13. Juego de la verdad

 

13. Juego de la verdad

“...ah.”

Fue guiado por una mano silenciosa hacia el espacio de otra dimensión del espejo. Un grito apenas perceptible en su subconsciente le rozaba el oído.

“...eh?”

¿Quién es este...?

“¡¡Despierte!!”

“...Ugh.”

El grito era punzante. La figura borrosa que veía no era definitivamente un humano. Así que, por supuesto, tampoco era el guía que había sido arrastrado con él.

“...”

Cuando entrecerró los ojos para ver qué era, vio a alguien con un disfraz de oso de peluche. Era el mismo que usó Han Jae-young el día que fue a guiarlo.

El disfraz de peluche, sentado en cuclillas, se apoyaba en sus manos con una pose de flor. A pesar de la pose adorable, sus ojos negros, que parecían de plástico barato, tenían algo de inquietante.

“¡Hoo... héroe, por fin ha abierto los ojos!”

“...¿Qué? ¿Qué quieres decir?”

“¡Ja, ja, ja!”

El disfraz de peluche soltó una risa antinatural y se rió a carcajadas durante un largo rato. Kyung-won miró a su alrededor y vio al guía tirado cerca.

...Pensando que todavía no se había recuperado, intentó levantarse para despertarlo. Pero de repente, su cuerpo fue sujetado firmemente. No podía moverse.

“¡Yeeha! ¡Siempre quise decir eso, y mi deseo se ha cumplido! ¡Ja, ja!”

Una ráfaga de frío pasó, y luego soltó otra risa. La risa antinatural provocaba una extraña sensación.

“¿Sabe, esas frases típicas? ¡Despierte, héroe! ¡O, héroe, está consciente! Aquí es como un mundo diferente para los humanos, y no es fácil encontrar a un humano que me guste. Así que siempre que me encuentro con uno que me gusta, lo traigo aquí y me repito que debo decir estas cosas.”

El disfraz de peluche, que actuaba solo, imitó a alguien que acababa de despertar, y luego se convirtió en la figura de un guía que despertaba a alguien con las manos juntas... Parecía estar inmerso en su propia satisfacción, interpretando dos papeles a la vez.

“¡Ah, y no lo despierte! ¡No estoy interesado en él, sino en usted! ¡De todos modos, esos traen a la persona equivocada y causan problemas, jojojo!”

“Espera, espera. Si lo que dices de un humano que te gusta se refiere a mí... entonces, ¿tienes algún propósito conmigo?”

“¡Por supuesto! ¡Eso es!”

La cabeza del disfraz se movió rápidamente hacia la cara de Kyung-won. Sus ojos, que antes no tenían brillo, ahora brillaban intensamente. En medio de esta situación confusa, Kyung-won intentó usar su poder para crear una barrera y contener a la cosa, pero aún así...

‘Mi poder... todavía no funciona.’

La situación no cambiaba. Claro... por eso fue arrastrado indefenso hasta aquí.

“¡Ja, ja, ja! ¡Qué impaciente! ¡Hoo, no se puede ir tan pronto de mi lado, después de que me costó tanto encontrarlo!”

“Tú... si quieres algo, ve directo al grano.”

“¡Ohoho! ¡Qué genio tan impaciente...”

Al oír el insulto, el peluche se acarició la máscara, que parecía ponerse de un color rojizo. Parecía que le gustaban los insultos.

“Hmm. ¿Pero no cree que usted quiere algo más grande que yo, señor Seo Kyung-won? ¡Solo mire este disfraz que llevo! ¡Yo lo sé todo!”

“...”

Su tono de voz seguía burlándose de él. Kyung-won se mordió el labio y se abalanzó sobre él para quitarle la máscara. Le repugnaba la forma en que hablaba con ese disfraz puesto.

Quizás lo que había dentro... ¿tendría la misma forma? Pero, para su sorpresa, cuando le quitó la máscara, en su interior no había una cabeza humana ni de animal, ni de ningún objeto, sino un simple ‘?’ que flotaba dando vueltas.

“¡¡Aaaaaah!! ¡Esto es realmente de mala educación! ¿Dónde se ha visto que se quite así sin preguntar? ¡Qué impaciente, qué impaciente, es tan precipitado! ¡Por eso el humano llamado Won-jin no confiaba en usted!”

“¿Qué... qué dijiste?”

Al escuchar el nombre de Won-jin, no pudo seguir pensando. Kyung-won, que había recuperado la conciencia, estaba ahora encima del peluche y agarraba sin piedad la zona de su cuello.

“¡Hiiiik! ¡Este humano me va a matar! ¡Me va a matar! ¡Manos! ¿Qué están haciendo las Manos?”

Un sonido metálico insoportable. Una pila de manos familiares se abalanzó y levantó al humano furioso.

“¡Esta inteligencia que apenas existe estuvo a punto de ser asesinada por un humano! De todos modos... hmmm. Yo también me pasé un poco, así que vayamos al grano. ...Oigan, ¿no captan la atmósfera? ¡En un momento como este, tienen que soltarlo! ¡Siempre traen a la persona equivocada!”

El disfraz de peluche, que se había vuelto a poner la cabeza, se enojó de repente, con la cara roja y azul.

“¡De todos modos, para usted, señor Seo Kyung-won, encontrarme será una gran suerte!”

Kyung-won, que había sido bajado al suelo, le respondió de mala gana:

“¿Y por qué dices que eso será una suerte para mí?”

“¡Porque yo puedo resolver la duda que usted tiene ahora mismo!”

“¿Tú? ¿Qué eres tú para-?”

“¡Permítame presentarme de nuevo! Ah, ¿es la primera vez que me presento? Como sea.”

Sobre la palma de su mano, dos cajas misteriosas con un signo de interrogación daban vueltas.

“¡Soy una especie de ‘evento’ que vive dentro de la puerta! Viajo para jugar un juego donde se divide el destino de cualquier ser, ya sea humano o de otra dimensión. ¡Si ganas el juego conmigo, te concederé un deseo, pero no puedo revivir a los muertos ni nada de eso! ¡Lamentablemente, los ‘eventos’ como yo no tenemos esa habilidad!”

“...¿Un juego? Nunca oí que existiera algo como tú entre las criaturas de la puerta.”

“Las criaturas como yo no nos mostramos a los humanos, así que es normal que no lo sepa. ¡Pero usted, señor Seo Kyung-won, captó mi atención! ¡Hoo... supongo que fue el destino!”

El ‘evento’. Con una lupa, capturó los ojos azules de Kyung-won.

“Señor Seo Kyung-won, ¿no tiene algo que quiere... algo que quiere saber?”

“¿Algo que quiero saber?”

La mirada fija de Kyung-won se estremeció con la pregunta.

“...”

Bueno... no sabía qué tanto sabía, pero no perdía nada intentándolo. De todos modos, para salir de aquí, no tenía más remedio que seguirle el juego, ¿verdad?

Finalmente, asintió con la cabeza, aceptando. Al instante, el espacio a su alrededor cambió por completo.

El lugar se convirtió en el interior de una oficina oscura. Una única bombilla de luz tenue colgaba sobre una mesa. Cartas, dados, una ruleta, pistolas con sangre y cuchillos estaban desordenados.

En un lugar que parecía una especie de sala de juegos de azar, la criatura de la puerta y un humano se sentaron uno frente al otro en la mesa.

“...Ahora, que la gracia de la naturaleza lo acompañe en este juego aleatorio.”

* * *

El esper Seo Kyung-won y el guía de Oh Yeon-ju habían desaparecido. Pero no podía simplemente irse y abandonar a las personas que necesitaban ser rescatadas.

Había un panel de conexión que Je-han había instalado, y los equipos de apoyo descenderían a las coordenadas de Oh Yeon-ju, por lo que lo más sensato era no preocuparse.

“Jin.”

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“Estoy bien. Nosotros... terminemos con esto primero.”

Cada vez que las grúas levantaban partes del edificio, Won-jin buscaba rastros de personas y escuchaba con atención los sonidos. Levantaba él mismo los escombros que la grúa no podía alcanzar.

‘⎯quien,’

‘Por favor... ayúdennos.’

‘Jaja, snif…’

En su búsqueda repetida, sintió que alcanzaba a escuchar breves gritos que le perforaban el cuerpo.

“¿Escuchaste eso?”

“No escuché nada. ¿Tú sí, Jini?”

“Creo que sí...”

¿Dónde? ¿De dónde...?

‘...Por favor. Sálvennos, estamos aquí, no se vayan...’

Won-jin enderezó la espalda y concentró sus sentidos. Se dejó llevar por un sonido sordo, como si viniera de debajo de aguas profundas, y siguió el grito desesperado por un momento.

“¡Por aquí...! ¡Creo que es por aquí!”

Deteniéndose en un lugar, Won-jin comenzó a levantar los escombros cercanos de inmediato.

Se esforzó al principio, pero luego vio que Je-han y la grúa se acercaban para ayudarlo. Capa sobre capa, y luego otra capa más. Mientras se tragaba el polvo que le llenaba los pulmones, poco a poco fue viendo algo.

“A nuestro hijo... saquen a nuestro hijo primero, por favor.”

“...Por favor, sálvenos.”

Los tres que estaban en la lista de desaparecidos se abrazaron y extendieron desesperadamente sus manos hacia la luz que se filtraba.

“...Está bien, cálmense. Su hijo, tome mi mano y suba.”

Won-jin tranquilizó a la familia y ayudó a subir al hijo adolescente, y luego a sus padres.

Después de llevar a los rescatados a la salida y transferirlos al personal de emergencia en la superficie, Won-jin regresó a la puerta. Ahora sí, podía quitarse la máscara.

Sintió que las piernas le flaqueaban y que iba a caerse, pero se mantuvo firme. Se dirigió hacia donde se estaba concentrando el apoyo para buscar a los dos agentes desaparecidos. Pero tropezó y su cuerpo vacilante fue atrapado por Je-han.

“¿Por qué no descansas? Te preocupas por los demás, pero por favor, cuídate a ti primero.”

“Pero... ¿cómo podría descansar?”

“¿Por qué? Ya salvamos a los civiles, ¿no terminó nuestro trabajo? ¿Por qué sigues queriendo quedarte aquí? ¿Tienes miedo?”

¿De no poder encontrar a Seo Kyung-won? Él preguntó, y la respuesta se hizo tan evidente que no fue necesario que Won-jin la dijera en voz alta.

“Antes, con los dados. Dijiste que el que obtuviera el número podía pedir un deseo. ¿Puedo... usarlo ahora?”

“...”

Si lo hubiera sabido, nunca habría propuesto esa tonta apuesta.

“...Un deseo. ¿Qué deseas?”

“Si es posible, me gustaría que me ayudaras... a calmarme con tu habilidad.”

El sudor le perlaba la frente, el cuerpo le temblaba, la respiración era agitada. No era solo por el esfuerzo del rescate. Era el preludio de un ataque de pánico que regresaba justo cuando pensaba que estaba bien.

Por un momento, Je-han quiso arrastrarlo a la fuerza. No quería ver a Won-jin sufriendo por nada más que por Seo Kyung-won. Pero tampoco quería que Won-jin lo odiara más. No pudo detenerse por esa simple razón.

“...Ven aquí. Para eso, tienes que abrazarme fuerte.”

Así, con el pretexto de conceder un deseo, intentó satisfacer un deseo egoísta. Una vez en sus brazos, Won-jin se calmó. En realidad, Je-han no usó ninguna habilidad.

Lo único que hizo fue abrazarlo con todo su corazón. Esa era toda la verdad.

* * *

En un juego de ruleta, el perdedor debe entregar “lo que es suyo” a voluntad del ganador.

“Si el ganador es el que decide lo que el perdedor debe entregar... entonces, ¿qué quieres tú de mí?”

El juego tenía que terminar, y el momento final era cuando el arma apuntaba al objetivo humano. El disfraz de peluche preguntó, como si no pudiera entenderlo.

“Hmm, ¿por qué pregunta eso ya? Como si se hubiera rendido. ¿No era usted alguien que anhelaba y se empeñaba en saber algo?”

“...De todos modos, lo único que yo quería era revivir a alguien. Así que, incluso si ganaba y descubría la verdad... mi deseo nunca se cumpliría. Ya que perdí, tal vez esto sea lo mejor.”

No importa lo que hiciera, los muertos no podían volver a la vida. Era la amarga comprensión de la realidad que le llegó tarde.

Cada vez que se enfrentaba a una realidad sin Won-jin, cada vez que se sentía atrapado en la oscuridad sin una pizca de esperanza de revivirlo, en realidad deseaba desaparecer con él.

“Al menos aquí... tendré una excusa.”

Era como hundirse en un pantano. Se sentía atraído hacia la nada y el frío que una existencia vacía creaba se extendía por todo su cuerpo. Al final, solo se aceleraba la hipotermia en el pantano. Su cuerpo parecía haberse enfriado por completo.

“Hmm... bueno, está bien. Demos por terminado el juego aquí.”

¡CLAP! El sonido de una palmada. Al mismo tiempo, apareció un espacio blanco y vacío. Solo había una puerta de vidrio que no dejaba ver el interior, sin nada más alrededor.

“Si el señor Seo Kyung-won me ganaba, le revelaría algo, pero... bueno, ¡eso en realidad es mi castigo para usted si yo gano! Así que, no importa el resultado, yo gano el juego. Como puede ver, soy diferente a un humano, no sentiría dolor si me cortara una parte del cuerpo, ¿verdad? ¡Jojojo!”

“¿Castigo? ¿El castigo no era entregarse una parte del cuerpo?”

“¡Sí! ¡Y para tomar la parte del cuerpo que quiero del señor Seo Kyung-won, tengo que mostrarle lo que hay aquí dentro!”

Se balanceó sobre un poste que no se sabía de dónde había salido y mostró algunos pasos de baile. Colgó una hermosa guirnalda en la puerta de vidrio y puso letra por letra para formar la palabra ‘WELCOME’.

“¡Ahora, lo que me llevaré del señor Seo Kyung-won es... ¡sus ‘emociones’! Si lo llamamos corazón, sería una parte del cuerpo, así que no hay nada raro, ¿verdad? ¡Jojojo, las palabras se pueden usar de muchas maneras para que encajen!”

El disfraz de peluche se inclinó amigablemente, como si la frase de bienvenida fuera un cartel real, y le hizo señas para que entrara. La puerta contenía la recompensa y el castigo que Kyung-won podía obtener.

En algún momento, Kyung-won se encontró solo. Solo quedaba la voz del ser que no dejaba de burlarse.

“Usted dijo que quería saber la verdad, y eso se aplica tanto a la recompensa como al castigo. Abra la puerta. Y enfrente lo que hay dentro. Lo he preparado especialmente para usted.”

“Pero tal vez usted, señor Seo Kyung-won, piense que es una mentira. Si lo ve con sus propios ojos y sigue sin creer la verdad... oh, no hay nada más triste y tonto que eso.”

“¡Vamos, abra la puerta y muéstreme sus ricas emociones! ¡Todo lo que ha querido saber está ahí dentro!”

Al momento siguiente, Kyung-won, como hipnotizado, se acercó, y se encontró en un laberinto de espejos.

La voz juguetona ya no se escuchaba. ¿Lo estaba observando? Se encontró vagando, perdido en un laberinto de espejos.

‘Tengo veinte años, ¿sabe? ¡Así que hoy vamos a beber juntos, ¿sí?!’

‘Tsk, qué vas a beber, mocoso. Te doy dinero, ve a comprar una bebida para niños.’

De repente, una voz joven y familiar sonó.

En el espejo que lo reflejaba, aparecía alguien más. Era Won-jin, al que no podía dejar pasar.

‘Won-jin, ¿por qué no fuiste con el hermano Woo-rim ese día? Si hubieras estado ahí... si alguien hubiera estado, el hermano Woo-rim podría haber sobrevivido. Lo sabes, ¿verdad? Al final, es tu culpa...’

‘Sí. Es mi culpa. Lo sé, lo sé. ...Choi Han-gyeol.’

El tiempo avanzaba poco a poco.

‘Tu anterior pareja murió, y dicen que fue por tu culpa, ¿verdad? ¿Cómo puedo confiar mi guía a un guía que llevó a su pareja a la muerte?’

‘...¿Ja? Seo Kyung-won, ¿acabas de hablar en serio?’

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En el espejo que reflejaba el pasado de Won-jin, la primera escena en la que aparecía Kyung-won era una de él insultándolo. En cualquier lugar al que mirara, solo había escenas como esa.

‘...Ha estado vomitando sangre de vez en cuando.’

‘...Tiene cáncer de páncreas en etapa terminal, señor Won-jin. Podría morir en cualquier momento.’

Por un instante, Kyung-won contuvo la respiración en un lugar inesperado. ‘¿Qué? ¿Qué... etapa terminal?’ Sus labios, que repetían la pregunta en shock, temblaban visiblemente ante la escena.

¿Estaba viendo su verdadero pasado? Lo dudaba, pero... la escena en la que insultaba a Won-jin era sin duda su pasado.

Recordó las palabras del peluche: si lo veía con sus propios ojos y seguía sin creer la verdad, no habría nada más tonto.

Pero, aun así... esto...

“Guías, el cuerpo de un guía es inmune a las enfermedades, entonces, ¿por qué...?”

Si Won-jin realmente estaba enfermo, ¿por qué no se lo dijo? ¿Fue solo un error de su parte pensar que había otra entidad involucrada en la muerte de Won-jin? Entonces, ¿qué tenía que ver Han Jae-young con Won-jin?

Sus complicados sentimientos eran evidentes. Una nueva escena apareció, como si fuera a responder a su duda.

‘Por favor, un guía con cáncer. Si se revela esto al centro... Kyung-won ya tiene una reputación manchada. ¿No se rumorearía que fue el esper Seo Kyung-won el que maldijo al guía? Jaa... sí... es mejor ocultarlo. No es bueno para mí tampoco decir que mi guía está enfermo y hacer que se extienda el rumor.’

‘...Si se lo digo a Seo Kyung-won, ¿cambiará algo? Pero si mi muerte no va a cambiar... tal vez él se culpe a sí mismo.’

Allí, Won-jin, diagnosticado con una enfermedad terminal, se preocupaba por él.

‘¿Por qué tienes esa cara de tonto? No vas a salir a la misión.’

‘Es que... bebí demasiado anoche.’

‘Ja. Un compañero que ni siquiera se cuida... de verdad, me sentiría aliviado si murieras.’

Y allí, Won-jin, solo después de que Kyung-won se fuera, murmuraba para sí mismo.

‘Que me sentiría aliviado si muriera... ¿no es eso demasiado? Sí... para ser honesto, aparte de todo, había otra cosa que temía.’

‘En realidad, la verdad es... que temía que me dijera algo como que “un guía con cáncer” o que “no le importaba si yo moría”. ¿No es eso lo que temías?’

‘Veamos... ¿morir en el cumplimiento del deber sería suficiente?’

Si esto era la verdad... sí, no fue como Won-jin lo pensó, pero cuando Won-jin le confesó que tenía cáncer, él probablemente pensó que era una broma. ¿Cómo podría un guía tener cáncer?, pensaría.

Pero en el momento en que se diera cuenta de la verdad, habría intentado arreglarlo. Estaba seguro de que lo habría hecho.

“...¿Por qué no me lo dijiste?”

Si no le hubiera dicho que deseaba que muriera, ¿qué habría sido diferente? La verdad es que no lo decía en serio. No lo decía en serio.

“¿Por qué...?”

Aquí y allá, los espejos mostraban diferentes momentos. Levantó la cabeza y los miró aturdido. Ah, esa era la última misión que tuvo con Won-jin. Won-jin lo abandonó y se llevó a la bestia.

‘Como alguien que perdió a un compañero en una puerta... me preocupaba que te sintieras solo y te culparas a ti mismo. Pero creo que el tú que yo conozco se recuperará. Tal vez me insultes y me digas que fui un tonto, o que me comporte de manera egoísta y contradictoria...’

¿Estaba reprimiendo el miedo cuando huyó solo? Incluso si la idea de que su muerte tuviera otra razón era solo un tonto malentendido, en este momento ese simple malentendido se había vuelto un tormento.

‘...Kyung-won. Ya que voy a morir, quiero que mi muerte sea lo más útil posible para ti.’

A diferencia de sus palabras tontas, de que deseaba que muriera, la persona que estaba al borde de la muerte pensó en él hasta el final.

“...No debí haber dicho eso. No debí haber dicho ni siquiera eso...”

El espacio se sumió en la oscuridad. El silencio se instaló. Justo cuando ese silencio se volvió insoportable, escenas aparecieron bajo una luz circular que parecía enfatizarlas.

[¿Esto es posible? ¿Posesión? ¿De verdad?]

[No solo estoy dentro del cuerpo de Han Jae-young, sino que no puedo decir que soy yo... Un regalo... Pensándolo bien, aunque no pueda hablar, ¿puedo expresarme con letras?]

[Pero, ¿qué haré, Kyung-won? No importa qué, yo no quería que murieras.]

[¿Por qué, si yo... no te lo dije...⎯]

Con la promesa de que sería feliz, con un “feliz cumpleaños,” la tarjeta de regalo parecía tener el estilo de hablar de Won-jin. La energía guía de Won-jin que sentía de Han Jae-young. Su propia imagen torturando a Han Jae-young, a quien había malinterpretado.

“Han Jae-young... ¿De verdad, eres Won-jin?”

Kyung-won había pensado en la identidad de Han Jae-young. Pero había concluido que era solo un acosador que imitaba a Won-jin para llamar su atención.

Siguió creyendo en eso hasta el final.

“Pero no... en realidad eras tú... ¿De verdad eras tú, Won-jin, por eso hiciste eso?”

‘¿Quién te dijo que me salvaras? No me importa lo que le pase a un tipo así.’

‘Sí, te odio. Odio que un acosador sucio como tú... me recuerde a Won-jin. Es horrible.’

La ilusión, o más bien, su verdadero pasado.

Cuando se derrumbó, no pudo contener las lágrimas. Lloró patéticamente, sollozando sin poder contener los sonidos que salían.

“No... no es cierto. No es cierto...”

“¿Oh, no es cierto? ¿Es usted sintiendo remordimiento por sus acciones? ¿O... tampoco puede creer en esta escena?”

La existencia que se había desvanecido, saltó y gritó. Kyung-won se arrastró, agarró la pierna del ser que tenía delante y preguntó.

“Tú... ¿me estás mostrando el pasado... el pasado real?”

“Para mí, no hay manjar más grande que el dolor humano. ¡Y usted, señor Seo Kyung-won, es como un manjar para mí! Observándolo, pensé que aclarar su tonto malentendido sería una comida diaria para mí.”

El disfraz de peluche, que daba vueltas, silbó burlándose.

“¿Todavía le cuesta creer? ¿O simplemente no quiere creer? ¿No pensó, en secreto, lo mismo, señor Seo Kyung-won? Pero no quiso creerlo y lo ocultó. En este punto, ¿no querer creerlo es solo porque le asusta la reacción? ¡Ah, ja! Al final, ¿sigue siendo un egoísta? ¿Va a evitarlo porque tiene miedo de asumirlo?”

“...Ah.”

“¿Qué espera? Si ha decidido aceptar la verdad, ¡salga de una vez! El deseo que siempre ha anhelado está justo frente a usted, ¡ahora no hay nada más que hacer que agarrarlo lo antes posible!”

Una existencia que se alimenta de la desesperación humana. Por eso eligió a un humano adecuado, le mostró la realidad que debía enfrentar a través de un sistema de juego, y quería alimentarse de una desesperación aún mayor en el futuro.

Ese era el precio que el ganador del juego recibiría.

“¡No se quede sentado, demuéstrelo! ¿No quería que volviera a la vida? ¿No dijo que haría cualquier cosa? Ah, ¿o en realidad le preocupa más no salir herido que lo que le pase a él?”

El ser, que lo incitaba ruidosamente, hizo flotar una puerta y llegó al clímax.

“...No.”

No tenía miedo de salir herido. Esa era la verdad.

“...”

No podía seguir evitándolo. Antes de que Won-jin muriera y cuando estaba a su lado, él siempre lo había herido.

Por lo tanto, ahora que lo sabía todo, debía regresar a la realidad y pedir perdón.

“¡Bien! ¡Salga y confróntelo! ¡Vaya a enfrentar la realidad!”

A pesar del miedo que le invadía, se dirigió hacia el final de la espera que tanto había anhelado.

* * *

< SE20180203 Seo Kyung-won. AG20210407 Choi Ji-woo. Comenzando la búsqueda. Iniciando operaciones. >

Mientras tanto, en el interior de la puerta, la operación de búsqueda estaba en pleno apogeo.

Cintas luminosas, creadas con la habilidad de un esper, se ataron a la cintura de los líderes de los equipos para que no se perdieran. Yoon Ha-na, que estaba en una región lejana por asuntos personales, se había teletransportado deprisa.

Un grupo se formó con un equipo bien organizado: la joven guía con la cabeza gacha, a la que la esper Oh Yeon-ju consolaba.

Continuaron el trabajo repetitivo sin saber dónde ni cómo buscar a los agentes que fueron arrastrados al espacio de otra dimensión dentro del espejo.

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< Comenzando la búsqueda. Iniciando operaciones. >

< Comenzando la búsqueda. Iniciando operaciones. >

… …

< Comenzando la búsqueda. Iniciando operaciones. >

Durante el proceso, en la superficie, la noche se hizo profunda. Un día y una noche pasaron, y llegó el amanecer.

No hubo progreso desde el mediodía hasta el amanecer del día siguiente. El propósito se había perdido hace mucho, y los ojos de todos, convertidos en máquinas de búsqueda, reflejaban la falta de motivación.

“No puedo más, no puedo...”

“¿No es suficiente con lo que hemos buscado? ¿Hasta cuándo vamos a seguir con este trabajo sin sentido?”

“Cómo puede decir eso. ¿Diría lo mismo si su guía o esper hubieran desaparecido?”

Realmente, no sabían cuántas veces habían repetido el mismo proceso.

“Opinión impopular. Honestamente, estoy aquí por la esper Oh Yeon-ju; si no fuera por ella, me habría ido hace mucho.”

“Como si pudieras. Si solo el esper Seo Kyung-won hubiera desaparecido, tendrías que haber hecho lo mismo. ¿El jefe de la central se quedaría de brazos cruzados? A menos que haya una razón inevitable para abandonar la búsqueda⎯”

Los agentes cansados se reunieron y murmuraron. Nadie dijo “¡ánimo!” siquiera de labios para afuera. Todos estaban exhaustos.

Por eso, nadie pudo reprender a los que decían cosas tan insensibles como que querían irse. Era probable que todos los que se reajustaban en silencio pensaran lo mismo.

En ese momento, una voz resonó, llenando de vida los rostros pálidos.

< ⎯Ah, ah. Aviso. La búsqueda se suspende. Todos los agentes deben detener el trabajo de inmediato y regresar a la superficie. Repito... >

La razón que tanto habían esperado llegó oficialmente.

“¿Se acabó?”

La confusión de Won-jin fue resuelta por Je-han.

“Mire,” dijo en voz baja, y los tres —Oh Yeon-ju, Yoon Ha-na y Won-jin— levantaron la cabeza para ver el paisaje cambiado.

“La entrada de la puerta se está cerrando.”

Parecía que la causa era la niebla negra que se arremolinaba y estrechaba la entrada.

< Repito. La búsqueda ha terminado. Los agentes deben salir de la puerta de inmediato. >

“...Vamos. Tenemos que irnos ahora.”

Habían continuado la búsqueda durante un día entero sin resultados. No tenían por qué no saber qué decisión era la más razonable en una situación en la que había un peligro inminente y la misión de rescate no tenía certeza.

“Vamos, guía Jae-young. Rápido.”

Je-han intentó arrastrar a Won-jin, que estaba rígido, pero era difícil doblegar su terquedad.

Fue en ese momento. Un sonido débil, que parpadeaba y se encendía. Won-jin reaccionó como si hubiera escuchado algo y se detuvo, resistiéndose.

“...¿Un sonido? Ja. Lo has oído mal. ¿Qué cambia si nos quedamos aquí?”

Lo atribuyó a una alucinación. La nostalgia le estaba causando alucinaciones. No era algo que pudiera convencer con palabras. Si se quedaban, lo único que pasaría es que morirían. Forzó su mano y lo arrastró. Quizás para Je-han, esta era una oportunidad única.

“Espera un poco más, de verdad, ¡seguro que...!”

Parpadeo.

“...¡Agh!”

“¡Cuidado, todos!”

“¡Qué! ¿Qué es eso⎯!”

Pero Seo Kyung-won siempre había estado al lado de Won-jin y no se podía separar de él. La suerte y las oportunidades que siempre llegaban a Seo Kyung-won, nunca llegaban a Je-han.

.

.

.

“¡Cof! ¡Cof! ¡Ah...!”

“¡Cof! ¡Cof! ¡Ay...!”

“¡Ejem! ¡Ah! De repente, ¿por qué hay una corriente de agua...?”

Una corriente de agua, como una cascada, brotó de la nada. Después del sonido de agua torrencial.

Los agentes, que habían sido arrastrados por la corriente, se quejaban, pasándose las manos por la cara, empapada. Estrujaban sus ropas, escupían el agua de la boca, y les daban reanimación cardiopulmonar a los que habían perdido el conocimiento; era como un campo de batalla caótico.

“¿Están todos bien? ¡Revisen si falta alguien y salgamos! ¡Rápido!”

“¡Qué vamos a revisar, si lo hacemos no saldremos! ¡Sálvese quien pueda!”

La entrada de la puerta no mostraba signos de detenerse, era como un contrarreloj. La situación era un caos, con todos chocando entre sí en su prisa. Pero la suerte siempre cambia y no se puede predecir.

Justo antes de que escaparan de la puerta que se cerraba, se escuchó un grito de alivio entre los agentes de búsqueda.

“¡Aquí, aquí! ¡Encontramos al esper Seo Kyung-won y al guía Choi Ji-woo!”