se había dado cuenta tarde, significaba que él había tomado conciencia de sus sentimientos hace poco.

Era extraño. Lo único que él había hecho delante de él era rechazarlo, gritarle y echarlo de mala manera.

Pero, ¿cuándo? ¿Por qué?

En ese momento, un pensamiento se le vino a la mente involuntariamente.

'Te extrañé.'

El día que él lo buscó y abrazó a Eun-bom.

En ese momento, él le había dicho eso, con la mirada fija en él.

¿Había venido realmente porque lo extrañaba? ¿No a Eun-bom, sino a él...?

'Por favor, ve a hacerte el examen. ¿Es normal desmayarse a tu edad?'

'...Ve al hospital a hacerte el examen primero. Si no tienes nada malo después de eso, no te buscaré.'

En ese momento, no lo sabía.

Lo que él le había dicho con tanta desesperación.

Él solo pensó que estaba insistiendo porque no quería escucharlo.

Por la obsesión de que no debía seguir chocando con él y no debía exponer a Eun-bom, como si le hubieran lavado el cerebro, ni siquiera pensó en mirarlo de frente.

Era cierto que él, siendo un Alfa, había actuado con arrogancia y había hecho una propuesta absurda cuando apareció por primera vez, pero la cuestión era cuánto tiempo duró esa actitud.

Claro, era cierto que sus problemas de salud comenzaron debido a la aparición repentina de él, el Alfa.

Pero después de enfermar, cada vez que estaba en peligro, podía superarlo con su ayuda.

Es cierto que el primer botón de su relación se abrochó mal, pero eso no significaba que los demás botones también tuvieran que abrocharse mal.

Debería haberlo mirado bien y tomado una decisión más sabia.

Tan pronto como se dio cuenta de eso, el arrepentimiento lo invadió de repente.

Era un arrepentimiento que sentía ahora porque no había conocido la sinceridad de él.

Pero aunque sus acciones hacia él hubieran sido sinceras, aceptar sus sentimientos era otro asunto.

Él sabía lo que significaba el matrimonio para personas como Woo-hyun.

La gente no decía que el noviazgo y el matrimonio eran diferentes?

Que él le quisiera, que sus sentimientos fueran sinceros, era otro problema con respecto a revelar la existencia de su hijo.

Él era, de inmediato, un miembro de una familia chaebol.

La gente de las familias chaebol se casaba entre Alfas Superiores para consolidar su poder y la sucesión.

Woo-hyun sería igual. Si le revelaba la existencia de su hijo, a él, que se casaría con una Omega Superior que beneficiara a su familia...

El problema no era Woo-hyun. El problema era cómo su familia aceptaría al niño.

Por eso, no podía abrir la boca fácilmente.

Además, él había dicho que se daba por vencido porque él había decidido casarse. No podía decirle la verdad, así que asintió en silencio.

Sinceramente, pensándolo ahora, incluso si se casaba, tal como dijo Woo-hyun, no sabía si podría hacerlo con Jae-kyung.

Solo le quedaban sentimientos de culpa hacia él. Él no lo había exteriorizado por consideración a su enfermedad, pero debió sentirse herido al ser rechazado con todo su cuerpo ante sus feromonas.

'...Primero, lo mejor es hacer lo que dice Sunbae.'

En realidad, si su relación con Woo-hyun se resolvía y ya no se encontraban, no había necesidad de casarse a la fuerza.

Después de todo, la idea de casarse fue originalmente para proteger a Eun-bom de él.

Así que lo primero era recibir el tratamiento y recuperar su salud, tal como él dijo.

"...Tengo que hacer una llamada."

De repente, sintió la vibración de su teléfono, lo sacó de su bolsillo y se levantó para salir de la habitación.

En la habitación, sus feromonas seguían flotando. Si las feromonas tuvieran color, toda la habitación se habría teñido de ese color.

Él levantó la cama y se recostó cómodamente.

Cerró los ojos e inhaló profundamente las feromonas.

"Es bueno. ¿Será porque es un Alfa dominante...?"

No tenía forma de saber si un Alfa dominante era mejor o peor que uno normal, ya que no había tenido la oportunidad de oler las feromonas de otros Alfas dominante con tanta comodidad.

Sin embargo, si se atrevía a pensarlo, sentía que sus feromonas debían ser excepcionalmente buenas.

Estaba disfrutando al máximo de las feromonas que flotaban en el aire con los ojos cerrados, sin tener que preocuparse por ser visto.

La puerta se abrió de nuevo y Woo-hyun entró.

"Quería quedarme más tiempo, pero surgió algo urgente en la empresa y tengo que irme."

"Me sorprende que haya estado aquí hasta esta hora. Váyase."

"Volveré mañana, descansa. Ah, tengo que llamar al profesor Park ahora."

"...¿No puedo simplemente descansar en silencio hasta la mañana?"

Le gustaba la paz de estar así, sin interrupciones.

La queja salió antes de que pudiera evitarlo ante la mención de llamar a alguien. Entonces él habló con firmeza y se acercó al botón de llamada.

"Me dijeron que llamara al despertar, así que no hay otra opción."

"...De acuerdo. Entonces hágalo."

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No había nada que pudiera hacer. Suspiró profundamente y asintió, y él sonrió con una expresión relajada y presionó el botón de llamada.

Quería disfrutar de la concentración de feromonas en la habitación por un poco más de tiempo...

Con el paso del tiempo, la gente que entraba y salía, y el abrir y cerrar de la puerta, la concentración se diluiría inevitablemente.

Al mostrar su decepción, él, como si lo hubiera notado, se quitó el abrigo y se lo puso sobre las rodillas.

"Úsalo si lo necesitas."

"...Gracias."

"Sí. Descansa."

Parecía ser algo urgente, ya que se fue de la habitación rápidamente después de decir eso.

Poco después, la enfermera llegó corriendo, y después de confirmar que se había despertado sin problemas, salió de nuevo a buscar al médico a cargo.

Luego, el médico a cargo y varios médicos entraron, y hablaron con él de manera más detallada e íntima sobre su estado, incluyendo lo que él había escuchado de Woo-hyun.

"El tratamiento comenzará mañana mismo. Por hoy, primero termine esto, descanse bien y controle su estado."

Él asintió en silencio ante lo que decían mientras manipulaban la línea del suero.

"Sí... Lo haré."

"Lo primero es la estabilidad, lo segundo también es la estabilidad."

El médico a cargo le insistió varias veces y luego salió con la enfermera.

Para entonces, la concentración de feromonas en la habitación se había diluido mucho.

"Qué pena. Era agradable."

Una vez que lo admitió y lo aceptó, pudo decir con honestidad que las feromonas de él eran agradables.

Estaba jugueteando con los dedos en el abrigo de él que estaba sobre sus rodillas.

La puerta se abrió una vez más y su madre apareció con cara de sorpresa.

"¡Se-won...!"

"Oh, mamá. ¿Acabas de llegar?"

"Sí, ¡corrí mucho, muchacho!"

Su madre gritó y se acercó rápidamente.

Luego acarició su rostro y su cuerpo con ojos llenos de preocupación.

"¿Estás bien?"

"Sí, estoy bien."

"Lo siento. Llegué tarde."

Honestamente, desde que se despertó, había estado hablando con Woo-hyun y con el personal médico, así que no había sentido la ausencia de su madre.

Él negó con la cabeza.

"No, no lo siento. Pero, ¿por qué llegaste tarde?"

No era para regañarla, sino que le dio curiosidad porque pensó que debía haber una razón para el retraso.

Efectivamente, su madre se sentó como si tuviera una historia que contar.

"Oh, eso... En la tienda. Al enterarme de tu noticia, intenté salir lo antes posible, pero un niño entre los clientes empujó el perchero lleno de ropa y se cayó todo. El niño tenía mucha fuerza. Corría mucho."

"Eso pasa a veces."

No era difícil imaginar la escena. A él ya le había pasado una vez. Recordó lo mucho que le costó volver a ordenar y planchar toda esa ropa... Asintió.

"Vaya, me costó mucho volver a ponerlo en pie. Si esa madre no me hubiera ayudado, habría tenido que llamar a otra persona."

"Es muy pesado. Lo compramos diciendo que no se caería, pero una rueda está un poco floja. Iba a cambiarlo de todos modos, pero tengo que pedir uno nuevo pronto."

Sin querer, la conversación volvió a desviarse hacia la tienda. Al decir eso, su madre, como si se hubiera dado cuenta de nuevo, agitó la mano.

"Entonces, ¿cómo está tu cuerpo? ¿Qué te dijo el doctor?"

"Me dijo que estoy bien. Me quedaré hospitalizado unos días más para recibir tratamiento aquí."

No quiso hablar de su enfermedad, así que respondió a la ligera. Entonces su madre se movió e intentó mirar la puerta detrás de ella.

"¿Se habrá ido el doctor? ¿Puedo ir y hablar con él?"

"Acaba de salir. Pregúntele mañana durante la ronda médica. Podrían cruzarse."

Ante sus palabras, su madre dudó un momento y luego se dio la vuelta para mirarlo de nuevo.

"¿Comida?"

"...No tengo mucho apetito."

Después de vomitar el agua, tenía miedo y no quería pensar en comida.

Entonces su madre asintió con el ceño fruncido, como si ya lo supiera por lo que le habían contado.

"Sí, me dijeron que vomitaste mucho. ¿Sabes lo asustado que estaba tu padre? Será mejor que descanses hoy con el estómago vacío."

"Mamá, vete a casa a descansar."

De todos modos, no tenía nada que hacer en el hospital y probablemente se iría a dormir pronto...

Ya que había visto su cara y comprobado que estaba bien, quería que su madre se fuera a casa a descansar cómodamente.

Para su sorpresa, su madre aceptó fácilmente sus palabras.

"Ya que te van a ingresar, tengo que ir a recoger tus cosas de todos modos. Volveré mañana por la mañana. Saldré a la tienda por la tarde."

"Sí, haz eso."

Como ya había estado varias veces, su madre se movió por la habitación con bastante familiaridad. Encendió la televisión y puso el drama que solía ver, y desempacó las pocas cosas que había traído.

Entonces, sintió como si hubiera vuelto a un día normal.

Como si todo el caos de la tarde no hubiera sido nada.

* * *

Woo-hyun, después de salir del hospital de Se-won, condujo el coche rápidamente.

Al mismo tiempo, mantuvo una llamada con Sung-jin a través del Bluetooth del coche.

"¿Qué tan grande es la escala?"

-Aún no lo sabemos. Hay que asumir que el edificio de la Fábrica 1 está casi completamente quemado, y dicen que están haciendo todo lo posible para extinguirlo antes de que se extienda a otros edificios, pero parece que no es fácil.

Cuando Woo-hyun preguntó, Sung-jin respondió con calma. Pero el contenido no era algo que se pudiera tomar a la ligera.

Como era de esperar, Woo-hyun frunció el ceño profundamente y mostró su mal genio de inmediato.

"¿Cómo es posible la gestión del lugar para que un edificio se queme por completo a tres días de la fecha de finalización? Haa, el trabajo que están haciendo es un desastre."

-Dicen que el hecho de que fuera de madrugada en la hora local hizo que la respuesta fuera más lenta. Primero, ven a la oficina rápidamente. Todos están reunidos.

"Llego en 15 minutos."

Woo-hyun chasqueó la lengua ante las palabras de Sung-jin, se revisó en el espejo una vez, cambió de carril y aceleró.

Apenas había logrado hablar con Se-won, que siempre lo había rechazado.

Le agradó el tiempo que pasó con él, ya que Se-won parecía más dócil de lo habitual.

Pero se irritó mucho por la interrupción de ese tiempo tan valioso.

En ese momento, la cara de Se-won, a quien había dejado con prisa, se le venía a la mente más que el incendio de la fábrica y los problemas de la agenda comercial que tenía que considerar.

Apenas llegó a la oficina y entró en la sala de reuniones, los gerentes responsables y algunos ejecutivos ya estaban reunidos, hablando con expresiones serias.

Cuando Woo-hyun también se sentó, el gerente responsable salió y se paró frente a la pizarra con el rostro completamente rígido.

Luego, proyectó algunas fotos y la situación del lugar en la pantalla.

Era una foto de un edificio de la fábrica envuelto en llamas rojas.

"Todavía no han logrado extinguir el fuego."

El incendio se había producido mientras se construía la nueva fábrica y se preparaba su puesta en marcha.

Habían instalado toda la maquinaria y el equipo relacionados en el nuevo edificio, y con este desastre, el dolor de cabeza no era pequeño.

Woo-hyun, estimando la cuantía de los daños, miró las fotos del lugar con el rostro enfadado y abrió la boca.

"¿Cuál es la magnitud del daño?"

"Bueno... La cantidad exacta se podrá determinar cerca del amanecer en hora coreana, supongo. En el caso de la Fábrica 1, la construcción había terminado y ya se había instalado toda la maquinaria y el equipo..."

Él también arrastró las palabras, como si no pudiera hablar, y puso fin a la respuesta.

Woo-hyun también lo sabía. Sabía que cientos de miles de millones de wones se habían esfumado en el aire.

Como era una cantidad que todos los que estaban sentados allí podían imaginarse claramente, Woo-hyun dejó de preguntar y volvió a abrir la boca.

"Entonces, la Fábrica 1 es una cosa. ¿Qué hay de las otras fábricas? ¿Funcionan sin problemas?"

"Ah, eso es... Espere un momento. La información para que se vea fácilmente está aquí..."

Ante la pregunta de Woo-hyun, el empleado que dirigía la situación bajó la mirada a su ordenador portátil por un momento.

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* * *

Lo único que la empresa podía hacer de inmediato era desear que el fuego se extinguiera rápidamente, pero aun así, tenían que preparar contramedidas.

Woo-hyun salió de la sala de reuniones cerca de la medianoche, después de la larga reunión, y regresó brevemente a su oficina.

Entonces, Sung-jin, que lo había seguido, le preguntó.

"Por cierto, ¿cómo está el señor Se-won?"

"...Por ahora, está bien."

"¿Qué significa 'por ahora, está bien'?"

Sung-jin le preguntó de inmediato ante la ambigua respuesta de Woo-hyun. Woo-hyun hojeó los documentos que no había podido revisar por salir corriendo de la oficina y los acercó a él.

"Significa que no es tan grave para haberse desmayado de repente."

Ante la respuesta tranquila de Woo-hyun, Sung-jin se sentó en el reposabrazos de un sofá cercano.

"Entonces, ¿es realmente el final?"

"¿El final?"

"¿No ibas a olvidarte del señor Se-won? Estuviste sufriendo por él. ¿No estuviste luchando para olvidarlo?"

Los ojos de Sung-jin eran perspicaces. Ante las palabras de Sung-jin, Woo-hyun bajó la mirada a los documentos sin negar nada.

"Sí, eso fue cierto. Pero aún no es el final."

"¿Y esto qué significa...?"

Sung-jin frunció el ceño con frustración, sin entender. Se sentía cómodo con su expresión porque estaban solos.

Woo-hyun continuó hablando sin siquiera mirar a Sung-jin.

"Acordé ayudarlo con el tratamiento hasta que se recupere. Parece que no puede oler ninguna otra feromona que no sea la mía."

"...¿El señor Se-won?"

"Sí."

Woo-hyun respondió brevemente a la voz de Sung-jin que preguntaba con asombro.

Entonces, Sung-jin ladeó la cabeza, se cruzó de brazos y preguntó de nuevo.

"...Entonces, ¿el señor Yoon Se-won también te quiere?"

"No."

"Dijiste que solo puede oler tus feromonas, ¿no es porque te quiere?"

"Sí."

Woo-hyun respondió de nuevo con una respuesta breve y sin sinceridad, y luego, como si hubiera terminado de leer los documentos, firmó.

Sung-jin, que había vivido toda su vida como un Beta y no sabía mucho sobre feromonas, no podía entender la relación entre Woo-hyun y Se-won.

Así que solo sacudió la cabeza y se encogió de hombros.

"...Es muy difícil de entender para mí, que no soy nada de su mundo."

Luego, Sung-jin se levantó del sofá y salió de la oficina del director.

Sung-jin también tenía trabajo pendiente, así que si Woo-hyun no se iba a casa de inmediato, pensaba trabajar con él.

Woo-hyun, que se quedó solo, dejó de leer el informe y recordó de nuevo lo que había sucedido en el hospital.

La verdad era que Woo-hyun no tenía ninguna intención de confesar sus sentimientos a Se-won.

Porque aunque lo hiciera, ya era demasiado, demasiado tarde. Se-won ya era un barco que había zarpado para él.

¿De qué serviría confesarle sus sentimientos ahora a alguien que ya había tenido citas con otro Alfa y estaba a punto de casarse?

Pensó que una confesión cuya única respuesta era el rechazo era inútil, y él mismo ya había intentado dejar de lado esos sentimientos.

Por lo tanto, intentó ocultar ese sentimiento hasta que desapareciera por sí solo.

Sin embargo, al pensar en la imagen de él extendiendo la mano y llorando en su pecho pidiendo feromonas tan pronto como lo vio, le dolió el corazón y no pudo evitar hablar.

Era la primera vez que veía a un adulto llorar y sufrir con tanta fuerza.

Al ver a él, que había sido el primero en extenderle la mano, suplicando por sus feromonas, sintió que perdería la razón por un momento.

Él quería que dejara de ser terco y que pidiera su ayuda para curarse.

La razón por la que quería ayudarlo tanto era porque lo quería.

Deseaba sinceramente que se pusiera bien.

Para mostrarle su sinceridad, esa confesión simplemente salió de él sin dudarlo.

Era bastante sorprendente.

Era la primera vez que le confesaba sus sentimientos a alguien.

No solo una confesión de amor, sino la primera confesión en general.

Por eso, se sorprendió de que se sintiera tan tranquilo.

'Me gustas.'

A pesar de que era la primera vez que le decía a alguien que le gustaba, no se sintió avergonzado ni arrepentido.

Al contrario, pensó que se habría arrepentido sinceramente toda su vida si no hubiera dicho esas palabras.

Porque en el momento de la confesión, se sintió increíblemente aliviado y feliz.

No sabía que el hecho de que él supiera sus sentimientos, y que sus sentimientos ya no fueran solo suyos, sería un placer tan grande.

Además, Se-won, al escuchar la confesión, no se sintió incómodo ni se enfadó. Solo dijo una cosa después de escucharlo en silencio durante un buen rato.

'...¿Es solo eso?'

Sí. Dijo que era todo. Se esforzó por decir que se había rendido con él.

Pero, por supuesto, no era cierto.

Quería evitar a toda costa que se casara con ese otro Alfa y quería tenerlo. No podía ser solo eso.

Odiaba terriblemente tener que enviarlo a otro Alfa después de que se recuperara, y si fuera necesario arrodillarse, lo haría para rogarle su amor.

Pero Se-won lo odiaba.

Cada palabra que escuchó directamente de su boca lo demostraba.

'Te dije que no me obligaras, que no tengo la obligación de quererte ni la razón para verte.'

'Realmente te odio... Por favor, déjame en paz y desaparece.'

Si lo odiaba y lo rechazaba tanto, ¿cómo podía atreverse a pedirle que lo mirara?

Si solo necesitaba estas feromonas, ¿cómo podía ser tan codicioso?

Woo-hyun dejó la pluma estilográfica que tenía en la mano y se levantó.

Luego se acercó a la ventana. La vista nocturna de Seúl era realmente espectacular, pero a pesar de eso, hacía que la gente se sintiera sola.

Woo-hyun finalmente sacó un cigarrillo y se lo puso en la boca.

Lo encendió, quemando la punta, y dio una calada profunda.

El cigarrillo siempre le daba una sensación de plenitud. A pesar de saber que no era bueno para su salud, aliviaba el estrés por un momento y despertaba sensaciones agradables.

Sin embargo, hoy no era así.

Al igual que el humo blanco que llenaba sus pulmones y luego se escapaba sin fin, su amor por Se-won era igual.

Llenaría su corazón y finalmente desaparecería sin dejar rastro, como el humo.

Porque el humo no se podía atrapar con las manos.

* * *

Tuve un sueño.

"¡Papá! ¡Mira aquí!"

Eun-bom, que había corrido lejos sola, saltaba y agitaba ambas manos hacia mí.

Eun-bom, que pisaba por primera vez la arena de la playa, corría con entusiasmo, pero de vez en cuando volvía y extendía la mano hacia él.

"Vamos juntos, papá."

Entonces tomaba la mano de Eun-bom y caminaban juntos sobre la arena.

Cuando Eun-bom corría mirando solo hacia adelante y se lanzaba sobre la arena mojada por la marea, él apretaba la mano que sostenía y la detenía.

"Eun-bom, es peligroso."

Le dijo eso por miedo a que se mojara los zapatos, y Eun-bom se rio pícaramente e intentó arrastrarme al agua.

No sabía cuándo había crecido tanto, ya que siempre le había parecido pequeña, pero el niño tenía mucha fuerza.

"¿Eun-bom? Dije que era peligroso."

Aunque intentó guiar al niño hacia la orilla para que no fuera hacia las olas porque era peligroso, no pudo tirar de él con su fuerza.

"¡Ah...!"

Entonces, cuando su cuerpo estuvo a punto de caer hacia adelante, de repente sentía que se abrazaba un cuerpo grande por detrás.

Era un abrazo familiar, inolvidable.

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Él le había rodeado la cintura con los brazos, sosteniéndome para que no cayera.

El niño, sin darse cuenta, soltó su mano y corrió por la playa sonriendo, mojándose los pies.

La cálida temperatura corporal y el suave olor a feromonas que sentí al ser abrazado por él...

Pero, ¿quién era él?

Justo cuando estaba a punto de darse la vuelta para comprobar quién era.

Se despertó de golpe.

Estaba acostado en la habitación del hospital, y se veía el cielo del amanecer a través de la ventana, antes de que saliera el sol.

Las feromonas que le habían abrazado suavemente ya no se sentían, como si se hubieran disipado.

Solo podía sentir un ligero olor a feromonas en su ropa o en la manta si se concentraba mucho.

Sentía una sensación de arrepentimiento.

Así que antes de dormirse, abrazó su ropa junto con la manta.

Gracias a eso, pudo dormir profundamente después de mucho tiempo.

Se revolvió en la manta, sintiéndose bien por el olor a feromonas que todavía flotaba alrededor de su nariz.

Quería oler el olor impregnado en su ropa un poco más fuerte.

¿Cuánto tiempo hacía que no me acostaba tan tranquilo esperando el sueño?

Ese pensamiento le hizo sentir una punzada en el corazón.

Pero en un rincón oscuro de la habitación del hospital, en el sofá donde no llegaba la luz, sentía que había alguien sentado.

"¿Es mamá?"

No, no era su madre.

Woo-hyun estaba allí.

¿Desde cuándo estaba allí? ¿No se había ido?

Inconscientemente, acercó su manta y la olió.

Pensó que sus feromonas se habían transferido a la manta o a su ropa porque había dormido abrazando su ropa, así que simplemente aceptó el débil olor que quedaba.

Pero no era así. Él había estado liberando feromonas en esta habitación por él todo este tiempo.

"¿Cuándo llegaste...?"

Cuando le preguntó, él finalmente se levantó y se acercó.

"No hace mucho."

"Aún no ha amanecido..."

"Por eso vine. Solo para verte dormir y marcharme."

¿Y aun así, en lugar de sentarse a mi lado mientras dormía, se sentó como una estatua en el sofá lejos de mí?

Y eso, después de haber esparcido feromonas por toda la habitación.

"¿Liberaste feromonas a propósito?"

"Dije que es bueno que te expongas a ellas con frecuencia. Y al verte dormir abrazando mi ropa, me pareció necesario."

Que me descubriera haciendo eso... Le dio un poco de vergüenza.

Su madre se había ido a casa por la noche y su quedo solo, así que lo había abrazado sin preocuparse por nada.

Si alguien le hubiera visto, sinceramente se habría contenido por mantener la dignidad de ser adulto.

Tosió ligeramente por la vergüenza, y él se sentó en su cama en lugar de en la silla y lo miró.

"Tú... tuviste una cita con esa persona."

"...¿Sí?"

"¿Lo amas?"

"...¿Por qué, de repente?"

Su rostro se tiñó de confusión ante su pregunta cuidadosa y en voz baja.

¿Que si amaba a Jae-kyung?

...No, no lo amaba.

Es cierto que tuvo una cita con Jae-kyung y salió con él un par de veces. Y hablaro por teléfono todos los días e intercambiaron saludos, pero...

No sentía que estuviéramos saliendo.

Aunque siempre pensaba que si me casaba, sería con él...

Todavía era cauteloso para acercarse y abrir su corazón.

Para empezar, ¿no había cometido un error con él?

Él era una buena persona. Empezó a sentir afecto por él al ver lo amable.

Probablemente nos habríamos acercado más si hubiéramos seguido saliendo, pero en ese momento, me encerré en casa.

Claro, habló con él y lo llamó mientras estaba en casa, pero al sentirse culpable, su corazón se fue distanciando, y gradualmente su afecto se convirtió en una carga.

Lo rechazó abiertamente vomitando delante de él.

Incluso lo apartó, diciéndole que sus feromonas eran horribles y que no se le acercara.

En el momento en que lo vió acercarse, rociándose tanto desodorante de feromonas que su ropa estaba mojada, incluso sentía autodesprecio.

Aun cuando él lo consoló diciendo que estaba bien, y aunque hablaron todos los días... ¿No se habrá alejado el corazón de Jae-kyung también un poco de mí?

Y ahora lo sabía.

La razón por la que Woo-hyun seguía apareciendo delante de él. Él no sabía nada de la existencia de su hijo.

Una vez que termine el tratamiento y termine completamente con él, ¿no podré vivir solo con Eun-bom como hasta ahora, incluso sin casarme con Jae-kyung?

Para entonces, Woo-hyun también se casaría con una Omega de una gran familia, y Jae-kyung también...

Encontraría a alguien mejor que yo y tendría un amor hermoso.

"¿Yoon Se-won?"

"¿Ah, sí?"

Ahora que lo pensaba, él le había preguntado si amaba a Jae-kyung.

Pero no podía decirle la verdad.

Woo-hyun tenía que creer que se iba a casar con él.

"Sí, es cierto. Lo amo... si me voy a casar..."

"¿Qué quieres decir?"

"¿Disculpe?"

"Tus palabras de ahora sonaron extrañas."

¿Qué dije hace un momento?

Que lo amo y que por eso me voy a casar. ¿No fue eso lo que dije?

No podía recordar exactamente lo que había dicho.

Otros pensamientos todavía llenaban su cabeza de confusión.

Cuando lo miró aturdido, él preguntó.

"Tú dijiste que querías encontrar un padre adecuado para Eun-bom antes de que entrara en la escuela primaria."

"...Lo dije."

El día que se desmayó delante de él y lo llevaron al hospital, le dijo que preferiría tratar con la persona con la que se casaría, en respuesta a su sugerencia de tratarse con él.

Asentía ranquilamente al recordarlo, y él lo miró con ojos ligeramente inquietos.

"Durante seis años criaste a tu hijo solo. Y de repente tuviste una cita. No un matrimonio natural por noviazgo, sino un Alfa que conociste por una presentación..."

¿Qué pasa? ¿Qué quiere decirme? ¿Por qué, con esa mirada...?

"¿La razón era para darle un padre completo a tu hijo antes de que entrara en la escuela primaria? ¿Fue solo eso?"

"...¿Qué está tratando de decir?"

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De repente, la ansiedad le invadió. Era natural que lo asustara cuanto más se adentraba en sus circunstancias e intentaba profundizar en ellas.

Sentía que al final, descubriría la verdadera razón de esta ansiedad, lo que no debía saber.

"¿De verdad lo amas? ¿No solo estás buscando un Alfa adecuado para casarte?"

"...De todos modos, ya. Tú..."

No es de tu incumbencia...

De todos modos, la respuesta era una. Lo que él quería era una cosa.

Que él dejara por completo de quererlo debido a su matrimonio y que ya no apareciera delante de ellos.

"Lo siento, pero preferiría que no te metieras en eso, Sunbae."

Se esforzó por decirlo.

Entonces se rio con desprecio y torció la comisura de sus labios como si estuviera consternado.

"Yo te respeté. Pensé que no tenía otra opción si decías que te gustaba ese Alfa y querías casarte con él..."

"¡Es cierto que no tienes otra opción! Me voy a casar con él."

Si él seguía queriendo quedarse a su alrededor, no tenía más remedio que rechazarlo más fuerte y decirle palabras duras.

Tenía que dejarlo antes de que supiera demasiado sobre su hijo.

Pero lo sujetó con voz firme y dijo.

"¿Un matrimonio con alguien a quien no amas, solo por tu hijo, es un matrimonio de verdad?"

"¿Qué crees que es el matrimonio, un romance? Si estás en tu posición, ¿no es obvio? Al fin y al cabo, tú también te casarás con una Omega dominante de una familia adecuada. Todos los chaebols de familias Alfa hacen eso."

"¿Y tú también ibas a hacer eso, agarrando a un Alfa normal y viviendo así? ¿Por qué no sueñas más grande? El gran Alfa de esa gran familia del que hablas, dice que te quiere. ¿No te seduce esa historia?"

"¿Qué dice?"

Se estremeció por su voz y tono repentinamente afilados.

El ambiente era bueno, pero de repente no sabía por qué estaban hablando de esto.

Se sentía bastante bien cuando él vino a su habitación por primera vez y liberó feromonas.

Incluso sentía una disculpa interna por los momentos en que lo había rechazado, y su resentimiento u odio hacia él se había calmado un poco.

Pero ¿por qué tenía que volver a hablarme así de repente?

Una repentina decepción le invadió y sentía un pinchazo en el pecho.

Cuando estaba a punto de abrir la boca para decir algo, incapaz de contenerme.

"Si es así, cásate conmigo."

Tuvo que cerrar la boca ante las palabras que finalmente salieron de su boca.

¿Acaba de...?

¿Qué acaba de decir esta persona?

<Continuará en el siguiente volumen>