☞ chapter 12 ☜

En el momento en que vio la pantalla, su mente se quedó en blanco.

Aunque esperaba que no fuera cierto, Ess estaba realmente allí, en la pantalla.

Lo que fue aún más impactante fue la situación irreal, como sacada de una película, que se desarrollaba de forma cruda en la pantalla.

Cada vez que la cola de la bestia, que no se movía, se agitaba, el Esper de clase S, considerado el más fuerte del país, era humillado.

Aunque se levantó y trató de usar su ataque especial, Kang Yeon-hu no pudo contraatacar y en solo unos minutos, se desplomó vomitando sangre.

Era una escena en la que un ser inimaginable jugaba unilateralmente con un pequeño insecto, que no era ni un bocado.

“¡Qué mierda…! ¿Qué es ese bastardo?”

La voz de Kim Jung-ha estaba llena de horror, y las puntas de los dedos de Yu-ha temblaban. Él revisó de nuevo el rastreador, como si no pudiera creer lo que veía en la grabación, y soltó una risa nerviosa.

Afortunadamente, la ubicación actual de Ess era la casa. Eso significaba que solo había atacado a Kang Yeon-hu y había regresado tranquilamente a casa.

Aunque lo había confirmado varias veces, Yu-ha se sentía aliviado cada vez que lo veía. Era una suerte que no hubiera hecho nada peor y hubiera regresado obedientemente.

Yu-ha se mordió las uñas, recordando su tiempo en la mazmorra.

¿Ess era tan bueno en la lucha?

Su apariencia era completamente diferente de cuando luchó contra uno de su especie en el lago de la mazmorra.

Incluso entonces, había destrozado a su rival, pero Ess también había resultado gravemente herido.

Pero ahora no había hecho ni un solo movimiento. Solo había agitado su cola varias veces.

A Yu-ha le pareció que Ess podría vencer a ese aterrador gusano, si se lo encontraba ahora. Era una sensación completamente diferente a la de antes.

¿Cómo pudo hacer eso?

¿No era solo su inteligencia lo que se había desarrollado?

La inesperada habilidad de combate de Ess era impactante, pero lo que más confundió a Yu-ha fue la expresión de la bestia.

No sentía ninguna emoción en su rostro, hasta el punto de preguntarse si era el mismo Ess que se veía tan feliz comiendo cereales con crema batida.

Normalmente, si atacabas a alguien con tanta brutalidad, se mostraría algo de ira o alegría, pero su expresión era tan indiferente que daba escalofríos.

Como un depredador que se lanza a cazar cuando encuentra una presa, Ess destrozó a Kang Yeon-hu sin ninguna emoción.

Yu-ha sintió que la bestia le era extraña.

No parecía el Ess que conocía.

El mismo Ess que siempre se burlaba de él, que reía con sus sonidos extraños, y que lo seducía con solo mirarlo, estaba allí.

Así que tenía una expresión tan indiferente.

De repente, Yu-ha se dio cuenta de algo que había pasado por alto.

Se había olvidado de la verdadera naturaleza de Ess por la forma en que se comportaba, como una mascota dócil.

Como hablaba, comía, dormía y hacía el amor con él, Yu-ha se había olvidado de que su verdadera identidad era la de un monstruo que podía mostrar esos instintos crueles en cualquier momento.

La bestia agarró la cabeza flácida del hombre con su cola y la levantó. Miró fijamente la cara de Kang Yeon-hu, que había perdido el conocimiento.

Parecía estar comprobando si estaba vivo o muerto.

Luego, como si ya no le interesara, arrojó el cuerpo de Kang Yeon-hu y miró a su alrededor. De repente, sus ojos se encontraron con la cámara.

Ess había visto la cámara de seguridad en la habitación de Kang Yeon-hu.

¡Sabe lo que es eso y aun así lo mira!

Yu-ha, que había estado mirando la pantalla con los ojos temblorosos, finalmente cerró los ojos al ver que la vista se le nublaba.

De alguna manera, sintió que esto era su culpa.

Si Ess fue allí, fue por él.

“¿Q-qué vamos a hacer…?”

Las lágrimas que se habían acumulado en sus ojos rodaron por sus mejillas. Estaba tan conmocionado por la situación que no podía pensar en nada.

“Haa… Esta vez, ni yo tengo un plan.”

La voz de Kim Jung-ha sonaba resignada. Yu-ha contuvo los sollozos que querían escapar de su garganta.

“Dios, me estoy volviendo loco. ¿Es posible? ¿Que Kang Yeon-hu fuera derrotado así, sin poder hacer nada?”

Yu-ha entendió lo que Kim Jung-ha quería decir.

En ese momento, el poder de Ess era una gran amenaza para el país, o tal vez para el mundo.

Si Ess tenía el poder de derrotar a Kang Yeon-hu de forma tan abrumadora, la victoria de la humanidad no estaba garantizada, incluso si todos los Espers lo atacaban a la vez.

¿Cómo iban a vencer a un monstruo que tenía las mejores habilidades de combate y usaba magia?

El problema más grande era que no sabían el alcance de las habilidades de Ess.

Si lo que acababan de ver no era ni la mitad del poder de Ess, el país, y el mundo entero, podría convertirse en un campo de batalla en manos de la bestia.

La cara de Yu-ha se llenó de desesperación.

Él era quien había sacado a ese monstruo del mundo, sin miedo.

En ese momento, el timbre del teléfono sonó dentro del auto. Kim Jung-ha, que vio quién llamaba, suspiró profundamente.

Endureció su expresión, apagó el Bluetooth y respondió la llamada directamente.

“Sí, soy Kim Jung-ha.”

Yu-ha pensó en un hombre, al ver al hombre que siempre era frívolo y caprichoso, tan nervioso.

El presidente Yeo.

Parecía que él también había visto las noticias y lo estaba llamando.

Yu-ha trató de calmar su corazón, que latía cada vez más fuerte, y puso a trabajar su mente, que estaba entumecida, mientras Kim Jung-ha solo respondía.

No era el momento de preocuparse por lo que aún no había sucedido.

El problema más grande ahora era que la imagen de Ess había sido transmitida en vivo a todo el país.

Su imagen atacando a un humano con su temible cola.

Y para colmo, la persona atacada era un hombre tan famoso que no había nadie en el país que no lo conociera.

El Cazador de Monstruos, Kang Yeon-hu, considerado el mejor entre los Espers de clase S.

El hecho de que un monstruo hubiera salido de la mazmorra y que un Esper que cazaba monstruos fuera derrotado por ese monstruo ante toda la nación, significaba que esto no pasaría desapercibido.

Y no solo eso.

El padre de Kang Yeon-hu era un alto funcionario, tan influyente que ni siquiera los superiores podían tratarlo de cualquier manera. Si él daba la orden de matarlo, los superiores tendrían que obedecer.

Y se había metido con ese hombre.

Había humillado a Kang Yeon-hu frente a todos.

¿Había alguna forma de resolver esto?

Al enfrentarse a una situación incontrolable, su cerebro, que ya era tonto, se volvió aún más tonto.

En lugar de encontrar una solución, solo le venían a la mente preguntas que no eran importantes en ese momento.

¿Cómo llegó allí? Ess nunca había visto a Kang Yeon-hu.

De repente, recordó lo que Ess había dicho por la mañana.

‘Kang Yeon-hu. ¿Puedo matarlo?’

Al pensarlo de nuevo, el ambiente de Ess en ese momento fue un poco diferente. Como se había comportado de forma tan tranquila, Yu-ha no le había dado importancia. Y esa había sido la causa de todo.

Además, la bestia había insistido en enviar a Lee San-oh con Kang Yeon-hu.

Como si tuviera que hacerlo.

¿Será que le puso un rastreador a Lee San-oh?

Yu-ha recordó el cuello de Lee San-oh, que estaba hinchado como si le hubiera picado una abeja.

¿Quizás le puso un rastreador allí?

No, no.

Era imposible que le hubiera puesto un rastreador del tamaño de un colgante en tan poco tiempo.

Y, sobre todo, Ess no llevaba ningún rastreador en ese momento.

Como habían sucedido cosas absurdas, solo le venían a la mente pensamientos aún más absurdos.

Pero el problema era que sentía que Ess podía hacer posibles esos pensamientos.

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También había sucedido hace unos días. Cuando fue secuestrado por Kang Yeon-hu, Ess lo encontró de inmediato.

Como si hubiera puesto un punto de referencia.

¿Cuál es el punto en común?

¿Qué medio usó Ess para encontrarlo?

Yu-ha ya sabía que tenía la habilidad de teletransportarse, pero no sabía que también podía ir al lugar exacto que quería.

No importaba cuánto lo pensara, no podía encontrar el medio.

Se arrepintió de no haberle preguntado antes. En ese momento, la voz de Kim Jung-ha, que parecía tan lejana, se escuchó claramente.

“Sí, lo llamaré de nuevo.”

Yu-ha salió de sus pensamientos y miró a Kim Jung-ha con una expresión nerviosa.

Él dejó el teléfono en el tablero como si lo hubiera arrojado, suspiró y encendió un cigarrillo.

Kim Jung-ha, que se dirigía a su cabaña, se había sorprendido por la escena de la pelea y se detuvo en el arcén.

Pero la prisa que tenía antes ya no estaba. Su cara se veía tan tranquila, como si se hubiera rendido.

Yu-ha no se atrevió a preguntar qué había pasado.

No sabía lo que diría.

Cualquiera que fuera el caso, por la expresión de Kim Jung-ha, no serían buenas noticias.

Le dio una calada al cigarrillo y exhaló una gran cantidad de humo, llenando el auto.

El olor fuerte del cigarrillo le hizo sentir mareos y le dolió los ojos, pero Yu-ha solo podía confiar en Kim Jung-ha, así que esperó pacientemente a que hablara.

Finalmente, después de fumarse todo el cigarrillo, escuchó su voz.

“Creo que nos equivocamos. No debimos sacarlo de allí en primer lugar.”

Los hombros encogidos de Yu-ha temblaron.

¿Qué va a decir?

Su corazón, que se había calmado un poco, comenzó a latir con fuerza de nuevo.

Él se quedó en silencio por un momento, y luego dijo una frase corta.

“Hay que devolverlo. Al lugar donde estaba.”

“¿…Qué?”

Kim Jung-ha, que había estado mirando al frente, giró lentamente la cabeza y miró a Yu-ha.

Lo miró por un momento, y luego repitió sus palabras, que eran como una sentencia de muerte.

“No hay otra forma que devolverlo a la mazmorra. Si no, lo matarán.”

Plop. El corazón de Yu-ha se hundió y su mente se detuvo. Como si hubiera sido arrastrado a un abismo, todos los sonidos a su alrededor desaparecieron en un instante.

Las lágrimas que no paraban de salir, ahora no salían.

Solo estaba aturdido. No sentía nada, no pensaba en nada.

“Jin Yu-ha.”

Kim Jung-ha lo llamó.

Pero Yu-ha no quería responder. Miró al vacío con una expresión de perplejidad.

“Haa… Jin Yu-ha. Reacciona. Es mejor que eso a que muera.”

Ess morirá.

Sí, era lo lógico.

Había atacado a un humano.

Y no a cualquier humano, sino al Esper de clase S, Kang Yeon-hu, el héroe de la nación.

Ess ya era un ser al que la gente temía.

Cuando un monstruo así sale al mundo y muestra su poder abrumador, la única solución es matarlo. Yu-ha lo sabía bien.

Pero no podía aceptarlo, porque el objetivo era Ess.

Si fuera posible, quería convencer a la gente de que Ess no era un monstruo tan brutal.

Pero, ¿quién lo escucharía?

“Las estaciones de televisión y los superiores están inundados de llamadas de protesta. A pesar de que lo censuraron un poco, se desató el caos. La noticia de que es un monstruo ya se ha extendido. No hay otra solución.”

Lo sabía, su mente lo sabía, pero no podía aceptarlo.

Si lo hubiera abandonado tan fácilmente, no lo habría sacado en primer lugar.

Yu-ha mantuvo la boca cerrada con terquedad, y la voz de Kim Jung-ha se elevó.

“Pronto se dará la orden de matarlo. ¡Los Espers ya se están reuniendo! Así que reacciona y piensa en cómo convencer a la bestia para que vuelva a la mazmorra. Yo te ayudaré con eso. ¡Es mejor vivir así que morir!”

En ese momento, los ojos nublados de Yu-ha volvieron a brillar.

“¿La mazmorra… no explotó? ¿La volaron?”

“Volamos la parte de adentro, pero no desapareció. El interior debe estar colapsado, pero seguro que él puede encontrar un lugar para esconderse. Si realmente hay un portal doble, tal vez pueda regresar al lugar donde estaba.”

La boca de Yu-ha estaba seca.

Sabía que esa era la única forma de salvar a Ess, pero la idea de enviarlo de vuelta a ese lugar desolado le rompía el corazón.

“Jin Yu-ha.”

Kim Jung-ha agarró los hombros de Yu-ha y lo miró con una seriedad que nunca antes había visto.

Al ver su rostro, las lágrimas de Yu-ha, que se habían acumulado, comenzaron a caer sin control.

“Haa…”

Kim Jung-ha soltó un gran suspiro y finalmente abrazó el cuerpo tembloroso de Yu-ha.

Como alguien que los había observado de cerca, sabía lo que el monstruo, o Ess, significaba para Yu-ha, y no pudo decir nada más.

Cuando le dio palmaditas en la espalda, Yu-ha soltó los sollozos que había estado conteniendo.

* * *

Después de despedir a Kim Jung-ha, Yu-ha se paró frente a la gran puerta, se secó los ojos enrojecidos y respiró hondo.

Sabía que no había tiempo que perder, pero no podía moverse.

Había estado pensando en qué decir durante todo el camino, pero sentía que las lágrimas saldrían antes que las palabras cuando viera a la bestia.

La mano que agarraba la vieja correa de la mochila temblaba sin control.

Respiró hondo una y otra vez, pero su corazón, que latía con fuerza, se agitaba aún más.

Con solo pensar en separarse de Ess, sentía ganas de llorar.

Con los ojos de nuevo húmedos, Yu-ha echó la cabeza hacia atrás, abrió bien los ojos y murmuró como si estuviera rezando un hechizo.

“Esta es la única manera de salvar a Ess.”

Yu-ha se armó de valor y entró por la puerta principal. Vio el interior de la casa que se iba revelando y se detuvo de nuevo.

Vio a Ess parado dentro de la puerta. Parecía que había estado allí todo el tiempo, parado sin moverse y mirándolo.

Pero el ambiente de Ess era extraño.

Normalmente, habría sonreído y saludado, pero hoy no mostraba ninguna reacción.

En lugar de darle la bienvenida, su expresión era tan seria que parecía saber cuán grande era el problema que había causado.

Yu-ha se obligó a caminar, a pesar de que sus piernas temblaban.

Tengo que sonreír. Actuar como si nada hubiera pasado.

Se lo repitió como un hechizo mientras caminaba hacia la puerta, pero sus ojos ya estaban tan calientes que estaban a punto de derramar lágrimas.

Cuando se paró frente a la puerta, la bestia abrió la cerradura y la puerta con total naturalidad.

Yu-ha soltó una risa vacía ante su acción.

Así que siempre supo cómo abrirla y solo fingía no saber.

Se calmó lo mejor que pudo, forzó una sonrisa y lo saludó torpemente.

“He vuelto.”

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Pero Ess no respondió. Como si presintiera lo que le iba a pasar.

Al verlo así, las lágrimas que había estado conteniendo comenzaron a salir. Yu-ha esquivó a Ess y entró a la casa.

Estaba a punto de ir al baño, cuando una fuerza lo detuvo de nuevo.

Se mordió el labio para no llorar, y Ess, que lo abrazó por detrás, dio una excusa absurda.

“No lo maté.”

“¡…!”

“Yu-ha me dijo que no, así que lo dejé vivir.”

“¡Hah!”

Las lágrimas finalmente cayeron al suelo. Y de su boca salió una risa vacía.

¿Así que ahora quiere que lo felicite?

¿Debería darle las gracias por cumplir su promesa?

La tristeza y la ira lo invadieron al mismo tiempo. A pesar de todo, su corazón se sentía destrozado.

Ess no parecía entender. No entendía lo que había hecho.

No sabía qué castigo recibiría por ello.

Lo sobreestimé.

Claro, ¿cómo iba a saberlo? Si lo hubiera sabido, no lo habría hecho.

“Yu-ha, ¿estás enojado?”

“...Suéltame.”

La voz de Yu-ha era más fría que nunca, y la mano de Ess que lo abrazaba se estremeció.

Aun así, Ess se mantuvo firme. Yu-ha lo apartó con dureza, se secó las mejillas mojadas y lo miró fijamente.

Luego le preguntó lo que más le intrigaba.

“¿Cómo fuiste allí?”

“...Mi habilidad...”

“¡No! ¡Cómo supiste a dónde ir!”

Cuando le gritó, el ceño de la bestia se frunció. Pero no era por ira, sino por desconcierto.

Nunca antes había visto a Yu-ha enojado así.

Una vez que su ira estalló, Yu-ha no pudo controlarse. Aun así, para averiguar la verdad del asunto, Yu-ha acorraló a Ess.

“Respóndeme con sinceridad. ¡Kang Yeon-hu! ¿Cómo supiste dónde estaba la casa de ese bastardo? No lo conoces. Nunca lo viste, ¡así que cómo sabías a dónde ir!”

La bestia lo miró por un momento y luego se dirigió a la televisión.

La encendió con tranquilidad. Inmediatamente, las noticias sobre Ess comenzaron a salir.

Al ver eso, Yu-ha sintió que su mente se desvanecía.

La bestia debe haber visto eso.

Por eso se disculpa.

Pero Ess manipuló el control remoto como si nada y reprodujo algo.

Cuando Yu-ha vio esa pantalla, no pudo cerrar la boca.

Era un anuncio de campaña que Kang Yeon-hu había hecho.

¿Cómo...?

Yu-ha estaba más que asombrado de que la bestia supiera usar las funciones de la televisión, que ni siquiera él conocía.

Entonces, Ess dijo algo aún más sorprendente.

“Vi a Kang Yeon-hu. En el lugar donde Yu-ha se besó con ese maldito bastardo.”

“¿Qué?”

“Esa cara, la misma cara, estaba allí. Y el cuerpo de Lee San-oh olía a eso. Olía a Kang Yeon-hu.”

“Espera. Haa…”

Yu-ha detuvo a Ess para ordenar sus pensamientos.

Es decir, la bestia, que había aparecido en la casa de Kang Yeon-hu hace unos días, vio la foto de Kang Yeon-hu que estaba colgada en la pared.

Claro, tenía sentido. Tenía una foto tan grande como la de un artista.

Y como era una bestia con un sentido del olfato muy desarrollado, sintió el mismo olor que había olido en esa casa, en el cuerpo de Lee San-oh.

Pero, ¿qué tenía que ver?

¿Era una razón para atacar a Kang Yeon-hu?

Yu-ha, con los pensamientos en orden, volvió a preguntar con voz fría.

“¿Y qué tiene que ver eso con lo de hoy? ¿Conociste su cara, así que está bien atacarlo? ¿Qué si hubiera sido una persona normal?”

“Ese bastardo le mordió el cuello a Yu-ha.”

Su corazón se encogió.

Nunca imaginó que la bestia se daría cuenta de que la marca en su cuello era obra de Kang Yeon-hu.

Yu-ha mismo se había olvidado de que le habían mordido el cuello.

Estaba tan preocupado de que Kim Jung-ha los hubiera descubierto besándose que no había pensado en eso.

¿Y la bestia lo había recordado todo este tiempo?

No, ¿cómo supo que había sido Kang Yeon-hu, solo por la marca de la mordida?

“¿Q-quién te dijo que fue Kang Yeon-hu quien me mordió el cuello?”

“El olor. Ese día, el cuerpo de Yu-ha olía mucho a Kang Yeon-hu. Especialmente su cuello y su boca.”

Yu-ha no tenía nada más que decir. Ya no podía imaginar hasta dónde llegaban las habilidades de la bestia.

“Tú, ¿qué eres…?”

“Pero me equivoqué. Así que no te enojes, Yu-ha.”

La bestia se acercó.

Yu-ha retrocedió sin querer.

“No te acerques.”

La expresión de la bestia, que se había detenido, se volvió fría. Pronto, se volvió tan indiferente que no se podía sentir ninguna emoción, como la que Yu-ha había visto en la pantalla.

Ver esa expresión le dolía, pero no podía dejar pasar el asunto.

Yu-ha volvió a preguntar.

“¿Por qué le dijiste a Lee San-oh que fuera allí? ¿Qué le hiciste?”

La bestia, que había estado en silencio, sacó su cola de repente.

Yu-ha miró el cuerpo que crecía y se estremeció, y de repente, la punta de la cola se acercó a él.

Antes se habría asustado, pero ahora no.

“¿Qué quieres?”

“Mira el final.”

Yu-ha frunció el ceño, miró a Ess y sacó la cabeza.

En el centro de la cola, había una espina muy pequeña.

Yu-ha, sorprendido por algo que nunca había visto, miró a la bestia. Ess respondió con una expresión aburrida.

“Le puse mi fluido corporal en el cuerpo de Lee San-oh. Con ese olor, puedo encontrarlo en cualquier lugar.”

“¿Qué? ¿Cuándo?”

Yu-ha recordó de nuevo el cuello hinchado de Lee San-oh.

Así que fue obra de Ess.

¿Cuándo se lo inyectó?

“Espera. Entonces, cuando viniste a buscarme, ¿también me inyectaste tu fluido corporal?”

En el mismo momento en que preguntó, la cara de Yu-ha se contorsionó de vergüenza.

¿Por qué pregunto eso?

Todo lo que la bestia había eyaculado en su cuerpo todos los días era su fluido corporal.

“No, no tienes que responder.”

Yu-ha, que le tapó la boca a la bestia que iba a responder sin pensarlo, se frotó la frente dolorida.

Había descubierto un nuevo hecho, pero ya no le sorprendía.

Si Kim Jung-ha lo hubiera escuchado, se habría sorprendido y sus ojos se habrían abierto de par en par ante el nuevo material de investigación, pero Yu-ha se sentía agotado por tener un monstruo tan inteligente.

La expresión de Yu-ha, que había soltado una risa vacía, se contorsionó de inmediato.

“¡Ah, joder!”

Tal vez él también se enteraría pronto.

Como le había dado la sangre de Ess, Kim Jung-ha sin duda descubriría que había algo en el fluido corporal de la bestia.

“Me estoy volviendo loco.”

“Yu-ha.”

“No te acerques.”

Ess, que iba a acercarse de nuevo, se detuvo ante la voz cruel de Yu-ha.

Yu-ha se sintió sin fuerzas, pero al mismo tiempo le dolía el corazón ver a la bestia, que no se movía por sus palabras, tan nerviosa.

¿Podré enviarlo?

¿Podrá esa bestia, que no se puede imaginar lo lejos que llegan sus habilidades, que atacó a un humano sin pestañear, vivir de nuevo en esa desolada mazmorra?

¿Podrá vivir sin mí?

Yo no podré vivir sin él…

¿Qué vamos a hacer ahora?

Las lágrimas que no paraban de salir de nuevo se desbordaron.

Ess abrió los ojos de la sorpresa, se acercó sin permiso y lo abrazó.

Luego, se disculpó una y otra vez.

“Lo siento, me equivoqué. Ess, es malo. Así que no llores, Yu-ha.”

* * *

La tormenta que había pasado una vez creció sin cesar y finalmente se tragó a Yu-ha.

Yu-ha, que recibió la llamada de Kim Jung-ha y encendió la televisión, miró con intención de matar a un hombre que salía en la pantalla.

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[Sí, es cierto. Ese bastardo, no. Es un monstruo. Lo vi claramente cuando estuve atrapado en la mazmorra. Y el que sacó a ese monstruo fue, sin duda…]

Lee San-oh se detuvo de repente y miró fijamente a la cámara. Su boca se movió lentamente, y un nombre que nunca debería haber salido de su boca, salió.

[Creo que fue el guía Jin Yu-ha.]

[¿El guía Jin Yu-ha? ¿De qué rango es? ¿Cómo pudo un guía, que no es un Esper, sacar a un monstruo tan aterrador?]

Como si lo que decía no tuviera sentido, Lee San-oh comenzó a tartamudear.

Pero una vez que abrió la boca, las palabras salieron sin control.

[Ah… es, es de clase D, pero… allí, los dos se comportaban como si fueran amantes y estaban siempre juntos, y esas cosas, ah, es decir...]

[¿Qué cosas? ¿Podría ser más específico?]

[Es, es decir… Fue, fue sexo…]

[¡Ah! Entiendo. Creo que con eso es suficiente.]

Por alguna razón, la cara de Lee San-oh se puso roja.

[¿Así que el monstruo y el guía Jin Yu-ha no son una pareja normal? Pero, ¿es eso posible? Por lo que dice el guía Lee San-oh, parece que un monstruo y un humano se enamoraron. ¿Cree que un monstruo sin razón, sabría lo que son esos sentimientos?]

Lee San-oh se quedó sin palabras ante la pregunta insistente y miró al periodista con una expresión de desconcierto.

El periodista asintió como si le dijera que dijera lo que sea, y una respuesta extraña salió de la boca de Lee San-oh.

[¡De todos modos! Creo que el monstruo atacó al Esper Kang Yeon-hu por órdenes del guía Jin Yu-ha. El guía tenía rencor contra el Esper Kang Yeon-hu.]

[¿Rencor? ¿Qué pasó entre ellos?]

[Eso es un asunto personal del Esper Kang Yeon-hu, así que no puedo decirlo...]

“¡Hah! ¡Maldito bastardo! ¡Por qué lo salvé!”

“Ahora, ¿lo mato…?”

Yu-ha levantó la vista, y Ess, que estaba murmurando, cerró la boca.

Yu-ha miró a la bestia, que bajó la vista disimuladamente, y volvió a mirar la televisión.

¿Qué mala suerte tengo para que me haga eso?

No podía entenderlo.

Él lo había ayudado cuando estaba en problemas, e incluso le había salvado la vida.

Así que, ¿por qué me hacía eso?

“¡Por eso no se debe cuidar a un animal de pelo negro!”

En ese momento, Ess, que estaba quieto, comenzó a enrollar su cabello rojo con el dedo y a soltarlo.

A primera vista, parecía que lo hacía sin razón, pero Yu-ha, que entendió el significado de sus acciones, soltó una risa vacía.

Así que ya entendía esas cosas.

Luego, soltó un suspiro de frustración de nuevo.

“Haa… De verdad que me voy a volver loco. ¿Por qué de repente pasa todo esto?”

Los ojos de Yu-ha se entrecerraron de nuevo, y Ess, que desvió la mirada disimuladamente, se peinó el cabello desordenado y puso una expresión de vergüenza.

Incluso ahora, al ver su expresión de inocencia, Yu-ha no podía simplemente reír, porque la expresión indiferente de la bestia en la pantalla seguía apareciendo en su mente.

“De todos modos, no hay tiempo para esto. Tenemos que irnos tan pronto como llegue el doctor, así que haz tus maletas rápidamente.”

“¿Maldito bastardo?”

“¡Oye! ¡Si vuelves a atacar al doctor, te enviaré a la mazmorra de verdad! Uf… De acuerdo. No importa lo que pase, no vuelvas a atacar a nadie más. ¿Entendido?”

Ess frunció el ceño y asintió a regañadientes.

Yu-ha bajó rápidamente de la pierna de Ess y se dirigió a la cocina sin remordimientos.

Sacó dos mochilas grandes, le dio una a Ess y se quedó con la otra.

“Sube y pon tu cepillo de dientes, pasta de dientes, ropa y todas las cosas que usábamos.”

“¿Todo?”

“¡No, solo las cosas necesarias!”

La bestia asintió con una expresión seria y se apresuró a subir al segundo piso.

Yu-ha vio a la bestia sin ropa correr por las escaleras y frunció el ceño.

No tiene ninguna intención de ponerse ropa.

Luego, sonrió con alivio.

Fuera por suerte o por desgracia, el plan de enviar a Ess a la mazmorra se pospuso debido a Lee San-oh.

Ahora, la persona que tenía que esconderse no era solo Ess, sino también Yu-ha.

Pero su corazón se sentía mucho más ligero.

No tenía que hacer la única cosa que no quería hacer, o más bien, que no podía hacer.

Le preocupaba enviar a la bestia, pero lo que más le aterrorizaba era separarse de él.

Así que, ahora que las cosas estaban así, Yu-ha decidió seguir el plan que había hecho al principio.

Primero, se mudaría a otro lugar que Kim Jung-ha había preparado, y mientras estuviera allí, limpiaría sus rastros y se iría del país.

Le preocupaba que Kim Jung-ha se opusiera, pero en este punto, él tampoco podría detenerlo.

Kim Jung-ha sabría que si lo atrapaban a él, tendría que pagar por los crímenes de Ess.

Si no lo ayudaba, lo amenazaría con delatarlo como cómplice.

Quería desaparecer sin dejar rastro, sin que nadie lo supiera, pero para ir a otro lugar, tenía que tomar un avión o un barco.

Pero era imposible subir a Ess a uno.

Por eso necesitaba a Kim Jung-ha.

Era el aliado más confiable en esta situación.

Creía que él encontraría una manera.

Yu-ha se deshizo de sus pensamientos, abrió la mochila y revolvió rápidamente los cajones. Puso pan de crema, mermelada, crema batida, miel y todo lo que a Ess le gustaba.

Se estaba preguntando qué más debía llevar, cuando Ess bajó las escaleras, como si ya hubiera terminado de empacar.

La figura de la bestia apareció, y la mochila en su espalda se vio lentamente. Pero cada vez que caminaba, algo ondeaba en la mochila que no estaba completamente cerrada.

¿Qué es eso?

Yu-ha abrió los ojos, salió de la cocina y se paró frente a Ess.

“¿Qué empacaste? ¿Vaciando toda la habitación?”

“Grrr.”

La risa astuta de la bestia le dio escalofríos.

Cuando Yu-ha trató de revisar la mochila, Ess retrocedió rápidamente y dijo con una expresión seria, como si no fuera a ceder.

“Me llevaré la manta en la que Yu-ha se orinó.”

“¿Qué…?”

Al principio, Yu-ha no entendió lo que decía y su cara se quedó en blanco. Luego, se contorsionó.

Ahora sabía qué manta había empacado la bestia.

Era la manta en la que Ess y él habían estado rodando, que olía a semen y fluidos, hasta el punto de que el olor a flor de noche era como un perfume.

Y aun así, la bestia se metía la nariz en ella y dormía.

La expresión de Yu-ha se endureció, y Ess se aferró a la mochila, diciendo una tontería.

“Esta es mi manta, de apego.”

“¡De apego, mis cojones! ¡Dámela!”

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Yu-ha se lanzó hacia él, pero la bestia lo esquivó rápidamente y salió corriendo.

“¡Oye! ¡Devuélvela! ¡Por qué te la llevas!”

“¡No quiero!”

De repente, comenzó una persecución con el sofá en medio.

Yu-ha jadeó y rodó los ojos para atrapar a Ess, pero no pudo.

Toda la casa retumbaba y era ruidosa, como si estuvieran en una guerra.

No sabían que Kim Jung-ha los estaba viendo desde el auto, y los dos estaban jugando a ‘atrápenme si pueden’.

Kim Jung-ha sacudió la cabeza al ver a los dos, y murmuró con desdén.

“Esos bastardos con solo jardines de flores en la cabeza. El mundo está patas arriba, y ellos están felices, divirtiéndose. Haa…”

Kim Jung-ha suspiró profundamente y consideró por un momento si debía simplemente irse.

* * *

Aunque era más pequeña que la casa anterior, esta tampoco estaba mal. Comparada con la suya, parecía un palacio.

Yu-ha miró a su alrededor y se burló de Kim Jung-ha.

“Parece que tiene mucho dinero, ¿eh? ¿Un investigador gana tanto?”

“¿Por qué, ahora sí quieres trabajar?”

“No. De todos modos, ahora aunque quisiera, no podría.”

“Aunque pudieras, ya no te lo pediría, idiota. Te traje para trabajar y en lugar de informar, te la pasabas follando con el tipo al que tenías que vigilar. Por eso te despidieron.”

Yu-ha no tuvo nada que decir, así que solo frunció los labios.

De repente, sintió algo extraño y miró a un lado. Los ojos de Ess, que estaba pegado a él como un chicle, se habían vuelto negros.

Aunque miraba a Kim Jung-ha como si quisiera matarlo, Ess se esforzaba por portarse bien. Quizás por la gran metedura de pata que había cometido, se portaba bastante bien.

Kim Jung-ha también notó que Ess no era el mismo de siempre, así que se sentó con calma.

Pero estaba tan tenso que cada vez que la bestia respiraba fuerte, sus piernas cruzadas se estremecían.

¿Cómo no iba a estarlo?

Era un monstruo que había destrozado al gran Kang Yeon-hu solo con su cola.

Además, él mismo había sido atacado varias veces, por lo que era natural que sintiera miedo.

Como era de esperar, pronto reveló lo que sentía.

“Haa, joder. No voy a morir de forma natural.”

“No lo va a atacar. Así que relájese.”

“¿Cómo puedes garantizar eso? Este bastardo… no, ¿te ha pedido permiso para atacar alguna vez?”

“De todos modos, no lo hará. Ah, olvídese de eso. Tengo que consultarle algo.”

“¡Ahora qué! ¡No soy tu padre, por qué me consultas todo!”

Kim Jung-ha gritó de repente, y la cabeza de Ess se inclinó lentamente hacia las once.

En ese momento, Kim Jung-ha descruzó las piernas y se levantó de un salto, escondiéndose detrás del sofá.

Fue un acto reflejo.

Yu-ha, que se aguantaba la risa, se burló con voz calmada.

“¿Y por qué grita así? Asusta a nuestro niño.”

“Ah, joder. Me quita la dignidad.”

Kim Jung-ha murmuró, pero se sentó de nuevo en el otro extremo del sofá, lejos de Ess.

Y volvió a gritar sin motivo.

“¡Ah, entonces qué! ¿Qué es?”

Yu-ha, con una expresión seria, miró a Kim Jung-ha y finalmente reveló lo que pensaba.

“Me voy a ir de aquí.”

“¿Y a dónde vas a ir? Claro, supongamos que vas a algún lado. ¿De verdad crees que no te encontrarán en este país tan pequeño? Te atraparán en menos de tres días, apuesto mi mano.”

Aunque sus palabras eran duras, la cara de Kim Jung-ha estaba llena de emociones encontradas.

Se sentía preocupado y nervioso, y también enojado.

“Haa, así que no hagas nada estúpido y solo haz lo que yo te diga. Yo me encargaré…”

“No. Es mi vida. No puedo vivir de su ayuda para siempre. Por eso decidí irme de este país.”

“¿Qué?”

Los ojos de Kim Jung-ha se abrieron de par en par, como si no se lo hubiera esperado.

Lo miró por un momento y luego se frotó la cara con las manos.

“Haa, ¿así que cuando dijiste que te ibas de aquí, te referías a irte del país? ¿Y con él? Bien, ¿y a dónde vas a ir?”

“E-eso… todavía no lo sé.”

“¿Y cómo van a ir? ¿Sabes que este tipo… no, Ess no puede pasar por los procedimientos normales, no? ¿Entonces vas a hacer contrabando? ¿Crees que será fácil?”

Yu-ha se enojó por las palabras del hombre, que se burlaba de la situación, que ya era frustrante.

La expresión de Yu-ha se torció, y Kim Jung-ha se puso a alardear.

“Te di de comer, te di un lugar donde dormir y te dejé disfrutar de tu luna de miel, ¿y ahora vas a desaparecer sin decir nada?”

Yu-ha, que había bajado la cabeza como si se estuviera arrepintiendo, levantó la vista y soltó una serie de palabras aún más desagradecidas.

“Por eso me voy. Si nos quedamos, usted tendrá que limpiar nuestros líos. Mírenos. Ahora nos está escondiendo y se está volviendo un criminal con nosotros.”

“¿Qué?”

“Si me atrapan, me preguntarán quién me ayudó, cómo salimos de la mazmorra, dónde vivíamos, y como sabe, no soy bueno mintiendo…”

“¡Hah! ¡Mira a este loco! ¿Y qué? ¿Me vas a delatar?”

“¡No! ¿Cree que quiero delatarlo? Trataré de negarlo, pero seguro que se notará.”

“Wow… ¡Mi madre siempre decía que no se debe cuidar a los animales de pelo negro! Y yo lo hice. Y al final, me traicionaron.”

De repente, Ess asomó la cara y bajó la cabeza.

Pero Kim Jung-ha, que no entendió lo que significaba, se pegó al sofá y sus ojos, que se abrieron de par en par, temblaron.

Aun así, Ess sacó su cabello y dijo una cosa.

“Es rojo. Grrr.”

“¡Puhah!”

Las mejillas de Yu-ha se inflaron al tratar de aguantar la risa. Cuando vio la cara de Kim Jung-ha, que entendió las palabras de Ess y se torció, no pudo aguantarse y se echó a reír a carcajadas.

“¡jajaja!”

“Grrr.”

“¡jajaja! ¡aja!”

Toda la casa resonó con la risa de Yu-ha. Las lágrimas llenaron sus ojos.

“Ay, mi barriga. Ugh…”

¿Cuánto tiempo hacía que no se reía así?

Se calmó y se detuvo.

“Creí que sería un funeral, pero parece una fiesta.”

El ambiente se congeló de inmediato ante la voz que no debía escuchar.

Los tres hombres se giraron al mismo tiempo hacia una mujer.

Yeo Ya-hee, que había entrado con confianza, vio a Ess y se puso pálida, retrocediendo.

Kim Jung-ha, que se sintió irritado por la invitada inesperada, se acercó a Yeo Ya-hee.

Luego, la rodeó con el hombro para protegerla de Ess y se alejó.

“¿Por qué, por qué está ese monstruo?”

“Habla con cuidado. Él entiende todo.”

“¡Hic!”

Yeo Ya-hee, que se sorprendió por el susurro de Kim Jung-ha, soltó un hipo.

Le pareció gracioso ver a la mujer, que siempre era fría y arrogante, tan aturdida, pero no lo suficiente como para reírse.

Yu-ha suspiró profundamente, le advirtió a Ess con la mirada que no se moviera y fue a la cocina por agua.

“Tome.”

Yeo Ya-hee tomó el agua con cuidado, pero seguía desconfiando de Ess.

Ess también tenía una expresión fría. Pero sus ojos parecían peligrosos.

Yu-ha no sabía por qué la bestia la miraba así, si era la primera vez que la veía.

Yu-ha, por si acaso, se sentó al lado de Ess y le tomó la mano con fuerza.

Si la bestia se enojaba y sacaba su cola, algo irreversible podría suceder.

Yu-ha revisó disimuladamente la parte trasera de los pantalones de Ess.

“¿Cómo llegaste aquí?”

“¿Qué? ¿No saben que esta es mi cabaña?”

“Hmm, entiendo. Entonces, siéntate.”

“¡No! Yo, yo aquí…”

“Bueno, haz lo que quieras.”

Kim Jung-ha regresó al sofá solo, y las cejas de Yeo Ya-hee se levantaron.

Ella suspiró y caminó hasta detenerse detrás del sofá.

Luego, vio que Ess la miraba fijamente, dio la vuelta y se sentó enfrente de Yu-ha.

“N-no va a atacar, ¿verdad?”

“No, a menos que me moleste.”

“¿Qué?”

“Si me molesta como la última vez, pasará como Kang Yeon-hu…”

“¡No! Q-qué estás diciendo. ¿Cuándo te molesté? Solo te di un poco de cariño porque eras, eras lindo…”

Los ojos de Ess se volvieron negros de inmediato. Yeo Ya-hee, que sintió que algo andaba mal, abrazó a Kim Jung-ha y gritó.

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“¡Kyaak! ¡Oppaa!”

“Haa… ¿Por qué le pones esa cara a un niño, uhp!”

Yeo Ya-hee le tapó la boca a Kim Jung-ha con un sonido sordo y negó con la cabeza a Yu-ha.

Su expresión era de ‘por favor, dime que no es cierto’.

Yu-ha la miró sin emoción y luego miró a Ess. Sonrió suavemente, y la bestia también sonrió.

La respuesta inmediata de la bestia hizo que Yu-ha soltara una risa.

Le encantaba que la bestia no cambiara, sin importar la situación. Con ese pensamiento, Yu-ha decidió regalarle todo su cuerpo a Ess esa noche.

“Uf, voy a salir a fumar un cigarrillo, así que cálmalo. Es un rehén, así que no lo dejes escapar.”

“¡Oppa!”

Kim Jung-ha, que de repente se había puesto de mal humor, agitó la mano y salió con un cigarrillo.

Yu-ha se dio cuenta de por qué actuaba así, pero no hizo nada. Desvió la mirada y vio que Yeo Ya-hee, que seguía asustada, miraba a Ess de reojo.

Yu-ha, a quien no le gustó la mirada, la advirtió con voz fría.

“No mire a Ess así. Como ve, ahora es humano. No se le mira así a la gente.”

“¡Qué! Hum... está bien.”

Ella gimió y finalmente miró a Yu-ha.

“Pero, ¿cómo llegaron aquí?”

“¿Por qué todos me preguntan cómo llegué, si es mi cabaña? Los intrusos son ustedes, ¿no?”

“Nos iremos pronto.”

“¿De verdad?”

Parecía que había venido a echar más leña al fuego. La expresión de Yu-ha se endureció, y Yeo Ya-hee se rió y abrió su bolso.

Sacó un papel y un bolígrafo, se los dio a Yu-ha y se quejó.

“Por qué no me enviaste tu número de cuenta, y me hiciste venir hasta aquí.”

“¿Qué?”

“Anota tu cuenta. Te daré dinero.”

Yu-ha sospechó de sus intenciones y no tomó el bolígrafo de inmediato.

Cuando solo la miraba, Yeo Ya-hee chasqueó la lengua y dijo algo aún más increíble.

“También estás en una situación difícil. Por eso vine a ayudarte.”

“¿…Usted, me ayuda?”

“Si no, Oppa seguirá pegado a ti. Así que vine a ayudarte a deshacerte de él.”

Su forma de hablar no parecía sincera en absoluto, pero por alguna razón, Yu-ha la vio de otra manera.

Su mal genio parecía una máscara para ocultar su vergüenza.

Yu-ha la miró con asombro, y Yeo Ya-hee lo apuró con el bolígrafo en la mano.

“¡Anótalo! Y dime qué piensas hacer en el futuro. Haré lo que pueda para ayudarte.”

“¿Otra vez haciendo tratos?”

Kim Jung-ha, que de repente se había calmado, se sentó en el sofá con su expresión descarada y los miró a ambos.

“¿Q-qué tratos?”

“¿Cuánto vas a cobrar esta vez, Jin Yu-ha?”

A la pregunta de Kim Jung-ha, el ceño de Yeo Ya-hee se frunció. Miró a Yu-ha como si le estuviera preguntando si ya se lo había dicho.

“Todavía no me ha dicho la cantidad. Pero hay algo más tentador.”

“¿Qué es?”

La forma en que se sentó en el sofá mostraba que se sentía más cómodo con Ess.

Yu-ha miró al hombre arrogante y apretó la mano de Ess.

“Dice que nos ayudará a hacer todo lo posible para que nos vayamos de este país.”

“¿Qué? ¡Oye! ¡Cuándo dije que haría todo! ¿Eh? Espera, ¿te vas a ir del país?”

“‘Irse del país’ no suena mal.”

Yu-ha sonrió, y Yeo Ya-hee los miró a los dos con los ojos abiertos.

Kim Jung-ha soltó un suspiro corto y miró a Yeo Ya-hee.

“¿Y qué vas a recibir a cambio?”

“Hmph, ¿qué voy a recibir? Solo los estoy ayudando.”

Sus ojos temblaron. Yu-ha los miró a los dos y sonrió con amargura.

Eran una buena pareja.

Pero sintió que los había arruinado.

Bueno, no lo había hecho a propósito.

“¿Tú, ayudando a alguien sin recibir nada? Dime la verdad.”

“¡Shi…! ¡No hay nada! ¡Qué voy a recibir de él!”

“A mí.”

El ataque repentino hizo que Yeo Ya-hee se quedara sin palabras.

Su cara se puso roja.

“¿Qué? No te queda bien. ¿Desde cuándo te sonrojas por mí?”

“¡Cállate! ¡Ahora estoy hablando con Jin Yu-ha!”

Ella giró la cabeza y miró a Yu-ha con ojos feroces.

Yu-ha, que se sintió incómodo por el ambiente, decidió pedir lo que quería.

“Por favor, háganos un camino para que Ess y yo podamos salir sin que nadie se entere.”

“¿Ustedes dos juntos? Él, no. Yo, yo…”

Parecía que no sabía cómo llamarlo, así que su voz se alargó.

“Ay, joder. ¡De todos modos! ¿Ess tiene pasaporte?”

Ahora que lo había llamado por su nombre, Yeo Ya-hee miró de reojo a Ess.

Pero no era el momento de discutir sobre eso.

“Claro que no.”

“¿Por qué no pides también su número de identidad?”

Kim Jung-ha, que se estaba arreglando las uñas, se burló. Las esquinas de los ojos de Yeo Ya-hee se levantaron ferozmente.

Yu-ha se preguntó por qué Kim Jung-ha estaba molestando a Yeo Ya-hee sin razón.

“¿De verdad viniste a ayudarnos?”

Cuando él le preguntó de nuevo con incredulidad, la expresión de Yeo Ya-hee se endureció.

“Wow, tengo que vivir más para ver a Yeo Ya-hee ayudar a alguien sin recibir nada a cambio.”

La expresión de Yeo Ya-hee estaba a punto de estallar.

Yu-ha miró a Kim Jung-ha, que se estaba comportando de forma extraña, y Yeo Ya-hee volvió a mostrarle un lado inesperado.

“¡Ya basta! Ya tengo suficiente dolor de cabeza. ¡Ah!”

De repente, ella aplaudió y corrió hacia la puerta. Trajo una gran bolsa que había dejado allí y sacó algo de ella.

Al ver eso, la cara de Kim Jung-ha se arrugó de ira.

“¡Tú, por qué trajiste eso!”

“Escuche y luego enójese. El laboratorio está patas arriba. Los superiores vinieron en masa para quemar a todos los monstruos que vinieron para el experimento. Y están revolviendo todo para encontrar cualquier cosa que pueda causar problemas. Yo robé esto en medio de todo eso.”

“¡Hah! ¡Esos bastardos se atrevieron a revolver mi laboratorio!”

“Papá se encargará de eso.”

Un momento de silencio fluyó después de su respuesta tranquila.

Kim Jung-ha, que aún no se había calmado, resopló por un tiempo y luego se levantó de un salto con los ojos bien abiertos.

“¡Hee-yeon!”

Yu-ha, que también se dio cuenta, se puso pálido y se levantó de un salto.

Yeo Ya-hee, que sacudió la cabeza al ver a los dos, volvió a meter la caja fuerte secreta de Kim Jung-ha en su bolso y dijo con calma.

“Mi hermano Lee Ji-un sacó a la bebé monstruo. Probablemente esté con el guía An Seong-yeon.”

“¿Qué?”

“No había dónde esconderla de inmediato. Así que es mejor que esté con mamá… no… con papá.”

Yeo Ya-hee dejó la bolsa en una esquina, se sacudió el polvo de la ropa y se dejó caer en el sofá.

Yu-ha la miró con ojos sospechosos, ya que no era lo que esperaba de ella.

“An Seong-yeon, ¿vio a Hee-yeon?”

“Sí. Por si acaso, Lee Ji-un la sedó para llevársela. Pero parece que An Seong-yeon la reconoció incluso en ese estado. Dice que la puso en su cama y estuvo mirando desde lejos.”

“¡Hah! ¿Qué hay con ese bastardo?”

Yeo Ya-hee se rió como preguntando “¿No es gracioso?”, y Kim Jung-ha soltó una risa vacía como si respondiera “Sí, es gracioso.”

Ahora que lo pensaba, parecía que el tiempo que habían pasado juntos no había sido en vano, ya que los dos parecían ser muy cercanos.

De repente, Yu-ha recordó la vez que había provocado a Yeo Ya-hee y se sintió avergonzado y arrepentido.

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Si no hubiera habido ese malentendido al principio, tal vez la situación sería mejor ahora.

No, incluso si iba a suceder de todos modos, tal vez no habrían terminado siendo perseguidos así.

Yu-ha sonrió con amargura mientras los miraba a los dos.

“¡De todos modos! ¿Aun así no confías en mí?”

“Sí, confío en ti. ¿Más que en el investigador Kim Jung-ha?”

“¡Qué, bastardo!”

“¿Verdad? Entonces, hagamos un trato. Esta hermana se encargará de todo.”

“Grrrrr…”

En el momento en que Yeo Ya-hee le sonrió a Yu-ha y le extendió su mano, un sonido de bestia reprimido salió de algún lugar.

Yu-ha miró a un lado y vio a Ess, con los ojos ya negros, gruñir como una advertencia.

Yeo Ya-hee, sorprendida, retiró la mano, se levantó de un salto y se escondió detrás del sofá, asomando solo los ojos.

“Ess, no hagas eso. Ellos nos están ayudando. Son nuestros salvadores. ¿Entendido?”

Yu-ha le advirtió a la bestia con voz clara para que los dos no dijeran nada más. Afortunadamente, Ess se calmó y Yeo Ya-hee asintió y se acercó lentamente.

No confiaba del todo en ella, pero en este momento, Yu-ha tenía que aceptar la ayuda de quien fuera.

“S-sí, Ess. Ahora somos un equipo. Así que sé bueno…”

“Grrrrrrr…”

“¡Ess!”

Yeo Ya-hee, que se había asustado y casi se levanta, se sentó de nuevo, confiando en Yu-ha, y se rió torpemente.

“Jaja… Ess no le gustan las hembras.”

“Oye, es obvio que es mayor que tú, Oppa. No le gusta que lo llames así, a un tipo que podría tener cientos de años.”

“Entonces lo llamaré Oppa o Hyungnim.”

Yu-ha miró a los dos que no paraban de discutir y consoló a Ess.

Sabía por qué se comportaba así. Si la bestia se había dado cuenta de que Kang Yeon-hu le había mordido el cuello, no era de extrañar que se hubiera dado cuenta de quién le había hecho la herida en la mejilla.

Tal vez había olido la loción en sus manos.

‘Qué nariz tan buena.’

“Entonces, ¿en qué te ayudamos? Los aviones y los barcos no son una opción. El pasaporte es un problema, pero los Espers enojados ya formaron un equipo para atrapar a Ess.”

“Haa…”

Yu-ha había decidido irse, pero ya estaba enfrentando dificultades. Moverse con Ess no iba a ser fácil.

Mientras todos pensaban en una solución, Ess agarró la mano de Yu-ha.

Yu-ha lo miró con curiosidad. La bestia acercó su cara, se cubrió la boca con la mano y le susurró al oído.

“¿Puedo… decirlo?”

“...Hah.”

Yu-ha se había preguntado por qué Ess no hablaba y se comportaba como una bestia, pero parecía que era por Yeo Ya-hee.

Yu-ha le besó la mejilla y le respondió con cariño.

“Sí, puedes hablar.”

“¡Oh, oh, oh! ¿De verdad?”

Yu-ha miró a la sorprendida Yeo Ya-hee, agarró la mano de Ess y lo presentó oficialmente.

“Es mi novio. ¿Ahora se aclara el malentendido?”

“Wow… es posible. Claro, con la apariencia de Ess…”

“¿Apariencia, qué?”

Kim Jung-ha interrumpió con voz irritada.

Pero Yeo Ya-hee, como si no le importara, miró a Ess con ojos diferentes.

Entonces, Ess dijo algo extraño.

“Un pájaro. Trae un pájaro grande.”

“¡Wow…! ¡De verdad habló! ¡Y su pronunciación es perfecta!”

“¡Oye! ¿No vas a reaccionar?”

“¿Usted también lo sabía, Oppa? ¿Cómo un monstruo… ah, lo siento. Es la costumbre… jaja…”

Kim Jung-ha le dio un codazo, y Yeo Ya-hee reaccionó, con una expresión de arrepentimiento.

Yu-ha había pensado que era una arrogante, pero ahora veía a una Yeo Ya-hee diferente.

Quizás se había comportado tan mal por los celos.

Claro, las personas pueden volverse así por los celos.

La hostilidad de Yu-ha hacia ella se derritió como la nieve, y él miró a Ess con una expresión de orgullo.

Ess, que siempre había sido guapo, parecía aún más guapo y fuerte hoy. Le encantaba que fuera suyo.

“Pero, ¿qué pájaro? ¿Acaso… vamos a ir en un pájaro?”

Ella misma se dio cuenta de que no tenía sentido, y sus ojos se movieron con ansiedad.

Yu-ha y Kim Jung-ha tampoco entendieron.

“Ess, ¿por qué un pájaro?”

Yu-ha, que se concentró en la situación, volvió a preguntar. Ess se quedó en silencio por un momento y luego le susurró al oído.

“El fluido, mi habilidad.”

“¡Ah!”

Con solo esas dos palabras, Yu-ha entendió lo que Ess quería decir, y su cara se iluminó.

De la emoción, abrazó a Ess y lo besó sin parar.

“¡Eres un genio! ¡De verdad que eres un genio!”

“Oh, oh, oh… wow…”

Yu-ha le mostró afecto a Ess a pesar de las exclamaciones constantes de Yeo Ya-hee.

Ess había tenido una idea tan brillante.

Yu-ha, que miró a Kim Jung-ha con una expresión de desaprobación, se rió y le dio una noticia que también lo haría feliz.

“Debería investigar la sangre de Ess. Tendrá resultados sorprendentes.”

“¿Qué?”

“Claro, tendrá que hacerlo después de que nos hayamos ido. Y los resultados, por supuesto, los compartirá, ¿verdad?”

“¿Qué quieres decir? ¿Cómo sabes que serán sorprendentes, si pides que los compartamos?”

“No se preocupe, es seguro. Y si hay algo más, dígamelo. Como algo sobre mi cuerpo, o el ADN especial de Ess.”

“Dime ahora. Parece que sabes algo.”

Kim Jung-ha, cuya curiosidad se había despertado, lo presionó, pero Yu-ha respondió con calma y se burló de él.

“No. Descúbralo usted mismo. Así veremos qué tan capaz es como investigador.”

“Este bastardo.”

“¡Maldito bastardo! No le hables así a Yu-ha.”

“¡Oh! ¡Jajajaja!”

Esta vez, la risa de Yeo Ya-hee llenó la casa.

El ambiente, que era diferente de cuando ella llegó, se volvió bastante amigable.

* * *

Después de todo el alboroto, el ambiente finalmente se puso serio.

Yu-ha miró fijamente a los dos que unían sus cabezas y luego se volvió hacia Ess, sonriéndole suavemente.

La bestia le devolvió la sonrisa con un suave “grrr.”

“Dejen de coquetear y concéntrense.”

Ante la voz baja de Kim Jung-ha, Yu-ha volvió a mirar hacia ellos.

“Entonces, llamaré a Thomas. Ustedes sigan hablando.”

Ella se dirigió a la cocina con su teléfono. Kim Jung-ha la miró de reojo y suspiró.

“¿Qué le pasa?”

“¿Eh? ¿A mí, qué?”

“Por qué se está portando así con la ‘hermana’, de todos los días.”

“¿Qué? ¿Hermana? ¡Hah! Mírenlo. Cuando querían matarse el uno al otro, era ‘hermana’?”

¡Toc! El sonido de una mano golpeando la mesa. Yu-ha se volvió y vio a Yeo Ya-hee con una expresión severa, pidiéndoles que se callaran.

Las voces de los dos volvieron a bajar.

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“Si tiene dinero, es Oppa o Hermana. ¿Hay algún problema?”

“Oye, ¿y yo? Yo también tengo mucho dinero.”

“Ah, cierto, Oppa.”

“¡Puf! Ah, este bastardo. Es un codicioso.”

“Cuando vives sin nada, te vuelves así.”

“…Ah, bastardo. No tomes mi broma tan en serio. Me haces sentir avergonzado.”

Kim Jung-ha, que había dicho eso sin pensar, de repente dejó de reír.

Miró al vacío por un momento, luego a Ess, y se aclaró la garganta.

Ess, que era rápido de reflejos, miró a Kim Jung-ha y sentó a Yu-ha en su regazo.

“¿Ess?”

“Siéntate aquí. Esto es duro. Te dolerá el trasero.”

“Hah, el sofá de cinco millones de wones es duro. Qué desastre.”

“Era duro. Me dolía mucho el trasero.”

Al verlos defenderse el uno al otro, parecían una pareja de cucarachas perfectamente combinada.

Kim Jung-ha negó con la cabeza al ver a los dos y volvió a concentrarse en el papel.

“Entonces, si traemos un pájaro, ¿podrán irse?”

“Sí.”

“Increíble. He vivido toda mi vida, y nunca pensé que vería a un monstruo… no, a una persona con habilidades, que se teletransporta en la vida real.”

Kim Jung-ha chasqueó la lengua de asombro, pero sus ojos estaban llenos de arrepentimiento por perder un material de investigación único en el mundo.

“¿Y si falla?”

“Ya vio. Cómo se movió Ess.”

“La distancia es diferente. En ese momento, se movió menos de una hora, pero esta vez, es cruzar el océano, un gran océano.”

“No te preocupes. Ya he estado en otros planetas.”

Kim Jung-ha y Yu-ha abrieron los ojos de par en par ante las palabras de Ess, que dijo un hecho increíble con tanta calma.

A diferencia de antes, Kim Jung-ha exclamó con genuino asombro.

“Wow… Jin Yu-ha, de verdad que atrapaste algo grande. ¡Hah!”

“¡Kyaa! ¡Sí! ¡Dice que nos lo enviará!”

Todos se volvieron hacia Yeo Ya-hee, que había interrumpido con una voz brillante.

“Dice que nos enviará una gran águila. ¡Y que está bien entrenada!”

Ella estaba tan feliz como si fuera su propio asunto. A Yu-ha le pareció extraño, pero sintió que su sonrisa era sincera y le dio las gracias en silencio.

“¿De verdad? Qué alivio. Buen trabajo.”

“Entonces, compre bebidas más tarde.”

Parecía que había reunido el valor para decirlo, pero Kim Jung-ha no respondió, y un silencio incómodo llenó el aire.

Para evitar que el ambiente se volviera incómodo, Yu-ha intervino.

“¡Cuñado! La hermana Yeo Ya-hee quiere que le compres bebidas.”

“¿Qué, qué? ¿Qué cuñado?”

“Oh, Dios… Así que Yu-ha es tan lindo. Si lo hubiera sabido antes, esta hermana te habría comprado ropa y muchas cosas deliciosas.”

“Sí, qué pena.”

“No te arrepientas. Te daré el dinero de todo lo que no pude comprar. Con eso, ve y vive una vida hermosa con Ess.”

“¡Wow! ¡Cuñado! ¿Está muy feliz de haber conocido a una mujer como la hermana Yeo Ya-hee?”

“Ya es suficiente.”

Kim Jung-ha, que interrumpió la actuación torpe de Yu-ha con frialdad, dejó caer el bolígrafo, sacó un cigarrillo y salió.

Yu-ha, que se sintió incómodo por su comportamiento frío, miró a Yeo Ya-hee, pero afortunadamente, su expresión no era mala.

En lugar de enojarse, ella se rió, recogió el bolígrafo y se concentró en el proyecto de emigración con una expresión seria.

“Si sumamos el tiempo de llegada y salida del pájaro, tomará un tiempo. ¿Verdad?”

“Sí.”

“Hmm. Entonces, tendremos que escondernos bien. ¡Ah! Pero, ¿qué pasa con esa niña?”

“¿Qué?”

“La niña de la guía An Seong-yeon. Aunque ahora no haya otra opción, no podemos dejarla con el guía An Seong-yeon, que todavía es inestable. Y si la encuentran, la desecharán.”

“¿Desecharla? Hee-yeon tiene forma humana, como Ess. Si crece, podrá mantener su forma humana.”

“Eso es lo que pensamos nosotros. Para la gente, esa niña es solo un monstruo. Un monstruo que se come a la gente.”

Yeo Ya-hee pareció disculparse por haberlo dicho con tanta frialdad y miró a Ess con una expresión de arrepentimiento.

¿Qué hacemos?

Habían encontrado otro obstáculo.

Ella se tocó el mentón pensativa y dijo con voz preocupada.

“Esa niña tampoco puede vivir en este país. El ambiente está muy mal. De hecho, la posición de Oppa también es peligrosa. Al fin y al cabo, sacó y cuidó a varios monstruos para investigarlos.”

Yu-ha miró a Ess, cuya expresión se había endurecido. Parecía que sabía que él era la causa de todo este problema, y su rostro no se veía bien.

Yu-ha le dio unas palmaditas en la espalda y sonrió como si dijera que todo estaría bien.

Entonces, Yeo Ya-hee sugirió algo con cuidado.

“En mi opinión, lo mejor es que tú te la lleves…”

Ella arrastró las palabras y miró a Ess de reojo.

Parecía que pensaba que a Ess no le gustaría la idea.

Yu-ha también miró a Ess y evaluó la situación con calma.

“A mí también me gustaría, pero me preocupa mi Senior Seong-yeon. Si puede reconocer a Hee-yeon, significa que está recuperándose… ¿Cómo puedo llevármela sin su permiso?”

“Solo pregúntale al guía An Seong-yeon.”

“Pero para eso, tendría que ser capaz de hablar con él.”

“Aun así, si le queda algún instinto maternal o paternal, expresará algo sobre el asunto de su hija.”

Yeo Ya-hee se tocó el mentón por un momento y luego dejó caer el bolígrafo con una expresión de determinación.

“¿Qué?”

“Prepararé un lugar para que te encuentres con él en persona. Explícale la situación y dile que te la llevarás. Si no entiende, no tendremos más remedio que llevárnosla. En este momento, esa es la única forma de salvar a la niña. Incluso si el guía An Seong-yeon dice que no, tendremos que llevárnosla. Pero honestamente, me preocupa Ess más que la guía An Seong-yeon.”

Cuando los dos lo miraron, Ess ladeó la cabeza.

“…Ess.”

Al ver la expresión de incomodidad de Yu-ha, la bestia pensó por un momento, mirando al vacío, y luego hizo una pregunta inesperada.

“¿El cachorro de Yu-ha?”

“¿Eh? Ah… no. No es mi cachorro, sino el cachorro de un Senior al que quiero mucho.”

“¿El cachorro de mi especie?”

“¿Eh? Uh…”

Ess se detuvo a pensar.

De repente, algo apareció frente a él.

“Ese hombre es el padre de Hee-yeon. Y la niña a su lado es Hee-yeon.”

Kim Jung-ha, que no se sabía cuándo había entrado, puso una foto frente a Ess. Era la foto que Yu-ha le había pedido.

Yu-ha se acercó a Ess y miró la foto.

Él también era la primera vez que la veía.

Se veía a An Seong-yeon con una expresión inexpresiva, pegado a la niña que estaba acostada.

Era sorprendente que hubiera tomado una foto con una expresión tan inexpresiva. Parecía que An Seong-yeon no tenía ninguna emoción.

Aun así, Yu-ha se alegró de que se hubiera tomado la foto y agregó una explicación, esperando que Ess viera que se parecían.

“Este Senior es un Senior que me trató muy bien. Y esta es Hee-yeon. Cuando conocí a Ess, este Senior también estaba con el padre de Hee-yeon… bueno, de todos modos, estaba embarazada de Hee-yeon.”

Por alguna razón, la expresión de Ess se volvió oscura.

Los tres se miraron, mirando a Ess.

“Ess… ¿Qué te parece, llevar también a Hee-yeon? Si no la llevamos, Hee-yeon podría morir. Por eso, de verdad que quiero llevármela…”

“Sí.”

“¿Eh?”

“Si Yu-ha quiere, hazlo. Si muere, Yu-ha llorará. Así que tráela.”

“Oh, Dios… Ess, de verdad que eres inteligente. ¿Y por qué hablas con tanta amabilidad?”

“¿Qué está diciendo?”

A pesar de la burla de Kim Jung-ha, Yeo Ya-hee juntó las manos y miró a Ess con ojos afectuosos.

Sin embargo, el más conmovido en ese momento fue Yu-ha. Estaba tan emocionado que sus ojos se llenaron de lágrimas y abrazó a Ess.

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“¡Gracias, Ess!”

“Pero tienes que dormir conmigo.”

“¡Claro!”

Cuando Ess abrazó a Yu-ha, que estaba tan feliz que no sabía qué hacer, Yeo Ya-hee exclamó de nuevo.

“Wow… incluso celos en un momento como este. Es tan romántico…”

“Oye, ¿qué te pasa hoy?”

“¿A mí, qué?”

“No eres así.”

“Soy así. Fuiste tú quien me hizo tan desagradable, ¿verdad?”

“Solo usa un nombre para mí.”

Yeo Ya-hee miró al hombre que se quejaba de cosas innecesarias y miró a Ess con ojos brillantes.

Con esto, todos los planes estaban listos.

De ahora en adelante, solo tenían que asegurarse de que Ess actuara como un humano y que Hee-yeon estuviera a salvo.

Los tres, con una expresión seria, se miraron y asintieron.

“Cuando haya una oportunidad, te llamaré para que te encuentres con An Seong-yeon. Te esperaré en la parte de atrás del hospital, así que Yu-ha, cúbrete lo más que puedas.”

“Te llevaré, así que llámame a mí primero. Pero Ess, ¿puedes estar solo?”

Ante la pregunta de Kim Jung-ha, Ess miró a su alrededor y luego a un lugar en particular.

“¿Tienes TV?”

“¡Kk! Sí, tienes. También puedes ver películas, así que mira todo lo que quieras.”

Kim Jung-ha se aguantó la risa y respondió.

Durante el tiempo que los había observado, lo único que recordaba era a los dos adictos al sexo que estaban pegados todo el tiempo, o al desempleado que estaba absorto en la televisión.

Era sorprendente, pero a la vez un alivio, que al monstruo le gustara la televisión.

Porque eso significaba que Yu-ha podría moverse libremente.

“¿Cuándo viene el pájaro?”

“En una semana. Dijo que lo enviaría hoy, así que si no hay problemas, llegará en ese tiempo.”

“Sí.”

“Vamos. Ustedes también descansen.”

Cuando la conversación entre Yeo Ya-hee y Yu-ha terminó, Kim Jung-ha se frotó la cara cansada y se levantó. Ella lo siguió y lo miró de reojo.

Yu-ha se levantó para despedirlos y se inclinó educadamente.

“Muchas gracias a los dos. ¿Cómo puedo pagarles esta deuda…?”

“Ya basta, idiota. No seas tan formal.”

Kim Jung-ha cortó la despedida de Yu-ha y murmuró mirando al vacío.

En ese momento, Yeo Ya-hee intervino y dijo algo fuera de lugar.

“No sabía que eras tan bueno. Me engañó ese bastardo de Kang Yeon-hu. Me llamaba y me decía que tú y Oppa tenían algo, que se habían acostado, ¿cómo no me iba a enojar? Ese bastardo tiene talento para engañar a la gente. Es un malvado.”

Ella murmuró como si lo estuviera probando, y miró a Kim Jung-ha. En un instante, el ambiente se congeló.

Yeo Ya-hee, que sintió que algo andaba mal, giró los ojos y se volvió hacia Yu-ha, y luego hacia Ess.

“¡N-no, no es cierto! ¡Kang Yeon-hu mintió… ugh!”

“¡Ess!”

“¡Oh, oh! ¡Kyaak!”

Algo se rasgó con un sonido de “tududuk” antes de que Yu-ha pudiera detenerlo, y una gruesa cola salió volando por la parte trasera de los pantalones de Ess.

La cola era tan gruesa que no solo la parte trasera se rasgó, sino que toda la tela se hizo pedazos.

Debido a eso, los pantalones de Ess, que ya no servían, cayeron a sus tobillos, y lo enorme se hizo visible.

De repente, todo se volvió un caos.

Kim Jung-ha se escondió detrás del sofá y se tumbó, gritando que no era cierto. Yeo Ya-hee se tapó la cara y gritó, mirando fijamente la parte inferior del cuerpo de Ess.

Yu-ha trató de detener a Ess y al mismo tiempo, cubrió su parte inferior con todo su cuerpo para bloquear la vista de Yeo Ya-hee.

“¡No es cierto! ¡Ess! ¡Cúbrete ya!”

Fue una verdadera carnicería.

Después de todo el alboroto, Kim Jung-ha se fue enojado, diciendo que iba a beber, y el culpable de todo esto lo siguió, sonriendo como si estuviera feliz.

Finalmente, la casa se quedó en silencio.

Ya era de noche, y la oscuridad se había asentado en el jardín.

Cuando se quedaron solos, Ess abrazó a Yu-ha de forma natural.

Fuera por un malentendido o no, era sorprendente que la bestia, que era tan celosa como para atacar a Kim Jung-ha por lo que dijo, fuera tan incondicional con él.

Quizás por eso le gustaba tanto Ess.

Era la primera vez en su vida que recibía un amor tan infinito.

La luna parecía inusualmente brillante esa noche.

Yu-ha, que había estado admirando la luna redonda, abrazó a Ess por el cuello.

De repente, recordó lo que Yeo Ya-hee había dicho antes de irse y soltó una risa vacía. Luego miró a Ess.

Los ojos de la bestia se sintieron atraídos por él como un imán.

Yu-ha lo miró por un momento, le acarició la mejilla y susurró.

“Ess, ¿nos casamos cuando lleguemos allí?”

´Parecía que Ess entendía el significado de ‘casarse’, y sus ojos amarillos temblaron ligeramente.´

Yu-ha abrió los ojos de par en par ante su reacción desconocida, pero en lugar de una respuesta, los labios de la bestia se acercaron. Yu-ha abrió la boca de forma natural y tomó el beso de Ess como un sí.

Era la noche más emocionante y romántica de todas.