8: Karma
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8:
Karma
¡Zas! La sensación en su cara fue como si una
mano áspera lo golpeara. Sintió un frío glacial y oyó el sonido de gotas,
¿acaso le habían salpicado agua en la cara?
Cuando recuperó la conciencia, su cuerpo
empapado en agua fría estaba helado. Al inhalar, le dolía el pecho y la tos
seca era frecuente. Won-jin abrió los ojos con dificultad y se dio cuenta de
que estaba atado a una silla de metal delgada.
"Levántate."
"...Ugh, ahh,"
Seguía teniendo dificultad para respirar y su
cuerpo no se movía como quería. Estaba frustrado. Su cuerpo estaba empapado y
frío, pero ardía como si estuviera en llamas.
La primera vez que Won-jin vio su propio
cadáver aquí, se rio con desdén porque no le parecía real. Pero ahora, con la
cabeza a punto de estallar, todo cobraba sentido.
Seo Kyung-won, quien había secuestrado el
cuerpo de Won-jin y había encerrado a Han Jae-yeong. Y ahora, Seo Kyung-won,
quien incluso lo había empujado por las escaleras cuando intentaba escapar. Con
esa actitud, ¡cómo se atrevía a mantenerlo cautivo de nuevo con tanta
serenidad!
"..."
"¿Me estás mirando fijamente... porque
ahora tienes algo que decir? Si tienes algo que decir, dilo pronto."
...No, mirarlo fijamente a los ojos era, en
cambio, por miedo. Estaba tratando de confirmar si la persona frente a él era
realmente el tipo que él conocía.
Él era el poseído, pero era como si otra alma
hubiera poseído el cuerpo de Kyung-won. Parecías otra persona. Así que, antes
de que te tema más, ahora mismo.
"Esto... suéltame. No cometas más
crímenes. Yo no tengo la culpa de nada..."
Lo único que ocultaba, lo único que no podía
decir, era la simple frase de que él era Won-jin. Incluso eso no podía salir, e
incluso si intentaba dar a entender la verdad, solo surgiría el malentendido de
que estaba imitando a Won-jin.
"Estoy cansado... Ya, estoy harto."
"Si quieres salir, explícame bien. Si
dices que reapareciste, ¿cómo es que fue justo—!"
"¡Basta... basta! ¡Basta! ¡Tú también, basta
ya, por favor...!"
Al gritar con todas sus fuerzas, Won-jin
rápidamente arrugó la cara por el dolor punzante en el costado.
"¿Sabes cuántas veces has repetido las
mismas palabras? Realmente me estás cansando, estúpidamente con una persona que
ya está muerta... ¿Estás tan desesperado por devorar a alguien?"
"...¿Qué?"
"¿No me oíste? Digo que estás desesperado
por devorar a alguien. ¿Qué te pasó? ¿Acaso te volviste loco por no recibir
guía?"
"Es extraño... Ah, sí. Entonces, veamos
hasta dónde puedo llegar a ser más extraño."
"¡Suelta, esto, suelta! ¿Qué estás
haciendo?"
Kyung-won, que desató las cuerdas de la silla,
agarró el brazo de Han Jae-yeong y lo arrastró. Won-jin intentó morderle la
mano y se resistió con todas sus fuerzas.
"...Haa."
La muñeca, con marcas de dientes al instante.
Kyung-won, mirándola, no necesitaba fruncir el ceño para que se supiera lo que
pensaba. El golpe de la mano de Kyung-won, que se había acariciado el pelo, fue
instantáneo.
¡ZAS! El sonido que hizo al derribar a su
oponente resonó vergonzosamente.
"Ni siquiera un perro... mordiendo y
molestando." El murmullo era gélido, como si no pudiera dejar esa marca
desagradable en su cuerpo ni por un instante. Kyung-won, que se frotó la muñeca
para ver si la marca había desaparecido, se arrodilló y le acercó la cara.
"Realmente no entiendo cómo sabes cómo
escapar, pero no puedes pensar en una forma de salir vivo. Si realmente no
tienes nada que ver con Won-jin, entonces no tienes nada que ocultar,
¿verdad?"
"Tú también, ¿estás dispuesto a creerme
diga lo que diga? Yo... solo quería salvarte. Pero si hubiera sabido que esa
elección me arrepentiría tanto... si hubiera sabido que terminarías así, no
habría ido a guiarte en ese momento."
A medida que sus palabras continuaban, las
emociones lo invadieron. Sus labios temblaban, perdiendo su color oscuro.
"...Sí. Si todavía no tienes intención de
responder a mi pregunta, entonces puedes vivir aquí para siempre."
Kyung-won, que anhelaba a la persona frente a
él, pero no la reconocía, arrastró a Han Jae-yeong con el mismo rostro cínico.
Este lugar donde yacía el cadáver de Won-jin. Kyung-won, que había atado las
cuerdas al marco de metal de la cama, ahora las ataba alrededor de las manos de
Han Jae-yeong. Repetía actos crueles e indecibles hacia la persona más
preciada.
"Si pasas tiempo junto al cadáver, tus
pensamientos también cambiarán."
"¡¿Qué?! ¡¿Qué
demonios es eso?! ¡Suelta, suelta esto ahora mismo...!"
Seo Kyung-won... ¿este loco de mierda de
verdad quiere que me quede con mi cadáver?
"¡Seo, Seo Kyung-won! ¡Seo
Kyung-won!"
Pero, por ridículo que pareciera, esa era su
realidad. Poco después, todas las luces del sótano se apagaron rápidamente. Lo
único que quedaba eran él y el cadáver. Sí, un cadáver. Por mucho que fuera su
propia imagen, al final era un cuerpo frío. De hecho, era precisamente por ser
su propia imagen que sentía que se volvería loco.
...Además, odiaba la oscuridad. A diferencia
del espacio que antes era más amplio, este era demasiado estrecho. Por eso
sentía el pecho aún más oprimido.
"Hukk, ah, ugh..."
Su pecho subía y bajaba rápidamente, exhalando
respiraciones ásperas.
El sudor frío que goteaba empapaba su camiseta
de algodón rasgada y agujereada, haciéndola lucir aún más deplorable. Había
pensado que la sensación de que alguien invisible le apretaba el cuello ya la
había superado hace mucho tiempo.
Sintió que el ataque de pánico que lo había
acompañado desde la muerte de su compañero hasta el primer encuentro con
Kyung-won comenzaba de nuevo. Se agarró el cuello, donde le costaba respirar, y
sus ojos se humedecieron. Está bien, todo
estará bien, se dijo. Se llevó las manos atadas con fuerza a la cara. El
sonido de su respiración, amortiguado por las palmas de sus manos, era claro.
Respiraba bien.
Boom,
boom. Boom. Booom. Esta vez, intentó
agarrar su pecho que latía inestablemente, pero sus manos no alcanzaban.
"...Ah,"
¿El latido incontrolable no se detendría
nunca? Tenía miedo de que se detuviera en cualquier momento. Su cuerpo era el
de Han Jae-yeong, así que los síntomas que sentía quizás eran solo cosa de su
mente. Aun así. Ahora mismo, le servía cualquiera...
"...Ayúdame, por favor."
* * *
Sin vacilación innecesaria, el sonido de los
golpes continuó en la puerta de la oficina de la directora del centro.
Kyung-won, que esperó la respuesta sin decir nada, entró al recibir el permiso,
pero no pronunció una sola palabra sencilla sobre por qué lo habían llamado.
Pudo haber intercambiado un simple saludo,
pero frente a ella, sus movimientos se volvían rígidos por sí solos. Aun así,
Kyung-won, que estaba aturdido, no comprendió de inmediato las palabras de la
directora y tuvo que volver a preguntar.
...¿Que le asignaría un nuevo guía y que de
ahora en adelante debía llevarlo consigo a las misiones?
"Yo, yo no he disuelto mi equipo, ¿cómo
puedo salir con un nuevo guía?"
"¿Y qué? En una situación en la que no se
sabe cuándo regresará el guía Won-jin, ¿crees que alguien dirá algo si te
asigno un guía?"
"Pero usted sabe bien que, a menos que
sea Won-jin, mi cuerpo no lo acepta, ¿verdad?"
Inesperadamente, ella continuó respondiendo
con calma. Había anticipado que la directora se reiría de su inusual comportamiento.
"¿Has mostrado alguna actuación destacada
en las misiones que has tenido últimamente? El público incluso sospecha que
algo anda mal contigo. Además del guía Won-jin... Seo Kyung-won, puedes recibir
la guía de cualquiera."
"Yo, yo no sé de qué está hablando...
Pero es un hecho que se ha extendido por el centro durante años que mi
constitución no es compatible con nadie más que Won-jin, ¿no?"
Nunca esperó que le respondieran algo así...
"¿Crees que estoy comprobando la
veracidad de algo? Bueno, yo tampoco tuve la intención de ocultarlo todo este
tiempo... Solo que me dio pereza corregir los rumores que ya se habían
extendido, y ¿creíste que yo realmente no lo sabría, Seo Kyung-won?"
Para estas alturas, Kyung-won debería haberle
dicho "lo siento". Al ver a un Kyung-won inusualmente callado, la
directora se levantó y se sentó en el borde del escritorio. Con las piernas
cruzadas y la punta de un zapato de tacón afilada, acarició la mejilla del
Esper maleducado.
"Soy como tu tutora... ¿Crees que hay
algo que yo, Seo Kyung-won, no sepa sobre ti?"
"..."
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A diferencia de su voz y comportamiento
suaves, sus ojos, sutilmente fruncidos, proyectaban un frío escalofriante. Un
Esper con poderes especiales no tendría por qué sentirse intimidado por una
persona común, pero Kyung-won siempre bajaba la guardia frente a la directora,
como un animal entrenado a la fuerza.
"Pero, eso..."
Tenía que decir algo. No podía quedarse
callado por más tiempo. Pero por más que buscaba palabras adecuadas en su mente
caótica, todas le parecían insatisfactorias.
"Sea lo que sea... la compatibilidad con
el guía Won-jin es muy superior a la de otros guías, ¿así que la eficiencia en
las misiones no sería diferente?"
"Exacto. Una
excelente compatibilidad suele brillar en las misiones... Pero esa persona te
ha convertido en un niño. Te ha vuelto demasiado humano. Justo cuando pensé que
era hora de apartarte, es una suerte que haya desaparecido tomando una
licencia. Incluso si el guía Won-jin regresa, te sugiero que continúes el
equipo con el guía que te acabo de asignar."
Kyung-won quería refutar con todas sus fuerzas
si era posible. Sin embargo, no tardó en darse cuenta de que no había forma de
rechazar la oferta, y no solo por la incomodidad que sentía hacia la directora
del centro.
Al fin y al cabo, Won-jin no podía resucitar.
Él no había podido encontrar un Esper con esa habilidad.
Por lo tanto, ahora debía aceptarlo. Era el
momento de hacerlo. El hecho de que Won-jin, que había muerto y desaparecido,
nunca volvería a estar frente a él... que tal milagro nunca le ocurriría.
"..."
Siempre había sido un solitario, peor que los
gatos callejeros, incapaz de construir relaciones con nadie.
Kyung-won salió de la oficina de la directora
y, siguiendo la orden de atacar mientras el hierro está caliente, dio pasos
pesados y reacios. Una entrevista con un guía, de todos modos, era con la
persona que ella le había recomendado, así que no podía rechazarla.
"¡Hola! Soy Yoon Ha-na."
Por lo tanto, esta entrevista definitiva, que
tuvo lugar en la sala de medición, no sería más que un proceso innecesario.
"Aunque tengo muchas deficiencias...
¡espero que nos llevemos bien! ¡De verdad, me esforzaré mucho!"
"...¿Cuántos años tienes?"
"¡Veinte este año!"
...Veinte. Veinte años. ¿Fue esa la edad en la
que conoció a Won-jin por primera vez?
Won-jin tenía veintiséis años cuando lo
conoció por primera vez, y Kyung-won, como Won-jin en aquel entonces, se
encontraba ahora con una joven pareja de veinte años. Una extraña conexión hizo
que sus ojos, que solo habían estado mirando la mesa, se unieran.
Una existencia que no se parecía en nada a
Won-jin. Que no se había despojado de su aire infantil. ¿Se habría sentido
Won-jin así cuando lo vio por primera vez? ¿Una imagen infantil, por eso se le
acercó?
"...Vamos a medir tu guía primero."
Por alguna razón, no sabía la causa de la
sensación de que algo se le había posado encima. ¿Sería porque el encuentro con
el joven guía de veinte años le recordaba a la relación entre Won-jin y él en
el pasado?
De todos modos, no debía hacer ninguna
suposición. Una vez que se daba cuenta de algo, le costaba quejarse. La
relación que terminó llena de arrepentimiento seguía persiguiéndolo.
Los pensamientos no se borraban ni siquiera
mientras recibía la guía del otro. Solo se hacían más intensos.
No era una guía con un aroma agradable como la
de Won-jin, ni le producía una sensación de comodidad, sino una energía de guía
extremadamente ordinaria. El número digital que apareció en el dispositivo que
cada uno llevaba en la muñeca era un 62% de compatibilidad, eso era todo.
"...Uhm, de hecho, ¿no es famoso que el
señor Seo Kyung-won no es compatible con nadie más que con el guía Won-jin?
¡Pero me dijeron que mi compatibilidad conmigo era buena según los resultados
de la prueba de ampolla previa! Así que me sentí muy especial... pero es un
número un poco insignificante..."
"..."
Los resultados de la prueba previa mostraron
compatibilidad... ¿La directora del centro le había dicho que dijera eso?
Bueno, eso le habría servido para mantener su propia imagen. En lugar de
revelar que una historia tan extendida era una mentira.
"De todos modos, escuché que el guía
Won-jin solicitó una licencia indefinida, pero me preocupó tanto desde ayer que
no pude dormir, sentía que estaba forzando mi camino en su lugar. Incluso si lo
rechazaba por vergüenza, la directora me recomendó... Es una situación en la
que es un poco vergonzoso que sea un número normal y no alto, de verdad. ¡Ah!
Pero no se preocupe, si el señor Won-jin regresa, me retiraré automáticamente,
así que no me mire mal, por favor."
...Simplemente, a Kyung-won le pareció
ruidoso.
¿Sería la arrogancia de la juventud el hecho
de que hablara sin reparos frente a alguien que no reaccionaba? Yoon Ha-na
continuó hablando sin una pizca de incomodidad. Su actitud afable era bastante
adecuada para la vida social, pero el hecho de que su interlocutor fuera
Kyung-won era una barrera.
Por alguna razón, le irritaba. ¿Qué habría
pasado si él hubiera tratado a Won-jin con una actitud tan afable? El
arrepentimiento por el tiempo pasado solo creaba un pesar innecesario. ¿Qué
habría cambiado si no hubiera actuado con un orgullo tan mezquino y hubiera
aceptado las emociones tal como venían?
"De todos modos, ahora que somos un
equipo... ¿puedo llamarlo 'hermano'? ¡He visto muchísimos videos del señor Seo
Kyung-won!"
La afabilidad que se desprendía naturalmente
de la naturalidad del otro. Él no la poseía y la falta de ella, que debería
haberla tenido, hizo que sus acciones pasadas se convirtieran en karma,
pesándole gravemente.
* * *
"Disculpe. ¿Tiene la invitación? Por
favor, muéstremela."
"Aquí
tiene."
"Ah... es usted de Ripley Company.
Encantado de conocerle, adelante. Espero que disfrute su tiempo aquí."
Este evento reunió a figuras secundarias de la
Cumbre Mundial de Desarrollo Social, o a funcionarios clave de centros de
varios países, y finalmente a compañías farmacéuticas bajo la Asociación de
Agentes.
"¿Están todos bien?"
"¡Oh, David! ¡Cuánto tiempo sin verte! ¿Y
quién es él?"
Una de las empresas que superficialmente había
establecido una colaboración con el centro y distribuía y fabricaba
medicamentos relacionados, ocupaba su lugar. El fundador de Ripley Company,
David Jung. Se acercó a un grupo de personas.
Je-han, de pie a su lado, solo sonreía, pero
su apariencia llamativa captaba la atención incluso bajo el espléndido
candelabro. Siguiendo la señal de David, Je-han le estrechó la mano
amablemente.
"Encantado de conocerle."
"Ah. Esta es una persona que aprecio
mucho."
"¿Tú dices eso de alguien? Parece que son
como de la familia. A mi edad, envidio mucho esas relaciones."
Las comisuras de la boca de las dos personas
se elevaron lentamente al escuchar la palabra "familia". David, esta
vez, preguntó sobre "ese día".
"Por cierto. ¿Han encontrado una forma de
solucionar el problema desde aquel incidente?"
"¿Aquel incidente?"
"La misión en la que Washington D.C.
solicitó el despliegue. Todavía no ha habido una declaración oficial en la
cumbre."
Dado que ellos también eran filiales de la
Asociación de Agentes, David también había oído hablar de la misión
ultrasecreta de ese día. Así que el flujo de la conversación era tan cómodo que
no había preguntas como "¿cómo te enteraste?".
"Por ejemplo... ¿no lograron encontrar
una solución para la nueva criatura de portal?"
"No. No es eso... Es más bien que no lo
hemos especificado, considerando la confusión que se generaría entre el público
si hiciéramos una declaración oficial. No puedo darte más detalles. Por ahora, debes
saber eso."
Como era de esperar, al ser solo un
funcionario, las respuestas que obtuvo al indagar un poco más fueron formales.
"Hubo un tiempo en que conseguí una
página web donde circulaba el video de ese día... Por mucho que intenten
ocultarlo, el público acabará enterándose algún día, ¿no cree?"
"Hmm... Nosotros también quisiéramos
encontrar a la organización que liberó el portal antes de que la situación se
agrave. Bueno, es un asunto complicado."
"...Ah. Por cierto, ¿cómo está el señor
Helburton? No he tenido noticias suyas últimamente."
Helburton. La pregunta de David, que tenía una
amistad con él, también era natural, pero el funcionario parecía reticente a
hablar. Helburton, desaparecido desde el incidente de la criatura de portal
excepcional en Washington. Su situación no podía ser revelada tal cual.
Y aquí, David, que no podía ignorar que la
razón de la desaparición de Helburton estaba relacionada con su organización
antigubernamental, se preguntaba si revelaría algo, y estaba buscando el
paradero del desaparecido. Dado que aún no se había hecho una declaración
oficial clara y la red de investigación no se había estrechado, no había nada
de qué preocuparse.
Este asunto sería enterrado para siempre.
Dejar al descubierto que una figura de alto nivel estaba relacionada con una
organización antigubernamental, no solo arruinaría la imagen de la asociación,
sino que también podría ponerlos a ellos en una situación difícil.
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"...Parece que tampoco ha podido
contactar con él. ¿Le habrá pasado algo? De todos modos, lo entiendo. Le
contactaré más tarde. Bueno, eso es todo. Fue un placer hablar con usted."
Los seres humanos son inherentemente
contradictorios. Incluso aquellos que se unieron sin excepción para crear un
mundo mejor, se preocupaban por su propia posición. Bajó las comisuras de los
labios que se habían curvado hacia arriba y chocaron sus copas de vino.
"Que siempre podamos esforzarnos por un
mundo de paz."
"¿Estará
muerto?"
"No lo sé... Pero si aún no lo han
encontrado, al menos no debe estar vivo, ¿verdad? Quizás se suicidó tirándose
de algún sitio."
"...Pensé que Helburton era una persona
con la que tenía intereses en común, pero de repente se asustó o se sintió
culpable. No lo entiendo. Y luego borró la información y desapareció... Es un
personaje ridículo. Si iba a hacer eso, no debería haber mencionado que sus
acciones estaban relacionadas con una organización antigubernamental."
Helburton, desaparecido, había dejado una
nota. En ella, expresaba su deseo de expiar todas sus acciones relacionadas con
la organización antigubernamental.
A principios de
febrero, el portal lanzado por la organización antigubernamental, y Helburton,
quien se unió al proyecto a mitad de camino. David, quien envió a alguien a
recoger los archivos experimentales del proyecto que poseía Helburton, recibió
la respuesta de que la información clave ya había sido eliminada.
"Bueno, de todos modos, las agencias
estatales tampoco han llegado a una solución, ¿verdad? A juzgar por la falta de
progreso. Vinimos a disfrutar de un buen lugar, así que olvidemos las
preocupaciones y divirtámonos."
"Hmm. Por cierto... Je-han. ¿Encontraste
a tu gato? Dijiste que lo habías perdido antes."
"Todavía no. Aunque quiero ir a buscarlo,
solo estoy esperando la oportunidad."
"Se dice que lo que se pierde es mejor
encontrarlo rápidamente. Si esperas el momento adecuado... podría caer en manos
de otra persona. O, podría quedar medio lisiado y arruinarse para
siempre."
"Sí. Así debe ser."
Sí, por una vez, seguiría ese consejo
correcto. Tendría que ir a buscarlo. Antes de que lo suyo se arruinara sin
remedio.
'...Señor Jin, eligiendo el momento más
adecuado para conseguirlo.'
* * *
¡Bip,
bip! ¡La puerta se ha abierto!
Cuando el niño escuchaba el sonido de alguien
entrando, inmediatamente se acurrucaba en un rincón de la pequeña habitación.
"¡Oye! ¡Ponte derecho! ¡Me avergonzaste
descaradamente en la reunión de antes, ¿verdad?! Estás desesperada por acabar
con tu propio marido, ¿no es así?"
"¿Qué hice mal para que me trates así?
¡Eres tú el que está lleno de complejos de inferioridad y presume de tu poder,
y eres el único que no lo sabe! ¿Eh? ¡¿Lo sabes?!"
"Habla claro. Si al menos me hubieras
escuchado cuando te dije que abortaras, yo no habría llegado a este punto
intentando hacer algo grande. Dijiste que lo darías a luz aunque te costara la
vida, ¿y ahora cuánto dinero se nos escapa por criar a un niño con nuestra
situación económica ya precaria?"
Desde el momento en que pudo hablar y
comprender, día tras día, sin falta, los padres de Seo Kyung-won peleaban sin
cesar. La cantidad de peleas era incontable y las discusiones, que comenzaban
de diversas maneras, terminaban siempre en dinero. Y finalmente, culminaban en
su pequeño hijo.
"De todos modos, los niños pequeños ni
siquiera saben que estamos peleando. Cuando crezcan, ni siquiera recordarán
esto." ¿Era esa actitud despreocupada una excusa para la vergüenza que
mostraban frente a su joven hijo? Aunque quisiera preguntar, la verdad es que,
desde el principio, no había rastro de arrepentimiento.
Ropa sin lavar, comida en la fiambrera con
frecuencia en mal estado, útiles de guardería que faltaban cada vez...
cualquiera que lo viera diría que era un niño sin el interés de sus padres. Por
lo tanto, la indiferencia de sus padres le resultaba familiar. Y también el
hecho de abandonarse a la soledad. Así, el niño, sin nadie que lo cuidara,
aprendió por sí solo a protegerse.
'...Está bien. Si no hay expectativas desde el
principio, tampoco hay decepción.'
'Así es. No debo esperar nada. Entonces... no
habrá nada que me lastime.'
El hogar, que debería haber sido un espacio
cómodo, se había convertido en un lugar temible hace mucho tiempo. Por mucho
que se tapara los oídos, no podía bloquear el sonido de las discusiones que
estallaban. Incluso usando tapones para los oídos, el sonido que se filtraba
podría no ser solo por la casa pequeña, sino también alucinaciones.
Ayer, hoy y mañana. La casa, llena de
discusiones, no cambiaría.
Kyung-won, como siempre, se envolvió en el
edredón tirado en el suelo y se refugió en la paz de la oscuridad total. ¿Se
habría quedado dormido? Cuando abrió los ojos adormilado, tenía la marca de la
alfombra grabada en la mejilla. La marca en su rostro demacrado no desaparecía
por mucho que se la frotara.
Miró hacia la puerta cerrada y el exterior
estaba en silencio. En el espacio calentado por su propio calor, Kyung-won
abrió la puerta con cautela y miró hacia la sala.
"...Ah."
Pero, ¿quizás no debería haberse dormido ese
día? Kyung-won, viendo el cadáver que colgaba, quería fingir que no lo veía,
como un niño que aún no conoce la muerte. Quería preguntar si le estaba
gastando una broma inocente.
"Yo... Lo hice todo mal, ¿verdad? No, no
me dejen solo aquí..."
Abrazando los dos cadáveres, el niño de seis
años balbuceó como un juguete roto. No podía hacer nada más. No lo entendía.
¿Por qué, si se amaban y no podían vivir el uno sin el otro, se habían puesto
de acuerdo para morir el mismo día y a la misma hora?
"...¿Por qué, por qué me dejan solo? ¿Por
qué siempre me odian? ¿Por qué..."
Si iban a morir, deberían haberlo llevado con
ellos. Siempre habían gritado que la raíz de todas las peleas era por su culpa.
Habían dicho que su vida sería mucho más fácil si no tuvieran un hijo. Pero, ¿a
la hora de morir, simplemente no pudieron matar a su hijo y murieron solos?
¿Por qué ellos, que nunca habían mostrado ni
una sola vez un comportamiento parental normal, lo exhibían en ese momento? Se
había convertido en una pregunta a la que nunca obtendría respuesta en toda su
vida.
* * *
"Tsk, tsk... el fin del mundo. Esa pareja
siempre peleando, eh."
"¿Por qué? ¿Qué pasó?"
"No, acabo de oír a la policía hablar, y
al parecer la pareja se colgó y se suicidó. Dicen que el niño se levantó, lo
vio y llamó a la policía..."
"¡Oh, Dios! ¿Por qué? ¿Qué les pasó a esa
joven pareja?"
"¿Y yo qué sé? Al menos es una suerte que
no se llevaran al niño... Honestamente, en este mundo tan cruel, dejar a esa
criatura tan pequeña sola, ¿se podría decir que solo pensaron en sí mismos
hasta el final? Esa pareja, la gente hablaba mucho de cómo descuidaban al niño,
así que no creo que no se lo llevaran por pensar en él. ¡Ay, no sé! Me duele la
cabeza. Vamos, vámonos."
El apartamento 101 de una pequeña villa.
La entrada, ampliamente abierta, estaba llena
de gente entrando y saliendo. Algunos residentes se preocupaban por el niño que
quedaba, otros por el valor de la propiedad, que no bajaría, y otros eran
indiferentes.
"Pequeño. ¿Tienes parientes o adultos que
puedan cuidarte?"
"..."
El niño, sin derramar una sola lágrima, ¿qué
estaría pensando en ese momento? Las miradas de los curiosos se clavaron en él,
pero, bueno, a diferencia de lo que esperaban, el niño no pensaba en nada en
particular.
Solo estaba reviviendo la pregunta que siempre
le había inquietado: si iban a abandonarlo así, ¿por qué lo dieron a luz solo
para darle dolor? Como siempre decían, ojalá lo hubieran abortado antes de que
naciera. Él no debería haber nacido, pero nació sin morir, ¿y por eso lo
dejaron solo y se fueron?
La mayoría de los padres dicen que
sacrificarían su vida por sus hijos, pero él ni siquiera pedía algo tan
grandioso.
"...No tengo a nadie. Nadie me
aceptará."
Dijo que no tenía a nadie, mintió. Tenía un
pariente por parte de su padre. Pero sabiendo que la situación económica de ese
pariente no era lo suficientemente buena como para que él se uniera a ellos,
¿cómo iba a decir que sí?
"Nadie..."
...No. Honestamente, ¿qué derecho tenía a
decir eso cuando ni siquiera estaba considerando la situación de sus parientes?
Ah, mira esto. Este inútil hábito de adornar las cosas con palabras bonitas
para consolarse, ¿no es idéntico al de sus padres?
Además, el hecho de que él, abandonado incluso
por sus padres, pudiera establecer alguna relación en el futuro, era solo que
tenía miedo de enfrentar el miedo.
Si le preguntaran si un mundo sin
discriminación podía existir, Kyung-won respondería que tal concepto nunca
existiría a menos que se alinearan las diferentes líneas de partida desde el
nacimiento.
Cuando Kyung-won ingresó a la escuela
secundaria, el hecho de que un huérfano sin estudios se hiciera famoso como
representante de la promesa fue tema de conversación. En lugar de preguntarse
cómo estudió sin ir a ninguna academia, todos, niños y adultos por igual, se centraron
en la etiqueta de "huérfano". Su vida estuvo frecuentemente marcada
por la etiqueta de huérfano, pero el propio Kyung-won siempre mantuvo la cabeza
en alto.
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Porque no tenía razón para vivir con culpa. Pero
la actitud orgullosa del huérfano parecía incomodar siempre a alguien.
[Es patético que se haga el elegante sin tener
nada.]
[No sé por qué la gente se le acerca, ¿qué
tiene de bueno ese bastardo aparte de su cara?]
Kyung-won respondió a los que lo insultaban
con la misma violencia. Afirmaba que la violencia verbal también era violencia,
por lo que él era justo. Como era de esperar, sin ningún tipo de apoyo, terminó
siendo trasladado a la fuerza de escuela en escuela, y sucesivamente, de
orfanato en orfanato.
Realmente, incluso unos padres que solo lo
eran de nombre o un hogar que solo lo era de apariencia, eran mejores que no
tener nada. Aunque fueran padres que odiaban a su propio hijo, la diferencia
entre tener a alguien a tu lado y no tener a nadie era abismal.
'Nadie... a mi lado...'
Nadie. Cuando se daba cuenta de que nadie
existía a su lado, Kyung-won odiaba su sentido de pertenencia vacío, sin
contenido. También odiaba la imagen de sí mismo deambulando como un gato
callejero, hasta el punto de vomitar.
Simplemente, todo le resultaba molesto.
"Miau~"
"...Vete."
Alejó con firmeza a lo que se le acercaba.
Desde el principio, no dar su corazón, no esperar nada, era la forma más
efectiva de protegerse a sí mismo, que no tenía nada.
"¡Ah, basta! ¡Vete!"
Cuando los gatos callejeros se amontonaban con
frecuencia, sentía como si lo reconocieran como su compañero, deambulando sin
pertenencia, y por eso, no le gustaba aún más. Su aspecto sucio, similar al
suyo, también.
"...¿Tienes algún secreto para que se
amontonen así?"
"¿Quién, quién...?"
Como siempre, cuando regresaba a casa de la
escuela, se encontraba rodeado de gatos callejeros y agitaba las manos. Levantó
la cabeza y vio a un hombre que ladeaba la barbilla.
En cuanto se acercó, los animales de alrededor
sisearon y huyeron. Kyung-won, en cambio, quería preguntarle su secreto para
ahuyentarlos al instante. Ese cabello rubio era bastante llamativo para un
estudiante, pero al ver las raíces oscuras, no debía ser su color natural.
"Parece que no tienes dinero para comprar
golosinas. ¿Qué les gusta tanto como para acercarse a ti?"
"...¿Qué? ¿Y tú? Parece que tienes mucho
dinero, ¿qué te falta para que ellos huyan?"
La ropa del otro, de diseño elegante, estaba
impecable, sin una sola arruga. En cambio, su propio uniforme de secundaria era
una prenda gastada, heredada varias veces. Incluso el cabello ondulado del
otro, brillante y sedoso, era diferente de su propio cabello, que parecía una
escoba de un viejo almacén deportivo.
"Así es. Si forzara, bastaría... pero
también quiero experimentar que se me acerquen por voluntad propia—"
"Joven amo. Creo que debe regresar. Su
señora le ha pedido que llegue primero al aeropuerto."
Cualquiera podía ver que él era diferente de
los demás, y no solo por el "joven amo" que se oyó desde atrás.
"...Ah, qué lástima. La próxima vez que
nos veamos, ¿me contarás tu secreto? Quién sabe, tal vez si cultivamos una
amistad, incluso un niño como tú pueda relacionarse conmigo."
"¡Vete al diablo...! No quiero verte
nunca más, así que vete rápido."
"Bien, la próxima vez que nos veamos, no
vistas como un trapo y ponte ropa decente. Las pequeñas cosas hacen que una
persona parezca insignificante. Y lo más importante, cuando una persona ve a
otra... la apariencia es lo primero que le llama la atención."
Incluso si eres tan pobre como tú, al menos si
no actúas como si fueras insignificante, entonces no serás ignorado.
No fue un consejo lo que dijo. Pero ¿sería por
la frase "no serás ignorado"? En su memoria, donde el rostro y la voz
del otro ya habían desaparecido, la presencia de esa única frase no pudo ser
borrada por mucho tiempo.
Alrededor de los dieciséis años, Kyung-won
tuvo que faltar a la escuela durante una semana entera debido a un dolor que
nunca antes había sentido.
Días en los que no solo tenía escalofríos y
dolores de cabeza, sino que sentía como si le estuvieran desgarrando las
extremidades. El dolor inexplicable que persistía sin razón lo llevó a
sospechar de una manifestación como agente.
Y, como era de esperar, en el examen de
manifestación del centro al que acudió con el director del orfanato, Kyung-won
recibió un informe que confirmaba su manifestación como "Esper". Su
grado esperado era clase S. Ese día, muchas cosas cambiaron.
[¿Eres Seo Kyung-won? Pretendo ser tu
patrocinador de ahora en adelante... Entonces muchas cosas cambiarán. Mientras
estés bajo mi protección, nadie te ignorará. Ya no te desesperarás por una
sensación de pertenencia vacía. Pretendo convertirte en una obra maestra entre
obras maestras.]
Los niños que lo evitaban, sin excepción, le
tendieron la mano, y cuando un alto funcionario del centro se ofreció como su
patrocinador, pudo por fin dejar atrás su vida de vagar de un lado a otro como
un nómada. Si se registraba en el centro, él también podría sentir una completa
sensación de pertenencia, sin inestabilidad.
Podía evitar ser abandonado. No tendría que
vagar. Ese hecho por sí solo fue razón suficiente para tomar la mano del
funcionario del centro. Una vez, pudo afirmar que era una cuerda salvavidas que
se le había tendido.
Entre los Espers, se
encontraban los de clase especial que podían usar dos habilidades. Kyung-won
pertenecía a este grupo, pero tenía la restricción de que el uso de habilidades
significativas en combate contra monstruos requería una "mentalidad
templada".
Un entrenamiento personalizado sin límite de
tiempo se le dio antes de que recibiera su código y se convirtiera en un agente
oficial. La "simulación a través de video 3D tridimensional" sirvió
como marco básico cada vez.
El dispositivo que analizaba los recuerdos de
los agentes en prácticas captaba los momentos dolorosos del pasado que querían
olvidar y los recreaba en la sala de entrenamiento. Además, la presentación de
situaciones que podían perturbar la mente, como escenas grotescas de cadáveres,
tenía como objetivo final un "entrenamiento mental para mantener la
compostura en cualquier condición".
Durante el proceso de cultivar la fortaleza
mental a través de simulaciones, Kyung-won vomitaba con frecuencia y, en casos
graves, incluso se desmayaba. En cada momento, la lengua colgante y los ojos
saltones de los cadáveres de sus padres con el cuello roto, y las uñas moradas,
indicaban el comienzo del entrenamiento.
Los diversos cadáveres que enfrentaba a través
de los videos tridimensionales se transformaban día a día en formas
verdaderamente grotescas, y los sensores adheridos a su cuerpo incluso le
provocaban todo tipo de dolores, simulando lesiones en el campo de batalla. Si
había un problema, era que la tecnología era tan excelente que el dolor que
sentía, a pesar de no estar realmente herido, parecía real.
Al terminar el entrenamiento mental, se seguía
un proceso de acondicionamiento físico sin descanso. A pesar de los montones de
cadáveres horribles y el dolor constante, Kyung-won comía bien, quizás porque
había usado mucho su cuerpo. En cuanto apoyaba la cabeza, se quedaba dormido.
Pero también era la época en que, de repente,
se encontraba con la cara metida en el inodoro todas las madrugadas, y el
insomnio ocasional se había convertido en parte de su vida diaria.
[Quiero parar, estoy muy cansado...]
[Seo Kyung-won. No me digas que no puedes
soportar esto, ¿verdad? Responde, ¿quién te trajo aquí?]
[...La directora del centro, señora.]
[Seo Kyung-won. Esto lo soporta cualquiera. Es
raro que tú no puedas. Si no puedes soportar esto, puedes dejar tus habilidades
e irte... Pero si te vas, ¿quién te aceptará si no tienes ninguna habilidad? ¿A
dónde crees que puedes ir, siendo ya adulto? Te estoy acogiendo porque soy yo.]
[...]
[Seo Kyung-won. Dijiste que querías ser
reconocido. Dijiste que no querías ser ignorado, ¿verdad? Entonces, ¿qué debes
hacer?]
[Directora, obedecer... bien...]
[Así es. Bien. ¡Qué respuesta tan simple!]
Estar solo todos los días era algo natural en
su vida. De vez en cuando, el hecho de ser directamente de la línea de la
directora del centro atraía a la gente, pero si mostraba incomodidad, todos se
iban rápidamente, temiendo su mirada. De todos modos, era mejor deshacerse de
esa gente, ya que de todos modos estaban desesperados por hablar mal de él a
sus espaldas.
Ahora estaba demasiado acostumbrado a estar
solo. Se había convencido firmemente de que era más cómodo no tener a nadie a
su lado.
[¿No quieres formar equipo con un guía...?
¿Tienes algún mal pasado con un guía en particular?]
Si alguien mostraba
rechazo, lo insultaba de vuelta o no intentaba desarrollar la relación, ¿la
mayoría de las personas que había conocido no eran así? Pero Won-jin era diferente.
Era un ser humano que, incluso después de ser abiertamente insultado, se
desvivía por cuidar a esa persona.
Al principio, simplemente le irritaba. Se
sentía aún más decepcionado por el cargo de guía que poseía.
Él había vivido cada día con dolor hasta que
dejó de ser un agente en prácticas, mientras que los guías podían dejar de
serlo con solo una prueba de compatibilidad. Él había sufrido tanto para
superar los obstáculos, pero sentía que un simple guía los superaba con
demasiada facilidad.
"Una existencia como la tuya nunca podrá
entenderme."
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Un guía no era más que una existencia molesta
e innecesaria. Alguien que, incluso si lo llevaba consigo, solo podía
proporcionar guía y no hacer nada más, una existencia que ni siquiera podía ser
una pieza secundaria. A pesar de que a menudo envolvía su creciente complejo de
inferioridad en palabras duras,
Won-jin seguía colándose por las grietas.
Incluso si mostraba su disgusto, él simplemente sonreía. Aunque le dijera
palabras duras, al final siempre regresaba. Cuando él era parte de su
afiliación y estaba a su lado, una comodidad que nunca antes había sentido lo
inundaba.
Cuando estos sentimientos desconocidos
brotaban, Kyung-won volvía a repetir sus duras palabras. Como un guía no podía
dejar el equipo sin el permiso del Esper, se quejaba sin reparos, amparándose
en ese punto cobarde.
[Feliz cumpleaños. En tu cumpleaños, deberías
comer cosas ricas e ir a lugares divertidos. ¿Qué clase de joven no sabe
divertirse así?]
[...Qué más da. No es algo que celebrar.]
[Bueno, yo no creo que haya un cumpleaños que no
deba celebrarse. Así que sonríe, bastardo. ¿Vas a pasar el día con cara de
muerte?]
El hecho de que los cumpleaños debían
celebrarse, el hecho de que por fin pudiera no odiar el día en que nació, ¿fue
también gracias a Won-jin?
Poder recibir regalos sin nada a cambio, la
existencia de personas en el mundo que eran uniformes sin dobles intenciones, y
el hecho de que pudiera haber alguien de su lado que se enojara por los
insultos que él recibía.
Todo. Eran hechos que había aprendido de nuevo
después de que Won-jin llegara.
Él se sentía cómodo, y por lo tanto, incómodo.
Al recordar estas emociones ambivalentes que ni siquiera él podía clasificar,
las consideraba simplemente extrañas, sin darse cuenta de que todo apuntaba en
una sola dirección.
[Así que si hubiera abortado a ese niño, ¡no
tendría que pasar por todo este infierno!]
[Ese huérfano de Seo Kyung-won es un jodido
mocoso.]
[Seo Kyung-won. Si no quieres volver a una
vida de ser ignorado, ¿deberías escucharme bien? Recuerda que yo siempre tengo
el control.]
[¿Ese agente en prácticas? Ni me lo menciones,
es un completo perro de la directora, un perro.]
[Seo Kyung-won. No te preocupes por lo que
diga la gente. A ti también te llegará el momento de disfrutar de tu propia
vida.]
...Cómo recibir amor, y cómo darlo.
Para Kyung-won, quien era ignorante en todo,
Won-jin fue la primera persona en su vida en enseñarle todo eso.
* * *
¡Ding!
Ha llegado una nueva alarma. Se ha añadido un
nuevo comentario.
<¡Gente, gente! ¿Vieron la noticia del
nuevo guía de Seo Kyung-won??? >
¿Qué demonios está pensando? ¿Realmente se
separó de Won-jin?
<¿No será que el nuevo guía de Seo
Kyung-won echó a un compañero que estaba bien? ¿Cómo que justo después de la
licencia? Jajajaja. ¿Seo Kyung-won no está haciendo un reemplazo?>
.
<¡¡Última hora!! ¡¡El nuevo guía de Seo
Kyung-won, Yoon Ha-na, ha publicado un post!!!!>
.
-> [@Y_Ha-na] Hola, soy Yoon Ha-na. Después
de mi período de prácticas, me presento por primera vez al público como guía
oficial. Primero, es cierto que he sido asignada como la nueva guía del Sr. Seo
Kyung-won. Sin embargo, esta es una decisión que fue tomada por una directriz
de superiores, y quiero aclarar que los rumores maliciosos, como que yo
presioné al Sr. Won-jin o que el Sr. Seo Kyung-won lo echó, no son ciertos en
absoluto. La relación entre ambos sigue siendo sólida, y yo simplemente estoy
ocupando el lugar del Sr. Seo Kyung-won hasta que el Sr. Won-jin regrese. Soy
una guía novata con muchas deficiencias, pero espero que me apoyen en el futuro
sin críticas, se lo agradecería enormemente.
.
.
.
"Haa..."
Tarde, al anochecer, en la terraza de una
cafetería cerca del centro.
Yoon Ha-na, sin siquiera quitarse la mochila
del hombro, dejó escapar un profundo suspiro. Estiraba el cuello hacia atrás,
como si quisiera hundirse en su teléfono, mientras su pecho se inflaba y
desinflaba repetidamente.
"¡Oye!"
La persona que se asomó con la cabeza así de
repente era Jae-yoon, su amigo, que llegaba tarde al lugar de encuentro.
Gracias a que Yoon Ha-na había pedido la bebida por adelantado para él, solo
tenía que dejar sus cosas. Jae-yoon, que estaba a punto de hablar mientras
sorbía un trago de su limonada, balbuceó sus palabras.
"¿Eret un mujjjuy popularrr?"
"...¿Viniste a burlarte de mí?"
"¿Está bien volverse tan viral en tu
debut?"
"¡Oye! ¡Qué debut! No soy un idol."
"...Uf. Ah, esto está rico. Pero en serio,
¿qué está pasando contigo? De repente te tomaste una licencia, desapareciste, y
luego regresaste como agente. ¿Y para colmo, la guía de Seo Kyung-won?"
Jae-yoon tiró juguetonamente de la mejilla de
Yoon Ha-na, que estaba abatido y apoyado en la mesa, y le preguntó. Mmm, parece
que no ha dicho que pare, así que algo debe estar pasando.
"Ah... no sé. Yo tampoco sé. Por qué me
asignaron como guía del hermano Kyung-won."
"¿Por qué? ¿Seo Kyung-won te
molesta?"
Yoon Ha-na levantó la cabeza de golpe y la
agitó de un lado a otro, como si no tuviera la conciencia sucia.
"¿Q-qué dices? ¡El hermano Kyung-won es
súper amable! Ah, de todos modos, no me molesta en absoluto... Solo que la
gente lo malinterpreta y eso me entristece. Soy demasiado insignificante para
estar al lado del hermano Kyung-won. Y también me preocupa Won-jin."
"Pero dices que lo decidió la alta
gerencia. Won-jin tomó una licencia, y fuiste asignada porque eres la única
compatible, ¿no? No es algo que puedas anular tan fácilmente, así que
simplemente disfrútalo. ¿Qué importa? De todos modos, como agente, te van a
insultar mucho, así que ¿qué vas a hacer con esa mentalidad tan débil?"
"...Eso, sí, pero."
"Oye, sí, pero si esto está cerca del
centro..."
Como queriendo decir algo, Jae-yoon empujó su
silla, se acercó y le susurró al oído.
"...¿Es un lugar al que vienen muchos
agentes?"
"Uhm... supongo que sí. La mayoría son
conocidos... dicen que un lugar como este, que es como un espacio exclusivo, es
más cómodo."
"Oye, oye. Entonces, ¿esa señorita de
allí también es agente?"
Siguiendo su dedo, había una mujer mirando
tranquilamente por la ventana. Tenía una apariencia inusual, pero al menos Yoon
Ha-na nunca la había visto. Como no hacía mucho que se había convertido en
agente oficial, quizás era una figura superior que no conocía.
Cuando Yoon Ha-na se encogió de hombros como
si no supiera, Jae-yoon se levantó de inmediato. ¿Eh...? Yoon Ha-na, con los
ojos momentáneamente muy abiertos, lo agarró por la manga y lo volvió a sentar
de golpe.
"¡Oye! ¿Qué vas a hacer?"
"Voy a conseguir su número. Bah, ¿no
estoy un poco guapo hoy? Es demasiado mi tipo, no puedo dejarla pasar. ¿No es
una conexión que la haya conocido hoy aquí?"
"¿Eh?"
Qué problema. Ya está pensando en la boda.
"Si no tienes la intención de
avergonzarme, ¡en serio, basta...! ¿Por qué diablos se reuniría contigo una
persona así?"
"¡Ah, por qué! ¡Deja que este hermano
también tenga una cita!"
"En serio, si no estás tratando de
hacerme pasar vergüenza, te digo que pares."
"¡No, Ha-na, ¿tú solo piensas que me van
a rechazar desde el principio?!"
Los dos, susurrando y tirando de la ropa del
otro, repetidamente estiraron sus mangas hasta que uno de ellos cedió y se
cayó. Hubiera sido mejor si hubiera sido Yoon Ha-na quien estaba sentada junto
a la pared.
"..."
"...¡Uf!"
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Fragmentos de vidrio se esparcieron
ruidosamente junto a Jae-yoon, que se había caído de nalgas. Al mismo tiempo,
un café con leche caliente se derramó sobre el muslo del hombre que había
resbalado con la bandeja. Yoon Ha-na, atónito, corrió al mostrador de
devolución de bandejas cercano, tomó un pañuelo de papel y gritó.
"¿E-está bien?"
Bebida derramada, pantalones mojados, manchas
de café por todas partes. Sin embargo, el hombre parecía querer dar por zanjada
la situación con un simple "Estoy bien". Sus acciones y su forma de
hablar mostraban una gran tranquilidad, incluso cuando daba golpecitos en el
líquido de su muslo con un pañuelo que sacó.
Justo la zona era la parte interior del muslo,
así que si ella lo limpiaba, ambos se sentirían incómodos. Después de esperar
un momento sin hacer nada, las cejas del hombre se fruncieron brevemente cuando
se llevó la mano al bolsillo del pantalón.
¡Uf, ¿habrá pasado algo grave?! Yoon Ha-na
solo pataleaba nerviosamente. Y aún más cuando el hombre abrió la boca.
"Acabo de... pedirle prestada a un
conocido una tarjeta de acceso extra para entrar al centro, y parece que se
mojó. En este estado, no funcionará."
"Ah... ¿Es usted del personal del
centro?"
"...No, no soy del personal. Me pidieron
un favor. ¿Qué tal si hacemos esto? Si realmente lo sientes, lo solucionamos
con que me prestes tu tarjeta. Ahora mismo me resulta difícil volver a
encontrarme con mi conocido debido a la situación, solo será por un
momento."
"Uhm... a-aun así... una tarjeta así a la
ligera..."
Si no era personal del centro, sino un
extraño, ¿no había muchas cosas de las que tener cuidado? ¿Quizás estaba
mintiendo y tratando de obtener la tarjeta con algún propósito? Por supuesto,
no quería dudar de alguien que había sido perjudicado por el error de su amigo,
pero no podía actuar de forma simplista.
"Entiendo su sospecha. En estos tiempos,
no está de más ser precavido. Entonces, por ahora... ¿estará bien así?"
Se le acercó una tarjeta de presentación a la
vacilante Yoon Ha-na. En ella, estaba el nombre de "Sung Jin-tae, Director
de la Oficina de Planificación y Coordinación", uno de los ejecutivos del
centro.
'Claro, una persona común no podría tener una
tarjeta de presentación de un ejecutivo así, ¿verdad? Sí, sea lo que sea, no
debe ser una mentira. Desde el principio, ¿cómo un novato como yo podría
conocer contactos de alto nivel...?'
Al final, decidió entregar su tarjeta. Y el
hombre regresó poco después, así que al recuperar su tarjeta, se sintió
aliviado, acariciándose el pecho que latía.
¡Ah, parece que me equivoqué! ¡De todas
formas, veo demasiadas películas! ¡Solo me invento fantasías inútiles!
El alivio le hizo iluminar el rostro. Incluso
se disculpó una vez más en nombre de su amigo, que ya se había ido después de
disculparse por lo ocurrido. Al mismo tiempo, disipó su propia suposición
absurda.
* * *
La misma noche.
"..."
Por mucho que intentara recuperar la lucidez,
hacía tiempo que su capacidad de juicio estaba tan nublada que no podía
distinguir cuántos días llevaba allí. Gracias a que Seo Kyung-won solo le había
curado las heridas lo suficiente para que no muriera, todavía sentía dolor al toser.
'¿Qué día es hoy...?'
Ignorar el paso del tiempo era más aterrador
de lo que parecía. Si había pasado mucho tiempo, por un lado; si solo había
pasado un instante, por otro. Parecía que los días se repetían en un ciclo
interminable, y se preguntaba si la línea entre el dolor y la liberación nunca
terminaría y se difuminaría para siempre.
—Tac.
...Ah. A lo lejos. De nuevo.
'¿Qué historia va a contarme hoy? ¿Cuánto más
me va a atormentar hoy? ¿No ha sido suficiente tormento? No sé cuánto más
estará desesperado por tenerme atrapado.'
Tac—
El claro sonido de pasos de zapatos se
acercaba.
'¿Serán tus pasos? Seguramente sí. Nadie...
nadie me salvará, a Han Jae-yeong. Me he metido en el cuerpo de alguien
abandonado por su familia y conocidos. Ah, pero ¿no había una sola persona? Una
figura que no se apartaba del lado de Han Jae-yeong... una figura obsesionada
con Han Jae-yeong.'
A diferencia de lo habitual, el chirrido de la
manija de la puerta se prolongaba. El momento incierto en que se abriría
aumentaba gradualmente el miedo. Pronto, la puerta se abrió y los pasos se
acercaron, un eco que parecía urgente, marcando el espacio con fuertes pisadas,
reverberando como si cubriera la habitación.
"Te... echaba de menos."
Pero la persona que apareció en ese lugar donde
yacía el cadáver de Won-jin... no era la que él había esperado, por lo que no
pudo mover su cuerpo paralizado. Por un instante, su mente pareció detenerse.
Esa persona, con su cabello rubio ondulado
revoloteando y sus rasgos hermosamente alineados distorsionados.
"¿Je... Je-han...?"
"Sí. Soy yo. Won-jin, he venido a por ti.
Lo has soportado bien. Ahora no te preocupes por nada."
...¿Cómo sabes que soy Won-jin? Realmente
tenía un millón de preguntas.
"Todo es culpa mía. Fui yo quien hizo que
te fueras... Así que, Jin, dame la oportunidad de pedirte perdón. Dame... la
oportunidad de salvarte."
Tenía tanto que decir, pero su mente no
funcionaba. ¿No estaba él tratando de escapar de este hombre cuando Kyung-won
lo atrapó? A pesar de que su mente sabía que algo andaba mal, y quería
preguntar cómo sabía de su existencia...
"...Hic, ugh..."
Tal vez eras la primera y última persona que
venía a salvarlo.
Las
lágrimas simplemente brotaban sin cesar. En ese momento, no importaba quién
fuera. Solo quería tomar esa mano y salir rápidamente de allí. Esa era la única
idea que dominaba su mente.