Capítulo 3

 

Capítulo 3

 

Hyeon-oh había estado observando en silencio a Yoon-seul, quien le había estado tratando de manera distante durante varios días. No, 'observando' no era la palabra correcta; más bien, estaba esperando el momento oportuno.

Ahora, Kim Yoon-seul estaba evitando intencionalmente la mirada de Seo Hyeon-oh. ¿O solo era la mirada? Estaba evitando a Seo Hyeon-oh en sí mismo de manera intencional.

Esa madrugada, Yoon-seul, que había estado durmiendo profundamente en los brazos de Hyeon-oh, se escabulló sigilosamente de la cama. Cuando Hyeon-oh notó que el calor del cuerpo de Yoon-seul que llenaba sus brazos había desaparecido y abrió los ojos, Yoon-seul ya había salido de la habitación conteniendo la respiración.

Solo después de oír el sonido de la puerta cerrándose, Hyeon-oh se levantó de la cama. A través de la rendija de las cortinas, una luz azulada del amanecer se filtraba. Aún no había amanecido, y Yoon-seul ya había regresado a su propia habitación.

Hyeon-oh se recostó contra el cabecero de la cama. Golpeando ligeramente su cabeza contra la pared, intentaba aliviar su inquietud, cuando un sonido tenue provenía de la habitación de Yeon-seul.

¡Ahhh!

Al parecer, Kim Yoon-seul había intentado mantener el volumen lo más bajo posible, pero Hyeon-oh lo había escuchado. Hyeon-oh identificó rápidamente la naturaleza de ese sonido; parecía una autocrítica por lo que había hecho.

"Ah... ¿Está arrepentido?".

Hyeon-oh presionó sus párpados con fuerza. Una amargura lo invadió. Yoon-seul parecía estar arrepintiéndose de esa noche con él.

Bueno, ese pequeño ser se había lanzado sin pensarlo. Parecía impulsivo, y probablemente influenciado por el alcohol.

Su mente se llenó de preocupaciones sobre cómo enfrentar esa cara en el futuro, cómo actuar. Los problemas que había ignorado mientras se entregaba al cuerpo de Kim Yoon-seul ahora se acumulaban, oprimiendo su corazón.

¿Había lamentado lo suficiente el tiempo con Eun-sung que había terminado? ¿Había eliminado por completo los sedimentos en su corazón nacidos de ese amor muerto?

Se hacía esas preguntas una y otra vez. Eran preguntas que se había hecho antes de conocer a Yoon-seul.

De repente, Hyeon-oh se dio cuenta de que el tamaño de su nostalgia y su sentido de pérdida que lo atormentaban había disminuido. También la confusión y la presión que lo consumían. Las intensas noches de insomnio y dolores ardientes que lo atenazaban.

"Vaya, se ha aliviado...".

¿Es por Kim Yoon-seul? ¿Puede afirmar con certeza que Kim Yoon-seul es lo que hizo desaparecer su tormento?

"Seo Hyeon-oh, ¿en serio? ¿En serio es por Kim Yoon-seul?".

Hyeon-oh masticó el interior de su mejilla mientras reflexionaba. Su mente se volvió a complicar. Surgió una nueva preocupación. Su corazón comenzó a bullir.

No se arrepiente de la noche con Yoon-seul. Incluso si fue llevado por el momento, incluso si sucumbió al deseo, no hay arrepentimiento.

Solo le molesta la reacción de Kim Yoon-seul.

"Mierda. No estaba borracho. Ah...".

¿Por qué Yoon-seul reacciona así? ¿Por un juego de una noche impulsado por el alcohol? ¿Por haberse acostado con el hijo de la mejor amiga de su madre? ¿O porque lo presiono demasiado? ¿Por tocarlo a pesar de que dijo que no? ¿Eso fue demasiado pervertido? ¿O tal vez,

¿Yo fui demasiado malo?

"¡Hey, idiota! ¿Qué clase de tonterías estás pensando...? ¿Eres un niño?".

A medida que las preocupaciones se ramificaban, surgían incluso preocupaciones innecesarias.

¿Tendré que regresar a Seúl y enfrentar ese infierno otra vez?

Un largo suspiro escapó de sus labios. Sabía muy bien que no podía quedarse en esta casa para siempre. Pero, en esta situación, no quería regresar a Seúl. Sería otra forma de evadir, y como vino aquí huyendo, no queria evadir de nuevo.

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Además, si regresaba a Seúl así, sentia que nunca más veria a Kim Yoon-seul.

"Ah, qué... sentimiento es este".

Se sentía ahogado por la reacción de Yoon-seul.

¿Es correcto que yo esté aquí? ¿O debí haberlo alejado completamente?

Kim Yoon-seul, quiero seguir viéndote.

“... ¡Mierda!".

Hyeon-oh se tapó la boca.

Debido a su mente confusa, le resultaba difícil tomar decisiones y definir claramente sus sentimientos.

El que escapó a este lugar porque la vida en Seúl lo agotaba, porque temía las miradas de la gente. El que vive aquí sin ningún plan, sin saber cuándo regresar a Seúl o cuándo volver al mundo del cine.

¿Es aceptable que me deje arrastrar por Kim Yoon-seul sin precauciones?

"Dspierta, Seo Hyeon-oh".

Hyeon-oh trató de aferrarse a las sensaciones de Yoon-seul que aún permanecían en sus manos. Intentó retener el toque débil y el calor sutil. Exploró varias partes de su propio cuerpo. Las marcas rojas que Yoon-seul había dejado en su pecho. La voz que lo llamaba ansiosamente y el pequeño cuerpo que se enredaba en sus brazos. El toque suave de Yoon-seul se adhería a varias partes de su cuerpo, Seo Hyeon-oh.

Era como si las emociones de cuando tenía diecisiete años hubiesen regresado ahora.

"Ah... qué locura. No soy un niño de diecisiete años. Qué es esto...".

Por eso era aún más confuso y complicado.

***

A partir de ese día, Hyeon-oh observó en silencio a Yoon-seul. No se acercó ni le habló a propósito, solo la observaba en silencio.

Hyeon-oh se sentó con la cabeza contra la pared del porche, extendiendo las piernas, y observaba. Si parecía que sus miradas iban a encontrarse, rápidamente miraba hacia otro lado.

‘Ah, qué ridiculez... Seo Hyeon-oh, ¿qué estás haciendo?’.

El resultado de que Hyeon-oh observara a Yoon-seul durante varios días fue este:

Yoon-seul cojeaba durante varios días. Parecía que era por las secuelas de esa noche y no podía caminar bien. Como Hyeon-oh la había penetrado intensamente, parecía que le dolía por debajo, ya que se sentaba en una silla para trabajar y luego se levantaba rápidamente, moviéndose inquieto. A veces, incluso se tendía en el suelo porque le costaba sentarse en la silla. Golpearse la cintura y quejarse de la rigidez era algo adicional.

‘¿Fue su primera vez...?’.

Mientras observaba en secreto el comportamiento de Yoon-seul, Hyeon-oh consideró innumerables posibilidades.

‘¿Su primera vez y lo hizo tan bien?’.

Ciertamente, la felación y las caricias de Yoon-seul eran bastante hábiles. Lo suficiente como para complacer a Seo Hyeon-oh, que no solía preferir eso. Parecía que tenía experiencia en eso. O tal vez era nato para ello.

‘No, mierda. Entonces, ¿por qué eso?’.

Kim Yoon-seul parecía no estar acostumbrado a recibir por detrás. Tanto cuando jugueteaba entre sus nalgas como cuando lo preparaba con la mano, parecía particularmente difícil. También se avergonzaba mucho. Incluso tocar su pecho parecía incómodo. ¿Era del tipo que prefería dar caricias? Esa noche, Kim Yoon-seul había tocado mucho el cuerpo de Seo Hyeon-oh, incluso intentando tocar partes profundas justo antes de la penetración.

¿Quizá era del tipo que rechaza el sexo penetrante? Hay personas que lo encuentran abrumador. Después de todo, es algo que pone a prueba el cuerpo. ¿O tal vez había pasado mucho tiempo sin sexo y por eso estaba incómodo? Solo mencionó que había tenido varias relaciones cortas, pero no dijo cuándo fue la última. Entonces, ¿fue porque hacía mucho tiempo que le resultó difícil?

Al recopilar posibilidades, Hyeon-oh comenzó a preocuparse gradualmente de que Yoon-seul hubiera sufrido por sus movimientos rudos.

"Ah, mierda. Niño tonta. Deberías haberlo dicho... ¿Qué pasa si lo aceptas todo en silencio?".

Debió haber dolido, ¿verdad? Viendo que no podía caminar bien. ¿Lo presioné demasiado? Si hacía mucho que no tenía penetración, deberías haberlo dicho.

‘Yo, casi después de 6 años... No pude controlarme. Ah... ¿Te dolió?’.

¿Te asusté? Lo presioné bastante rápido. Dije muchas palabras sucias también. ¿Te avergonzó que te limpiara después?

Hyeon-oh había sacado personalmente el semen que quedaba dentro de Yoon-seul mientras dormía y luego lo había limpiado con agua tibia. Si alguien no está acostumbrado o lo rechaza, eso podría haber sido aún más embarazoso y humillante.

‘No. Entonces, ¿por qué pediste tener sexo? ¿Y fuiste tú el que lo inició?’.

Al final, el pensamiento al que llegó fue ese. Después de enumerar preocupaciones y calcular varias posibilidades absurdas incluso para él, la pregunta que siempre regresaba era.

‘¿Por qué pediste tener sexo?’.

Una vez que ese pensamiento surgía, sentía que su pecho explotaría.

‘Ah, mierda. ¿Pasas todo el día con estas tonterías? ¿Cuántos días han pasado, Seo Hyeon-oh? ¿Eres un niño?’.

Hasta esa tarde, Seo Hyeon-oh no esperaba que su relación con Kim Yoon-seul se convirtiera en su mayor preocupación. Tampoco esperaba preocuparse por una relación tan ambigua después del sexo.

‘No, pero. Kim Yoon-seul no es un niño de veinte años. ¿Qué pasa con ignorarme después de disfrutar? ¿Me usó y se fue? Qué desvergonzado’.

Apretó los dientes, pero no obtuvo respuestas. Porque cada vez que Yoon-seul lo veía, se convertía en un cachorro asustado que temblaba y se metía en su habitación.

Durante una semana, Yoon-seul no pudo mirar directamente a Hyeon-oh. Si sus miradas se encontraban por accidente, su rostro se ponía rojo y rápidamente giraba la cabeza.

Sin embargo, no parecía evitar estar en el mismo espacio que Hyeon-oh.

Kim Yoon-seul se escondía en su habitación, y cuando Hyeon-oh salía al salón o al patio, Hyeon-oh también salía sigilosamente, pero se mantenía a una distancia.

Yoon-seul lo observaba de reojo por un rato y, cuando sus ojos se encontraban, rápidamente apartaba la mirada. Su comportamiento era muy antinatural. Era frustrante.

Seo Hyeon-oh tachó la línea de pensamiento de que 'Kim Yoon-seul debería ser el que actúe'.

‘¡Ja! No es gracioso. Actuar, mis narices’.

Incluso durante las comidas, no era una excepción. Se sentaba frente a Hyeon-oh, pero mantenía la cabeza baja y comía sin decir una palabra. Era frustrante.

Mirando a Yoon-seul, Hyeon-oh pensó:

'¡Mierda! Sé que tu coronilla es linda. ¡Levanta la cabeza y muéstrame esa cara linda!'.

Cuando descubría que anhelaba ver la cara de Kim Yoon-seul, Seo Hyeon-oh se maldecía a sí mismo una vez más.

Perro, loco, basura, mierda.

La paciencia de Hyeon-oh estaba llegando a su límite. No solo evitaba su mirada, que ya era frustrante, sino que Yoon-seul se sobresaltaba incluso si sus dedos se rozaban. Un día, cuando le quitó el estropajo y el plato de las manos mientras lavaba los platos, él gritó '¡Wak!' de sorpresa.

"¡Ah! ¡Hey, yo, ...eh?".

Sin siquiera lavarse la espuma de las manos, Kim Yoon-seul huyó a su habitación. Seo Hyeon-oh no lo persiguió. Solo miró su espalda con una expresión atónita. Se preguntaba cuánto impacto debía haber sufrido para actuar así. Luego, esos pensamientos absurdos volvían a surgir y agitaban su mente.

¿Fue realmente su primera vez? ¿Por eso le da tanta vergüenza verme? ¿Lo presioné demasiado? ¿Por eso le dolió? ¿Disfrutó una noche y ahora me encuentra ridículo? ¿Quiere que me vaya? ¿Ya sacó todo el jugo?

... ¿Realmente fui tan malo? ¿El sexo fue tan malo?

"¡Ah! ¡Mierda!".

Durante aproximadamente una semana, Kim Yoon-seul fue excepcionalmente torpe con Seo Hyeon-oh y actuaba de manera muy incómoda. ¿Cuándo fue que se lanzó tan audazmente pidiendo sexo? Dijo 'no te contengas, hyung', pero al despertar, su actitud cambió drásticamente. Si se mostrara abiertamente molesto o disgustado, podría empacar e irse, pero Kim Yoon-seul actuaba de una manera que no podía distinguir si era timidez o rechazo.

Aunque quería agarrarlo y hablar, Seo Hyeon-oh decidió ser un poco más paciente y observarlo con una mente más amplia.

Por ahora, eso era lo que decidió.

***

Yoon-seul sabía muy bien las miradas llenas de insatisfacción de Hyeon-oh hacia él. Y también sabía de sus propias miradas desprotegidas que no podían dejar de espiarlo. Sin embargo, cada vez que Hyeon-oh aparecía, terminaba evitándolo, y cada vez que se encontraban, actuaba de manera incómoda. No era intencional.

Después de esa noche, cada vez que sus miradas se encontraban, sentía que temblaría hasta morir. Hyeon-oh le gustaba más que antes de que eso ocurriera. Pero, extrañamente, terminaba evitándolo. Yoon-seul se consideraba una idiota por eso.

¿Mi emoción fue solo un sentimiento pasajero? ¿Algo que surgió porque estábamos solos en este espacio? Como una llama que se avivó con el sexo añadido, algo así.

¿Seo Hyeon-oh no siente más que un sentimiento pasajero por mí?

‘¿Por qué te acostaste conmigo? ¿Solo porque te lancé? ¿Te dejaste llevar? No... Kim Yoon-seul, idiota. Le preguntaste a Seo Hyeon-oh si no se arrepentiría, y le dijiste que no dudara. ¿Qué? No te contengas, hyung? ¿Estás loco?’.

Quería organizar estos pensamientos complejos, pero estar en el mismo espacio que Hyeon-oh lo hacía difícil.

Debería resolver estos pensamientos complejos dibujando, o leyendo en silencio, o escuchando música, pero dondequiera que mirara en la casa, Hyeon-oh estaba allí. Así que no podía organizar sus pensamientos.

Cada vez que se encontraba con Seo Hyeon-oh, era como si el agua diluyera los colores, y sus pensamientos se desordenaban.

Siempre estában naturalmente juntos. Compartian todo el tiempo y el espacio del verano de junio. Seo Hyeon-oh, que se había infiltrado en su territorio, le hacía sentir tan feliz.

No sabía por qué lo estaba evitando.

Todo en esta casa estaba conectado con Seo Hyeon-oh. Dondequiera que estuviera, la mirada y el aliento de Hyeon-oh lo alcanzaban. Así que no tuvo más remedio que esconderse en su habitación. La habitación de Yoon-seul era el único espacio donde Hyeon-oh no entraba.

Se acurruco en la cama de su habitación e intento pensar, pero no pudo llegar a una conclusión.

Sin embargo, cuando oía el sonido de Hyeon-oh saliendo al porche o paseando por el patio, inevitablemente se encontraba a mí misma yendo a buscar sus huellas.

"Ah, en serio. Kim Yun-seul, ¿estás loca?"

Si tuviera que resumir en una palabra los sentimientos cuando se durmío en los brazos de Hyeon-oh esa noche,

Fue bueno.

El calor de Hyeon-oh que envolvía su espalda, la sensación de sus pectorales y abdomen definidos grabándose en su espalda, todo fue bueno. Sus acciones inconscientes de envolver suavemente su cintura y acariciar su mano fueron placenteras.

Cada vez que sus ojos pesados por la fatiga se abrían ligeramente, su corazón se llenaba con las acciones de Hyeon-oh que veía frente a él y el calor que sentía detrás.

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Al amanecer, cuando desperto con una sensación de que su interior se hundía y un dolor en la cintura, de repente lo invadió una emoción desconocida. Lo primero que penso al ver su mano agarrada por su gran y ancha mano fue,

'¿Le hacía esto siempre a Ryu Eun-sung?'

Después de que el sexo terminara, ¿lo abrazaría de esa manera, acunándolo y consolándolo con una tierna poscoital? ¿Lo abrazaría como lo hace conmigo, besándome y ayudándome a dormir? ¿Se quedaría a mi lado, abrazándome cálidamente? ¿Me tocaría inconscientemente de esta forma? Como ahora, con su parte inferior pegada a mis nalgas, entrelazando sus muslos firmes con mis piernas para que no pueda ir a ninguna parte.

De repente, una oleada de tristeza lo invadió. No sabía por qué surgían estos pensamientos ni por qué le traían esta melancolía.

Yoon-seul intentó salir con esfuerzo de los brazos de Hyeon-oh y regresar a su propia habitación. Mientras caminaba esa corta distancia de vuelta a su cuarto, se tambaleó varias veces. No tenía fuerza en la parte inferior de la cintura. La zona de la cintura y abajo dolía mucho, y en las piernas no sentía nada.

Al entrar en la habitación, cerró la puerta con llave y tocó su parte inferior, que estaba caliente y dolorida. La entrada de su agujero estaba hinchada y febril. Al tocarla, se sentía limpia. No se sentía nada de lo que Hyeon-oh había dejado. Probablemente, mientras yo dormía, él había limpiado todo.

De repente, le vino un bajón.

"¡Ahhh!".

 

Después de despertar del sexo, la segunda emoción que sintio fue vergüenza.

"¿En serio? ¿Estás loco? ¿Kim Yoon-seul estás loco?".

Aunque estaba un poco ebrio, no lo suficiente como para perder el juicio. Claramente, vio el rostro de Hyeon-oh con nitidez, y las palabras que salieron de su boca no estaban desordenadas.

¿Fue el ambiente lo que me embriagó? ¿El viento fresco de la noche de verano y la música?

O quizás, ¿fue el mismo Hyeon-oh lo que me hizo perder la cabeza.

Además, fui yo, Kim Yoon-seul, el que inició el beso. Le dije descaradamente que quería acostarme con él. Le rogué que lo hiciéramos ahora mismo, que lo hiciéramos rápido. Hice todo el preámbulo y el acto como siempre lo hago. Sin embargo, terminé completamente rendido ante Hyeon-oh.

Por sus labios, sus caricias y sus movimientos rudos.

Penso que no sería fácil dominar a un hombre con más de 190 cm de altura y músculos esculpidos. Lo penso, pero...

Hyeon-oh lo devoró por completo. Fue arrastrado por él sin tener oportunidad de resistirse.

Perdío su virginidad, su primera vez, su agujero fue penetrado. El impacto fue considerable.

"Ah, me estoy volviendo loco. Ah... ¿Cómo voy a mirar a la cara de Hyeon-oh ahora?".

Yoon-seul se agarró la cabeza.

Fui yo, el que propuso el sexo primero. Eso está bien. ¿Acaso no he sido yo el que lo propone antes? Solo que no me lanzo tan descaradamente. Rogarle que lo hiciéramos rápido, provocarlo para que no se contuviera. Ah, eso sí que es un golpe.

Rara vez he sido yo el que se desespera y suplica a mi pareja. Generalmente, es el otro el que se aferra y suplica por mí. Si yo digo casualmente que quiero sexo, después es el otro el que se aferra y suplica. Siempre ha sido así, como un patrón fijo.

De hecho, el número de veces que he propuesto sexo yo mismp se puede contar con los dedos de una mano. Así que, no sabía que podía suplicar tan desesperadamente. Además, en mi vida sexual, nunca he sido el que está abajo. Incluso si mi pareja es un poco más grande, siempre soy yo el que los pone debajo y los penetro.

Esto es lo que más me impacta. Ha confundido mi posición sexual habitual.

El problema más grande es...

Que el sexo con Hyeon-oh no se me olvida. Sentí sensaciones que nunca había experimentado antes. Fue aterradoramente intenso, hasta el punto de que me hacían llorar.

Fue increíblemente placentero.

No sabía que de mi boca saldrían sonidos tan instintivos. Eran sonidos estimulantes, incluso para mí. Además, parecía que a Hyeon-oh le encantaban mis gemidos. Nunca pensé que gemiría de esa forma mientras recibo el pene de alguien.

Por eso, no puedo mirarlo a la cara.

Me da vergüenza, me avergüenza, y me avergüenza más. Siento que me voy a morir. Pero cuando pienso en Hyeon-oh, siento que mi corazón va a estallar. Mientras mi rostro se sonroja pensando en él, surgen celos hacia Ryu Eun-sung que me atormentan.

Aunque nunca lo he conocido en persona, solo lo he visto en videos unas cuantas veces. Aunque no está con Hyeon-oh ahora...

No sé por qué siento celos de esa persona.

‘¿Qué pasa...? ¿Qué tiene él? ¿Por qué hace sufrir a Hyeon-oh...? No, ¿por qué Hyeon-oh todavía sufre?’.

Kim Yun-sl se sentaba en la cama todos los días, repitiendo estos pensamientos inútiles.

***

Cuando Yoon-seul finalmente logró mirarlo a los ojos, volvió a su habitación y se escondió. Apenas cruzaron miradas, pero el expresión de Hyeon-oh, que parecía tener mucho que decir, le dio miedo.

Si Hyeon-oh preguntara por qué lo evitó, no tenía una excusa preparada.

‘¿Qué le digo? ¿Que es porque fue mi primera vez por detrás? ¿Que me da vergüenza extrema haber suplicado por sexo primero? ¿Que me avergüenza haber gemido de esa forma? ¿Que cada vez que veo a Hyeon-oh, siento que mi corazón va a explotar? Ah, mierda. Realmente... Kim Yoon-seul, eres un idiota’.

Afortunadamente, Hyeon-oh respetó el espacio único de Yoon-seul. No lo molestaba cuando estaba en su habitación.

En la cocina y el patio, Hyeon-oh le lanzaba miradas intensas. Se veía como si estuviera debatiendo si hablarle o no. Especialmente en la cocina, cuando le quitaba los platos de las manos y lo miraba fijamente. Sin embargo, en la sala y el estudio, se sentaba a una distancia, leyendo en silencio o viendo películas.

No le dirigía miradas ni intentaba hablar.

Se notaba que Hyeon-oh también estaba muy preocupado por Yoon-seul. Su frustración por la actitud de Yoon-seul era obvia. Aun así, Hyeon-oh lo estaba considerando. Parecía decidido a esperar hasta que Yoon-seul hablara primero y compartiera sus sentimientos.

En los círculos de la industria, se dice en secreto que el carácter de Hyeon-oh es bastante áspero. Sin embargo, el Hyeon-oh que ha experimentado siempre le da todo. Aunque parece gruñón y difícil, se nota que piensa en Yoon-seul.

Incluso cuando éramos niños, era así.

Con sus primos mayores, la diferencia de edad era grande, así que les molestaba jugar con él. Pero Hyeon-oh, que no era ni el nieto de esta casa, lo abrazaba y llo llevaba en hombros. Se sentía tan bien que, cuando Hyeon-oh iba con su abuela, lo seguía con pasos torpes e inmaduros.

Ese recuerdo es tan agradable que, cuando supo que Hyeon-oh debutó, compro el álbum de su fallido grupo de ídolos y vio todos los videos.

Yoon-seul suspiró profundamente y se recostó en la cama.

Lo evite por una semana. No puedo evitar a Hyeon-oh para siempre. Vino a esta casa para estar cómodo, no para hacer que se sienta incómodo por mis emociones infantiles.

"Ah... ¿Por qué soy así? Kim Yoon-seul".

De repente, le vino a la mente la expresión de Hyeon-oh mientras lo penetraba vigorosamente.

Sus ojos perezosos y entreabiertos, sus labios ligeramente separados. Su lengua lamiendo sus labios como si saboreara algo dulce. Sus labios hinchados por la sangre. Sus órbitas ocularas con sombras que lo hacían atractivo. Su flequillo cayendo y meciéndose. Sus hombros y pecho firmes y voluminosos. Y, eso...

"Ah, estoy loco de verdad".

Al recordar ese día, le invadió una vergüenza insoportable. Pero hoy, por alguna razón, lo primero que le vino fueron la expresión de Hyeon-oh y las sensaciones que provocaron sus movimientos.

Yoon-seul sintió un calor sordo en su abdomen inferior. Al pensar en esa noche, su respiración se volvió un poco más agitada. Se recostó contra la almohada gruesa y suave en la cabecera de la cama. Luego, con la yema de los dedos, acarició suavemente la zona plana entre su pelvis y la base de su órgano sexual.

"Ah..."

Recordó cómo Hyeon-oh había dejado marcas de succión persistentes en su abdomen y ombligo. El calor de sus labios y lengua también.

"Ah... ¿Qué estoy haciendo...?".

Aunque sus palabras se quejaban, su mano, en contra de su voluntad, rozó su abdomen y costado, subiendo hasta el pecho. Con la yema de los dedos, rodeo cuidadosamente su pezón, que estaba un poco hundido de un lado. Sintio una sensación extraña. Nunca en su vida había tocado su pecho de esta manera.

"Uhm... Mm...".

Cuando Hyeon-oh lo tocaba, sentía un hormigueo agudo y un picor extraño que lo hacía temblar, pero al tocarlo Yoon-seul, era un poco diferente. Se sentía como si estuviera a punto de sentir algo, pero no era lo mismo.

Yoon-seul recordó la dirección y la sensación de cómo Hyeon-oh lo había tocado. Con la yema de los dedos, lo pellizco y presiono firmemente. Intento recordar la fuerza y el movimiento de la mano de Hyeon-oh. Y recordo cómo lo miraba mientras chupaba su pezón, con sus ojos azul marino llenos de deseo.

Fue como si algo pequeño y caliente se clavara en su pecho. Se sintio revuelto por dentro.

"Haah...".

De repente, su pezón, que estaba plano, se endureció y se levantó. Estaba bastante firme y tieso. Alrededor del pezón, se formaron pequeños bultos en la piel. Yoon-seul rodó suavemente el pezón erecto con dos dedos, luego se metió los dos dedos en la boca. Como si estuviera chupando el pene de Hyeon-oh, los mojo con su lengua. Una vez que estaban lo suficientemente húmedos, saco los dedos de su boca, y un hilo plateado fino se rompió al separarlos.

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Con los dedos húmedos, comenzo a jugar con su pecho.

"Mm... Ah....

Era su primera vez masturbándose con el pecho de esta forma.

En su vida sexual habitual, el juego en el pecho era algo que él les hacía a los otros. Sí, ha recibido estimulación en el pecho antes, pero solo como un preliminar ligero antes del sexo. Tanto dar como recibir era así.

Recibir un preliminar tan persistente fue la primera vez para Yoon-seul. Hyeon-oh fue el único que le dedicó tanto tiempo a su pecho de esa manera tan intensa.

Ese día, Hyeon-oh no soltó su pecho, chupándolo como si fuera un dulce. Aunque intento rechazarlo porque era una sensación nueva y aterradora, él se aferró como si estuviera degustando un caramelo.

Al pensar en Hyeon-oh, sintio otra punzada en el pecho. Un calor se extendió desde su corazón a varios lugares. Su temperatura corporal subió. Un aire caliente escapó de su boca.

"Haah... Hyung...".

De sus labios salió una palabra inesperada.

Yoon-seul metió la mano en sus pantalones hinchados. Su pene, que comenzaba a endurecerse, estaba caliente. Yoon-sl lo agarró lentamente y frotó la punta redonda. Al comenzar a mover la mano, un momento de duda lo invadió.

La mano de Yoon-seul, que vacilaba, se dirigió lentamente hacia el espacio entre sus nalgas. Los pantalones cortos y la ropa interior presionaban contra el dorso de su mano, haciendo que el movimiento fuera incómodo. Yoon-seul se quitó los pantalones y la ropa interior.

"Ah, qué locura".

Aunque estaba solo en la habitación, se sintio avergonzado.

Era como si Hyeeon-oh estuviera mirando fijamente su parte inferior.

Al separar lentamente las piernas, el aire en la habitación tocó su pene, sus testículos y la abertura expuesta debajo. Aunque era verano, el aire se sentía fresco contra su piel.

Yoon-seul se recostó más y extendió el brazo completamente. Los dedos tocaron el perineo y el agujero. Con una mano, presionó su órgano sexual, que aún no estaba completamente erecto, contra la base y el abdomen, facilitando el movimiento. Yoon-seul exploró lentamente alrededor del agujero, pasando por el perineo y tocando la entrada.

Por un momento, la mano de Yoon-seul se detuvo.

"Huu...".

La yema de los dedos, que vacilaba, comenzó a masajear la entrada del agujero con cuidado. Ya no quedaba rastro de lo que Hyeon-oh había dejado. De alguna manera, se sentía vacío.

Aunque había sufrido por el agujero hinchado y febril, ahora extrañaba la presencia de Hyeon-oh.

"Realmente estoy loco".

El agujero de Yoon-seul aún no estaba preparado para abrirse. No estaba húmedo en absoluto. Solo había arrugas secas y piel con un poco de calor. Yoon-seul tocó su agujero con la mayor delicadeza posible.

Era su primera vez masturbándose por detrás.

Cuando el deseo sexual lo invadía, generalmente solo se masturbaba el pene. Penso que por Hyeon-oh estaba haciendo cosas extrañas, y recordo lo que Hyeon-oh le había hecho.

"Hyeon-oh... así... me tocó".

Recordo los movimientos habituales que le hacía a los otros y cómo Hyeon-oh lo había tocado. Aunque masajeaba alrededor del agujero, no se humedecía. Solo tocaba la piel lisa. Yoon-seul volvió a tocar su pecho, atrapando el pezón entre las yemas de los dedos y rodándolo.

"Nnng... Uh".

Cuando se lo hacía a los otros, se volvían tan húmedos. ¿Es por falta de tensión? ¿Por no tener el ambiente del sexo?

¿O porque Hyeon-oh no me está tocando?

Justo cuando penso en parar, un sonido del exterior entró por la ventana entreabierta. Parecía que Hyeon-oh estaba arreglando el patio. Como era la hora de la cena, probablemente estaba haciendo ejercicio al aire libre y luego ordenando el patio.

Al oír ese sonido, su corazón latió descontroladamente.

Yoon-seul se volteó de lado. Se metió los dedos en la boca para humedecerlos, luego los llevó a su agujero y lo masajeó. Empujó sus nalgas redondas y blancas hacia afuera. Al oír los sonidos de Hyeon-oh, el área alrededor del agujero comenzó a humedecerse un poco. Al insertar lentamente el dedo medio, entró hasta la primera falange.

Cuando Hyeon-oh lo hizo, se hundió como si fuera succionado, pero al hacerlo él, no se sentía igual. Aún estaba apretado. Intentar dilatar su propio agujero fue todo un desafío. ¿Cómo diablos Hyeon-oh lo hizo?

En ese momento, se oyó el sonido de Hyeon-oh entrando en la sala. El ruido de abrir la puerta plegable y encender el ventilador del techo siguió.

"Haaa...".

El dedo se hundió un poco más. Cuando entraron dos falanges del dedo medio, Yoon-seul comenzó a mover la mano. Sintio las paredes internas densas y apretadas. La presión de las paredes hacía que el movimiento fuera difícil. La sensación de estar envuelto era extraña. Al estimular su interior, sintio una sensación rara y misteriosa.

Yoon-seul recordó el lugar que Hyeon-oh había tocado y movió la mano en consecuencia. Cuando el movimiento se volvió un poco más fácil, forzosamente agregó otro dedo.

"Ah... Este, este sentimiento... No, no es".

Intento encontrar la sensación que Hyeon-oh le había dado, moviendo la mano. Lo movío lentamente y luego lo abrío con fuerza como si estuviera abriendo algo. Poco a poco, la entrada y el interior comenzaron a suavizarse. Como sus dedos eran más cortos que los de Hyeon-oh, no podía llegar a los lugares que él tocó.

"Ah... Ah".

Era frustrantemente insuficiente. Una vez que comenzo a sentir algo de estimulación, se intensificó. Se encogío, estimulando el espacio entre sus nalgas mientras se masturbaba el pecho con la otra mano. Aumento la velocidad de sus movimientos.

"Ah, haah... Uh".

Recordo la mano y el pene de Hyeon-oh penetrándolo con fuerza.

Los movimientos de Hyeon-oh que lo penetraban sin descanso. Su cuerpo atrapado en los brazos de Hyeon-oh, incapaz de escapar. Esa extraña sensación que era tan placentera que daba miedo. Sus ojos azul marino ondulantes que lo miraban fijamente. Esa mirada que estaba completamente dirigida solo a él.

De repente, desde el estómago hasta el pecho, un calor intenso subió.

"Haah… Hyung".

Al recordar a Hyeon-oh de ese día, le hizo faltar el aliento. Yoon-seul se movió rápidamente en el agujero que se había vuelto blando, y tocó delante de sí. No estaba lo suficientemente acostumbrado a la posición como para tocar libremente delante y detrás. La mano que movía en el agujero aceleraba cada vez más, pero la mano que sostenía su miembro se movía lentamente.

"Ah, ahh… Hyung… Hyeon-oh hyung".

Sin darse cuenta de que el volumen de su voz había aumentado, Yoon-seul comenzó a concentrarse en sus movimientos. La voz que llamaba ansiosamente a Hyeon-oh, el placer aún no maduro, y la conciencia que lo reprendía constantemente se enredaron.

En ese momento, se oyó un golpeteo en la puerta.

"Kim Yoon-seul. Kim Yoon-seul, abre la puerta".

Se sobresaltó. ¿Y si había oído los sonidos? Tenía que esconder inmediatamente su órgano aún erecto y el agujero que exudaba calor y humedad.

"¿Qué, qué pasa!".

"Oye, ven a hablar conmigo. Abre la puerta ahora. Si no, la abro yo".

Hyeon-oh volvió a golpear la puerta con fuerza. Yoon-seul, alarmado, se puso rápidamente los calzoncillos. Su órgano erecto se presionó dolorosamente. Mientras se ponía los shorts, tropezó varias veces. Luego, tiró del dobladillo de su camiseta oversized para cubrir la protuberancia. Estaba agradecido de haber elegido una camiseta grande.

"Ah, abre rápido, ¿me oyes?".

Yoon-seul tomó una profunda respiración y abrió la puerta.

"Antes de que la derribes, eh…".

Hyeon-oh, que parecía a punto de enojarse, se sorprendió al ver la cara sonrojada de Yoon-seul y cambió su expresión. La mano de Hyeon-oh tocó la mejilla de Yoon-seul sin dudar. Un hormigueo recorrió el cuerpo de Yoon-seul.

"¿Estás enfermo?".

Yoon-seul evitó la mirada de Hyeon-oh y negó lentamente con la cabeza. No podía mirarlo a los ojos de nuevo. Justo antes, había estado masturbándose recordando el sexo con Hyeon-oh, incluso llamándolo por su nombre.

No tenía el descaro de mirarlo a los ojos. Su cara se sonrojaba cada vez más.

"…No, no estoy enfermo. ¿Qué pasa?".

"Eh?".

"Dijiste que querías hablar… Señor Seo Hyeon-oh".

"Ah. Eso…".

Se produjo un silencio incómodo entre Hyeon-oh y Yoon-seul. Aun así, Hyeon-oh no quitó su mano de la mejilla de Yoon-seul. Yoon-seul respiraba temblorosamente. Mirando los labios de Yoon-seul, que parecían especialmente rojos., Seo Hyun-oh pensó en besar a Kim Yoon-seul.

"Eh, um. ¿Quieres dar un paseo?".

“… ¿Eh?".

"Me siento un poco ahogado. Salgamos. Usaré mi polaina. Y un sombrero también".

"¿Señor Seo Hyeon-oh, te sientes ahogado?".

"Sí. Alguien me hace sentir tan ahogado que podría morir. Oh".

Diciendo eso, Hyeon-oh entró a su habitación.

¿Alguien?

La cara y el cuello de Yoon-seul se sonrojaron. Ya estaba caliente, pero se ponía cada vez más rojo.

Así que, ha estado pensando en mí todo este tiempo.

El nudo en su pecho se desató lentamente. Se arrepintió de haber evitado a Hyeon-oh por preocupaciones innecesarias. Le gustó que esa mirada de preocupación se confirmara con palabras, directamente de la boca de Seo Hyeon-oh.

Su corazón latía descontroladamente de nuevo.

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***

Hyeon-oh dijo que caminaría por el vecindario, pero Yoon-seul lo llevó en su auto. Mirando el oscuro pueblo a través de la ventana, Hyen-oh pensó que era mejor escuchar a Yoon-seul. Al menos no rodaría por los campos en esta carretera oscura.

"¿A dónde vamos?".

"Hay un camino para caminar cerca de la estación de Jochiwon".

"¿Hay gente por allí?".

"De todos modos, es de noche, así que estará oscuro, probablemente no nos vean".

"¿Estás seguro?".

"Eres un cobarde".

"Otra vez con eso".

"No te preocupes. Los estudiantes universitarios están de vacaciones, así que no habrá nadie en el camino. Y tienes tu polaina. ¿Qué te preocupa?".

"Ah, la bandana mágica. La que me diste, Kim Yoon-seul, así que probablemente funcione de nuevo. Ah, ¿debería haberme puesto mi sombrero de paja hoy?".

Hyeon-oh, quien quería hablar, y Yoon-seul, quien aún no podía disipar la atmósfera incómoda, aliviaron la tensión con conversaciones triviales hasta que llegaron al camino cerca de la estación de tren.

Yoon-seul estacionó el auto en algún lugar cerca del camino. Los dos pisaron las largas sombras que se extendían frente a ellos y caminaron paso a paso.

"Este es el camino de los árboles de flores, ¿sabes? Es bonito cuando florecen. Ahora están todos caídos".

"¿Cuándo florecen?".

"A principios de mayo".

"Entonces podemos venir de nuevo entonces".

Hyeon-oh lo dijo casualmente. Yoon-seul miró de reojo a Hyeon-oh. Sonaba como si dijera que vendrían juntos en mayo. Hyeon-oh miró los árboles de flores a lo largo del camino. Había un cruce de ferrocarril y vías al lado del camino.

"Los trenes pasan por aquí".

"Sí. Hay un cruce, así que pasan autos, trenes y gente caminando".

"Pero es más tranquilo de lo que pensaba. Somos los únicos aquí".

Yoon-seul se levantó un poco sobre sus pies y bajó la polaina que cubría la cara de Hyeon-oh.

"Eres demasiado alto. Me haces ver muy pequeño".

Sorprendido por la acción repentina de Yoon-seul, Hyeon-oh miró hacia abajo. Yoon-seul detuvo la mano de Hyeon-oh que intentaba subir la polaina.

"No hay nadie, quítatela".

"Ha… Siempre haces lo que quieres".

"¿Cuándo?".

Yoon-seul frunció el labio inferior y comenzó a caminar adelante. Hyeon-oh dio zancadas largas para alcanzarlo y puso su mano en el hombro de Yoon-seul.

El calor cálido se acumuló en su hombro.

"Si estás ansioso por que la gente te vea, ¿por qué haces eso?".

"Justo por eso. ¿Te molesta?".

"……".

Yoon-seul se sonrojó sin decir nada. Hyeon-oh se rio y abrazó firmemente los hombros de Yoon-seul, caminando lentamente. Hyeon-oh ajustó su paso al de Yoon-seul. Yoon-seul miró las sombras de sus pies y mordisqueó su labio inferior en silencio.

Se oyó el anuncio de salida de trenes desde la estación. Pronto, el tren pasó ruidosamente por las vías. Cada vez que el tren se movía, el suelo donde estaban temblaba. Pronto, el sonido del tren se alejó.

El silencio regresó. Como si nada hubiera pasado, el camino se llenó solo con el canto de los grillos. La brisa del bosque soplaba suavemente, refrescando el aire húmedo y caluroso.

"Kim Yoon-seul".

"¿Qué?".

"¿Por qué me evitaste?".

Aunque esperaba esta pregunta, al escucharla, no sabía qué decir.

Como Yoon-seul solo caminaba en silencio, Hyeon-oh se detuvo. Hyeon-oh inclinó su cara hacia la de Yoon-seul. A Yoon-seul le gustó ver a Hyeon-oh inclinarse a su altura. Se sintió conmovido.

"¿Eh? Dime. Yoon-seul, ¿por qué me evitaste?".

"……".

"¿Me usaste y huiste? ¿Como en una aventura de una noche, ya sacaste todo lo que querías?".

"¡No, no es eso!".

"Entonces, ¿qué es? Fuiste tú el que preguntó si me iría a Seúl después de eso, pero ¿por qué me ignoras? ¿Fui demasiado viejo y no te gustó? Qué ingrato".

Hyeon-oh lo dijo con un tono juguetón, pero su expresión era suave, como si intentara calmar a Yoon-seul. La cara de Hyeon-oh se acercó más a la de Yoon-seul, dejando solo espacio para un puño entre ellos.

De vuelta a la distancia inicial entre ellos.

"……".

"Yoon-seul, ¿Deberia ir a Seúl? ¿Te molesta tanto verme?".

Al oír eso, el corazón de Yoon-seul se hundió. La mirada de Yoon-seul, que había evitado los ojos de Hyeon-oh, regresó. Cuando sus ojos color avellana con un toque de verde se encontraron directamente con los ojos azul marino profundos de Hyeon-oh al mismo nivel, Hyeon-oh sonrió. Sus ojos, usualmente intensos, se suavizaron frente a Kim Yoon-seul.

"¿Eh? Dime. Yoon-seul. Haré lo que digas. ¿Me voy? ¿Empaco mis cosas?".

"No, no es eso".

"Entonces, ¿qué no es?".

"No es que me cueste verte...".

"¿Entonces, por qué? Después de tener sexo, me tratas como a un perro. Sales corriendo en medio de la noche. Me evitas por una semana. ¿Por qué? Explícamelo. No me vuelvas loco".

Aunque Hyeon-oh presionaba, sus ojos seguían suaves.

"...Eso es...".

"Sí. ¿Qué es, Yoon-seul?".

La mano caliente de Hyeon-oh tomó las mejillas de Yoon-seul. Yoon-seul movió los labios. Su corazón parecía a punto de saltar de su garganta. Solo tragaba saliva en vano. Pronto, los labios de Yoon-seul se hincharon. Sus ojos, usualmente perezosos y bonitos, parecieron a punto de llorar. Hyeon-oh suspiró.

"Me vuelves loco. ¿Por qué pareces a punto de llorar? ¿Eh? ¿Por qué? Como un niño. ¿Por qué, Kim Yoon-seul? ¿Eh?".

Aunque las palabras sonaban como regaños, eran suaves y tiernas. Las cejas de Yoon-seul se arrugaron. Hyeon-oh abrazó suavemente a Yoon-seul.

De repente, la respiración de Yoon-seul se detuvo.

"Ah, Yoon-seul. ¿Qué pasa? Eh? ¿Te presioné demasiado ese día? ¿Eh? ¿Te disgustó que fuera tan pervertido? ¿O te parece que te estoy regañando ahora? ¿Por qué esa cara de llorar?".

“... ¿Por qué me preguntas eso?".

Las palabras de Yoon-seul dejaron a Hyeon-oh confundido. Yoon-seul respondía con un tono gruñón, y Hyeon-oh no podía entenderlo.

Tal vez fue solo un capricho infantil. ¿Me atrajo solo a mí sin pensar? ¿Tuve pensamientos presuntuosos? ¿Me confundí por estar en ese mundo solo nosotros dos?

Hyeon-oh lentamente soltó a Yoon-seul de sus brazos.

Pero tú, ¿por qué preguntas eso con esa mirada?

"...Porque me siento ahogado".

"¿Por qué te sientes ahogado?".

"¿Y tú no lo estarías? Si me evitaras".

"......".

"Me haces sentir muy inquieto"

¿Qué te hace sentir inquieto exactamente? ¿Solo porque te hice sentir ahogado?

Hace un momento, se sintió aliviado sabiendo que Hyeon-oh pensaba en él, pero ahora se sentía apretado de nuevo. Tal vez por todas las preocupaciones de los últimos días. Palabras simples como estas eran difíciles de interpretar.

¿‘Inquieto’ tiene tantos significados? Demasiados para que lo entienda de una vez. Sería genial si pudiera ser más claro.

Yoon-seul suprimió sus sentimientos. Decidió no profundizar en esas palabras.

En lugar de preguntar el significado de ‘inquieto’, o explicar las raíces de sus extrañas emociones, necesitaba explicar por qué lo evitó, honestamente.

De lo contrario, Hyeon-oh podría irse de verdad a Seúl.

Si se va, podría no volver a verlo.

"Allí... Hyeon-oh hyung".

Al oír ‘Hyeon-oh hyung’, un escalofrío recorrió el cuerpo de Hyeon-oh.

"Sí, Yoon-seul".

"Voy a decirlo honestamente... No te sorprendas".

"Sí, por eso vinimos aquí. Dilo".

Yoon-seul cerró los ojos con fuerza. Hyeon-oh miró confundido.

"Para... Para mí, fue la primera vez".

Hyeon-oh parpadeó. Yoon-seul miró a Hyeon-oh tímidamente.

"...Oh. Así que... Fui tu primera vez... Sí, entiendo".

Yoon-seul asintió. Hyeon-oh también asintió.

No era tan sorprendente, ya que era una de las posibilidades que había considerado. Pensó que era lindo que Yoon-seul lo evitara por una semana por algo como eso.

Sí, es comprensible si fue la primera vez.

...Espera, pero dijiste que habías tenido muchas relaciones. Fuiste tú el que se me acercó primero. ¿Por qué eras tan bueno en la felación?

Hyeon-oh se rio y luego suspiró. Se aclaró la garganta y se rascó la frente.

"Um... Te presioné poco. ¿Te dolió? No lo controlé bien".

"¿Un poco?".

"Yo... Lo disfruté mucho. Um... Lo siento, Yoon-seul. Por hacerte daño. Debería haber sido más considerado".

"No, no es eso. Um...".

"¿Eh?".

La cara de Yoon-seul se sonrojó. Bajo la luz verdeazulada de la farola, se veía claramente roja. Hyeon-oh inclinó la cabeza.

"Yo... Nunca lo había hecho por detrás... Así que, como solo había penetrado antes, me confundí un poco sobre mi posición".

“... ¿Qué?".

"Te rogué que lo hicieras rápido... Y gemí de formas extrañas. Ah... Realmente, todo lo que hice ese día fue vergonzoso, y fue mi primera vez haciendo esas cosas. Fue tan embarazoso porque eran reacciones que no conocía de mí. Lo siento mucho por solo evitarte. Hyeon-oh hyung...".

La mente de Hyron-oh se volvió confusa.

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Esto no era una de las posibilidades que había considerado. ¿Solo había penetrado antes? Así que, la posición usual de Kim Yoon-seul era...

Hyeon-oh parpadeó repetidamente. Miró el cuerpo delgado y recto de Yoon-seul frente a él. Era 17 cm más bajo que él. Era difícil de imaginar.

¿Soy demasiado prejuicioso?

Hyeon-oh recordó lo que Yoon-seul había dicho ese día. Había dicho que no le gustaba cuando tocaba entre sus nalgas, y tampoco cuando tocaba su pecho. Aun así, se había rendido al placer.

Y había insistido en que lo haría, que lo haría por él. Ah, entonces.

“... ¿Intentabas estar detrás mío ese día? ¿Es eso?".

"......".

"...Pero nuestra diferencia de tamaño es así".

"¡No lo sé! Me voy".

Yoon-seul se dio la vuelta para irse, pero Hyeon-oh lo agarró del brazo.

"De nuevo con esto".

“¿Qué? ¿Qué hice yo?”.

“Lo estás levantando y bajando todo el tiempo”.

Los ojos de Yoon-seul se abrieron como platos. Hyeon-oh tomó la muñeca de Yoon-seul y comenzó a caminar por el sendero. Yoon-seul era arrastrado como si no tuviera elección. El labio inferior de Yoon-seul se extendió en un puchero. En realidad, estaba fingiendo que no podía resistirse. Por esa actitud de Kim Yoon-seul, Seo Hyeon-oh se rio entre dientes.

Este zorro astuto. Este mocoso insolente.

Hyeon-oh miró hacia atrás de repente. Al ver la expresión de Yoon-seul, una mezcla de vergüenza y disculpa, no pudo evitar reírse sin motivo.

“Ah, qué mocoso tan lindo. ¿Cómo voy a devorarte?”.

Hyeon-oh murmuró en voz baja.

“¿Eh? ¿Qué dijiste?”.

El intenso dilema de una semana desapareció. Y con él, los problemas persistentes sobre su dolorosa realidad y los sedimentos en su corazón.

Una vez más, lo apartó todo a lo lejos.

“Eh, eres un mocoso insolente”.

“No me insultes. En serio”.

“¿Por qué? Tú me llamas hijo de perra”.

La expresión de Yoon-seul se volvió hosca de nuevo. Abrió los ojos en forma de triángulo y lo miró fijamente. Finalmente, volvió a la expresión que Seo Hyeon-oh encontraba más adorable en Kim Yoon-seul.

Yoon-seul, que estaba siendo arrastrado por la mano de Hyeon-oh, redujo la velocidad de sus pasos. Hyeon-oh se ajustó a su ritmo. Pronto, caminaban uno al lado del otro.

Hyeon-oh soltó la mano de Yoon-seul que tenía agarrada. En la muñeca blanca de Yoon-seul quedaron las marcas de los dedos de Hyeon-oh. Entre ellos, se creó un espacio del ancho de un dedo.

“Yoon-seul”.

“¿Sí?”.

“Ya no eres un niño. ¿Por qué te preocupas por tonterías como esa?”.

“......”.

“¿A tu edad, veintiocho años, te avergüenzas de algo así? Acéptalo simplemente. Eh, un hombre puede ser penetrado por detrás, ¿no?”.

“¡Otra vez! ¿Por qué dices eso?”.

“¿Solo por eso me ignoras?”.

En los ojos azul marino de Hyeon-oh había un toque de decepción y un toque de resentimiento. Yoon-seul, que estaba a punto de responder, cerró suavemente los labios. Una vez más, se encontró reflexionando sobre el significado de esas palabras que le molestaban.

“A mi...”.

Hyeon-oh se aclaró la garganta. Yoon-seul tragó saliva y miró de reojo a Hyeon-oh.

“Me gustó. Hace tiempo que no sentía algo así. Gracias a ti”.

Al ver la cara de Yoon-seul con los labios fruncidos en un puchero, Hyeon-oh se rio entre dientes. Yoon-seul, que había vacilado, finalmente abrió la boca con dificultad.

“... ¿Vas a ir a Seúl?”.

“No, no voy”.

“... Te estoy preguntando si irás cuando te sientas mejor, Seo Hyeon-oh, yo...”.

En ese momento, el meñique de Hyeon-oh rozó el meñique de Yoon-seul. Los pasos de Hyeon-oh se ralentizaron. Las palabras de Yoon-seul lo dejaron confundido.

Ahora estamos lo suficientemente cerca como para que nuestras manos se rocen, pero si me voy a un lugar lejano, ¿qué pasará? ¿Qué haré entonces?

De repente, sintió un dolor en el estómago.

“¿Quieres que me vaya?”.

Hyeon-oh se detuvo y miró hacia abajo a Yoon-seul. En la cara de Hyeon-oh, la sombra oscura y densa creada por la lámpara de la calle se extendía en ángulo. Al lado de esa sombra, la mitad de su rostro blanco estaba expuesta. La comisura de sus labios, que solo se veía a medias, no formaba una buena forma.

“... Si regresas... ¿No vas a ir?”.

“No. Te pregunté si quieres que me vaya. Eso es lo que pregunté”.

“......”.

“¿Me voy?”

“......”.

“¿Eh? ¿Me voy?”.

“... ¿Por qué insistes en preguntarme? Si Seo Hyeon-oh decides ir, irás. ¿Mi opinión es importante?”.

Yoon-seul no dio una respuesta clara. Ante esa actitud de Yoon-seul, Hyeon-oh hizo una expresión de decepción.

En fin, ¿qué somos nosotros? Aún no podemos definir nuestra relación.

Solo una noche, solo una vez, compartimos el cuerpo. Aunque tengamos sentimientos mutuos, no se ha establecido una relación clara entre nosotros.

¿Puedo atreverme a definir esa relación, Seo Hyeon-oh? ¿Aceptará Kim Yoon-seul la definición que yo dé? No podemos hablar de algo con certeza, ni hemos progresado lo suficiente como para estar seguros.

Entre nosotros, no hay nada.

Aunque lo sepa, la respuesta de Yoon-seul me dejó la garganta obstruida.

“Kim Yun-seul”.

“¿Qué?”.

La respuesta hosca volvió. Su rostro estaba lleno de decepción. Hyeon-oh pellizcó ligeramente la mejilla de Yoon-seul. Aunque no dolía, Yoon-seul se frotó la mejilla por nada. El puente de la nariz y las orejas de Yoon-seul se pusieron rojas.

“¿Por qué crees que tu opinión no es importante?”.

“... ¿Cómo puedo decidir eso yo? Si Seo Hyeon-oh tienes que ir... entonces vas”.

“Para mí, lo es”.

Hyeon-oh murmuró como para sí mismo. Entonces, la nuez de Adán de Yoon-seul se movió.

“Eso... Kim Yun-seul”.

“......”.

“No soy bueno para entender los sentimientos de los demás”.

“Dijiste que lo sabes mirando los ojos”.

Hyeon-oh tomó la mano de Yoon-seul. Sus dedos gruesos se entrelazaron con los delgados dedos de Yoon-seul. Las palmas de sus manos se unieron. Podían sentir los latidos en las muñecas el uno del otro.

“Si tengo emociones, no puedo leerlas en los ojos del otro. La actuación y la realidad son diferentes”.

El corazón de Yoon-seul se agitaba en confusión. Su corazón latía incontrolablemente.

“¿Qu-qué...?”.

“Así que, habla claro. No lo sé si no me lo dices. Incluso si me lo dices, a veces no lo entiendo, maldita sea”.

“......”.

”Eh? ¿No vas a responder otra vez?”.

“No lo sé. No entiendo nada de lo que dices”.

Los ojos de Yoon-seul miraron los de Hyeon-oh y luego lentamente desviaron la mirada. Hyeon-oh tomó la barbilla de Yoon-seul. La mirada con la que miró el rostro de Yoon-seul era bastante suave.

“Estoy confundido por ti”.

“¿Qué hice yo? Tú eres el que no entiende”.

“Solo me llamas 'hyung' cuando te conviene o cuando estás en desventaja”.

“¿Cuándo solo lo hago en esos momentos? Ah”.

Los labios de Hyeon-oh se posaron sobre los de Yoon-seul. El torso superior de Hyeon-oh se inclinó gradualmente para ajustarse a la altura de Yoon-seul. Hyeon-oh aplicó suavemente presión en la mano entrelazada. Mirando las largas pestañas cerradas de Hyeon-oh, Yoon-seul cerró los ojos.

Fue un gesto cariñoso y suave. No era como esa noche, cuando estaba enojado y lo presionaba con fuerza. Hyeon-oh exploró delicadamente los labios de Yoon-seul, lamió ligeramente el contorno del labio superior, mordisqueó el labio inferior y luego se adentró para entrelazar sus lenguas suavemente.

La mano opuesta de Hyeon-oh rodeó la nuca de Yoon-seul. La mano opuesta de Yoon-seul agarró el borde de la ropa de Hyeon-oh.

Un tren pasó.

El sonido de las ruedas del tren chocando contra los rieles llenó el ambiente. El lugar donde estaban parados se sacudió levemente. El sonido del cruce del tren cesó repetidamente, y el ruido del tren se desvaneció en la distancia.

En el tranquilo sendero de árboles de flores, solo se oía el suave sonido de los besos de Hyeon-oh y Yoon-seul.

Junto con el zumbido de los insectos de verano.

***

Hyeon-oh estaba sentado solo en el sofá, mirando fijamente la forma de la luz del sol en la pared de la sala. La casa estaba inusualmente tranquila. El silencio que había comenzado desde la mañana se cernía alrededor de Hyeon-oh.

¿Es porque Yoon-seul no está?

Para olvidar la soledad y el vacío, había puesto una película francesa de la década de 1930, pero no servía de nada. Incluso 'Las reglas del juego' de Jean Renoir, que le gustaba a Hyeon-oh, no captaba su atención, así que apagó la pantalla.

“Ah...”.

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Inclinó la cabeza hacia atrás y miró al techo. Se veían las marcas del tiempo. El techo de madera oscuro y brillante, la pantalla de la lámpara que Kim Yoon-seul había cambiado recientemente, y el polvo acumulado débilmente a su alrededor.

Hyeon-oh se levantó y comenzó a vagar por la sala. Se oía el sonido de sus pasos en el piso de madera. Entró al estudio de Yoon-seul. A través de la gran ventana, entraba una luz brillante. El polvo en el aire brillaba intensamente en la luz. Hyeon-oh escudriñó el estudio y se sentó frente al caballete. La silla gaming se hundió con su peso.

“Otra vez, todo negro”.

Otra vez, un retrato. Era de colores bastante oscuros.

Los retratos que pinta Kim Yoon-seul siempre son oscuros. Dijo que expresa el interior de las personas, especialmente el lado oscuro. Algunos tenían formas corporales claras, como si se hubiera esculpido la figura, mientras que otros eran tan abstractos que era difícil reconocerlos como retratos.

“¿Vas a seguir pintando cosas tan oscuras todos los días y terminarás volviéndote realmente oscuro? ¿Qué harás entonces? Tú”.

Kim Yoon-seul aún no sabe que Seo Hyeon-oh asistió a su exposición.

Era un día de nevada intensa. En un día en que el rodaje de 'Reclaimed' se había pospuesto, Hyeon-oh, que sufría de fiebre alta e insomnio, se dirigió temprano por la mañana a la galería en Seongsu-dong donde se llevaba a cabo la exposición individual de Yoon-seul.

Recibió copos de nieve que caían sin parar, hundiéndose hasta los tobillos en la nieve acumulada, y fue a ver la exposición de Yoon-seul.

Con la cara envuelta en una bufanda y una gorra calada, nadie lo reconoció. Gracias a que llegó a la hora de apertura, la galería estaba vacía excepto por el vigilante, y debido a la nevada, el tráfico estaba paralizado.

Hyeon-oh se quedó un rato frente a una gran pintura en el lienzo.

Mirando el revoltijo de letras negras garabateadas y formas pequeñas, y el amasijo rojo distorsionado como sangre, Hyeon-oh pensó que era exactamente como su interior.

“¿Cuándo vendrás? Kim Yun-seul. Estoy aburrido”.

Hyeon-oh se hundió en la silla gaming y miró fijamente el lienzo que Yoon-seul había estado pintando.

La luz que tocaba un lado de su cara y su brazo era cálida. Hyeon-oh giró la cabeza y miró por la ventana. Debido a la luz, el bosque más allá parecía borroso y blanco. Hyeon-oh entrecerró los ojos.

“Ya se ha ido la mitad de julio. El tiempo pasa rápido”.

Un largo suspiro escapó de sus labios. Sabía que eventualmente tenía que irse, pero aún no quería abandonar este espacio.

Kim Yoon-seul le preguntó si iba a regresar a Seúl, y cuando le pregunto si debería ir, no le dio una respuesta clara.

Desde ese beso en las vías del tren, no han hablado de eso. Tampoco han hablado de sus sentimientos o su relación. Ninguno de los dos lo ha mencionado. No han tenido ningún contacto físico ni sexo. Solo han vivido una vida cotidiana simple.

Pasando un verano muy ordinario.

A veces con el espacio de un puño, a veces con el espacio de un dedo.

“Hyeon-oh, ¿qué quieres hacer? ¿Qué quieres hacer con Kim Yoon-seul?”.

Se preguntó a sí mismo. No surgió una respuesta clara.

Sé que no puedo quedarme en esta casa para siempre. Soy solo un inquilino en el espacio de Kim Yoon-seul, un extraño. No puedo ser descarado.

Oficialmente, se anunció que estaba en pausa por problemas de salud, pero le dijo a Kang y a los de la compañía que era una jubilación. Por eso, la compañía se volvió loca. El contrato con Alta Clase también se terminó prematuramente con Sena y Sewon asumiendo las pérdidas, con la condición de la última sesión de fotos.

Eventualmente, llegará el día en que necesite regresar. Podría llegar el día en que tenga que regresar por obligación. O el día en que quiera actuar de nuevo.

A veces, cuando veia los libros y películas que le trajo Yoon-seul, siento un anhelo insoportable por actuar.

La salud de su madre también es incierta. Aún no estaba seguro de si los sentimientos por Eun-seong han desaparecido por completo.

Los ojos de Hyeon-oh se posaron en el cuaderno de bocetos de Yoon-seul. Las líneas de lápiz esbozadas desordenadamente dibujaban a Seo Hyeon-oh. Kim Yoon-seul había dibujado a Seo Hyeon-oh en varios espacios de esta casa.

De repente, mordió su labio inferior con fuerza.

“¿De verdad vas a confundirme? Kim Yoon-seul”.

Su garganta comenzó a picar.

Si esta relación ambigua se define con claridad, ¿qué pasará después? Si ato a Kim Yoon-seul a mi lado, o si me alejo, ¿qué ocurrirá?

Si Kim Yoon-seul está a mi lado, ¿qué pasará después? Pensar en eso me asusta.

Todavía tengo miedo de la mirada de la gente, como con Eun-seong, podría herir a Yoon-seul en algún momento. A medida que la relación se define, tendré que ocultar la existencia de la persona a mi lado. Basado en mi experiencia pasada, ese era el mejor enfoque, o al menos el menor de los males.

Solo así podía proteger a todos a mi alrededor de los ataques.

Entonces, ¿al igual que con Eun-seong, pospondré el corazón de Yoon-seul? ¿Eso no creará más heridas? Las cosas que intenté proteger podrían crecer como un tumor que no puedo extirpar.

Eso me da miedo.

Aún no has cambiado nada, Seo Hyeon-oh. Sigues siendo un cobarde.

Se oyó el sonido de un auto apagando el motor afuera. Hyeon-oh rápidamente dejó el cuaderno de bocetos y salió al salón. La puerta principal se abrió con fuerza. Al oír a Yoon-seul entrar, la cara de Hyeon-oh se iluminó, pero se endureció instantáneamente.

Kim Yoon-seul estaba temblando. Su rostro estaba distorsionado por una ira incontrolable.

“Kim... Yoon-seul...”.

Conteniendo un llanto que parecía a punto de estallar, con los labios blancos por morderlos con fuerza, Yoon-seul pasó junto a Hyeon-oh y entró al estudio. La pesada puerta corredera se cerró con un golpe. Hyeon-oh se quedó quieto, escuchando el sonido de la puerta, y luego se dio vuelta rápidamente.

Algo debe haber pasado.

En ese momento, se oyeron ruidos fuertes desde el estudio. Parecía que Yoon-seul estaba tirando su lienzo. Se oyeron los sonidos de un caballete y una silla cayendo. Los colores bien organizados caían ruidosamente al suelo, el sonido de un pincel pintando agresivamente el lienzo, y luego...

El sonido de tela rasgándose.

A través de los dientes apretados, se escapaba una respiración agitada, y la voz de Kim Yoon-seul gritó.

“¡Ugh! ¡Ahhh!”.

Hyeon-oh abrió rápidamente la puerta corredera. El polvo que antes flotaba tranquilamente en la luz ahora volaba en el caos. Todo en el estudio, que había sido dejado en su lugar, estaba desordenado. Lo más desordenado de todo era...

Kim Yoon-seul, que estaba rasgando el lienzo.

“¡Kim Yoon-seul!”.

Hyeon-oh se acercó a grandes zancadas y abrazó a Yoon-seul. Sintió la espalda seca de Yoon-seul temblando. Aunque lo abrazó con fuerza, Yoon-seul no dejó de rasgar el lienzo y gritar.

¿Por qué! ¿Por qué es esto! ¿Por qué pasa esto! Eh? ¡Yoon-seul, cálmate!

"¡Ahh... Aaah!!! ¡Ahhuk! ¡Hijos de puta! ¡Uaaah!".

Hyeon-oh separó a Yoon-seul del lienzo. Con eso, tanto Hyeon-oh como Yoon-seul cayeron hacia atrás. Yoon-seul pataleaba con las piernas.

Hubo un fuerte golpe, golpe, contra el suelo que sonaba dolorosamente.

Yoon-seul lloraba a gritos como un niño pequeño. La luz caliente que entraba por la ventana tocaba el cuerpo de Yoon-seul. Tanto Hyeon-oh como Yoon-seul estaban empapados en sudor.

"¡Huu... Ahhuk. Mi pintura... ¡Mi pintura!!!".

"Shh... Yoon-seul, cálmate. Cálmate...".

Hyeon-oh apretó fuerte sus brazos alrededor de Yoon-seul. Abrazándolo como si lo sostuviera en sus brazos, pero asegurándose de no lastimarlo. En los brazos que lo abrazaban, podía sentir el latido del corazón de Yoon-seul, que estaba completamente descontrolado. Yoon-seul, que gritaba y lloraba, no mostraba signos de calmarse fácilmente.

Yoon-seul estaba sentado en el suelo del taller, que era un completo desastre, tirando cosas que tenía en las manos, pateando cosas que tocaban sus pies, y continuando llorando. Con eso, incluso los brazos de Hyeon-oh se llenaron de arañazos.

Hyeon-oh enterró su rostro en el hombro de Yoon-seul. Y susurró suavemente para calmarlo.

"Shh, está bien. Cálmate, Yoon-seul. Todo está bien".

"¡Huk. Kkuk. Hwaaa. ¡Hijos de puta...! ¡Aaah! ¡Los mataré a todos!! Huk".

"Está bien, está bien. Yo mataré a esos hijos de puta. Cálmate. Shh. Está bien. Shh. Respira profundo".

La gran mano de Hyeon-oh acarició el pecho de Yoon-seul. Aún podía sentir los latidos fuertes que no se calmaban. Debido a los gritos y el llanto, la garganta de Yoon-seul se secó completamente.

Exhausto por sus emociones hirviendo y el calor, su respiración irregular comenzó a calmarse levemente. Poco a poco, podía sentir que la fuerza abandonaba el cuerpo de Yoon-seul.

"Shh. Así. No te esfuerces más. Respira profundo".

"¡Huhuk. Fuuu... Hyung... Hyeon-oh hyung".

"Sí, hyung está aquí. Está bien. Fuu, exhala. Respira profundo otra vez. Si sigues así, te desmayarás".

"Fuuu... Hhuk... Kkuk. Hyung... Hyeon-oh hyung...".

"Está bien. Todo va a estar bien. Yoon-seul. Todo está bien".

Hasta que la respiración de Yoon-seul se normalizara, hasta que se agotara de tanto llorar y se durmiera en los brazos de Hyeon-oh como si se desmayara.

Hyeon-oh siguió acariciando el pecho de Yoon-seul y repitiendo que estaba bien.

Solo después de que esa pequeña y linda cabeza se apoyara en el antebrazo de Hyeon-oh y dejara de moverse, y de que saliera un suave ronquido de la nariz y la boca de Yoon-seul, Hyeon-oh soltó sus brazos que lo envolvían. Luego, levantó a Yoon-seul en brazos y lo llevó a su habitación.

Hyeon-oh acostó a Yoon-seul en la cama y salió silenciosamente, cerrando la puerta. Se quedó parado en el pasillo, mirando el taller que estaba hecho un desastre. Dejó escapar un profundo suspiro.

"¿Qué demonios pasó? ¿Qué hay que hacer para que un chico se vuelva así?".

Kim Yoon-seul salió de casa temprano en la mañana. Dijo que tenía una reunión en la agencia y que iría a Seúl. Hasta ese momento, no parecía haber ningún problema. Tampoco parecía haber oído ninguna noticia especial.

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Así que no podía imaginar qué había pasado.

Normalmente, Kim Yoon-seul nunca expresaba sus emociones al máximo. Cuando estaba quieto, tenía una expresión tan fría y aburrida que era incómoda, y cuando estaba molesto, solo se reía o se quejaba. Eso tampoco era al máximo.

Era la primera vez que veía que se enojara tanto como para rasgar su propia pintura y no poder controlar su cuerpo.

Hyeon-oh entró al taller y comenzó a ordenar en silencio las cosas que Yoon-seul había destrozado. Después de limpiar el taller de Yoon-seul, Hyeon-oh entró al baño. Para calmar su mente complicada sin razón aparente, y también para lavarse el cuerpo cubierto de pintura por el alboroto que Yoon-seul había causado. Se duchó por bastante tiempo.

Incluso después de salir de la ducha, Yoon-seul no se había levantado. El horario de la cena se acercaba. Pensó que era afortunado que, siendo verano, el sol se ponía tarde.

Si Yoon-seul abriera los ojos y viera que afuera está oscuro, tal vez la depresión no lo suelte.

Como le había pasado a él.

***

Después de ducharse, Hyeon-oh se sentó en el sofá y estaba viendo películas como 'Las reglas del juego' de Jean Renoir, 'La gran ilusión', y luego la película muda de 110 minutos de Carl Theodor Dreyer, 'La pasión de Juana de Arco'. Estaba mirando aturdido la película en blanco y negro compuesta mayormente de close-ups, cuando

"Hyeon-oh hyung".

Escuchó la voz de Kim Yoon-seul llamándolo.

Hyeon-oh giró la cabeza rápidamente. Yoon-seul no se acercaba fácilmente y estaba parado tímidamente frente a la puerta de su habitación. De la boca de Hyeon-oh salió una risa.

"Oh, diablos. Esto es real".

"......".

Hyeon-oh se acercó a Yoon-seul. Agarró la muñeca de Yoon-seul y revisó sus manos.

Yoon-seul vio el largo arañazo en el antebrazo de Hyeon-oh. Una marca roja e hinchada hecha por las uñas. Era una herida que él había causado.

"¿Qué vas a hacer mirando mi brazo?".

"¿Uh, eh?".

Hyeon-oh revisó cuidadosamente las manos y los brazos de Yoon-seul. Confirmó las heridas raspadas en las puntas de los dedos y la piel ligeramente pelada en el dorso de la mano, luego bajó la mano de Yoon-seul.

"Te pregunté qué vas a hacer mirando mi brazo. Preocúpate por tus propias heridas".

"No, eso... Tu brazo tiene una herida que yo causé".

"¿Es eso el problema ahora? Diablos, ¿qué es esto en tu mano? ¿Dónde está el medicamento?".

Yoon-seul se dirigió en silencio al soporte del TV en la sala. Abrió la puerta del soporte y sacó el kit de primeros auxilios. Hyeon-oh, que se había acercado sigilosamente, le quitó el kit de las manos. Luego, tiró de la muñeca de Yoon-seul y lo hizo sentarse en el sofá. Sacó hisopos con alcohol, ungüento y vendas, y trató las heridas de Yoon-seul.

La gran mano que agarraba su mano con fuerza se sentía bien, y por eso, su rostro se sonrojó innecesariamente.

"Si te pregunto por qué pasó eso, ¿me lo dirás?".

“... ¿Ah? Ah. No es nada importante......".

"¿No es nada importante y montaste todo ese escándalo? ¿Hasta el punto de que tus manos queden así?".

"...Hyung. ¿Estás enojado?".

Hyeon-oh, que solo había estado mirando la mano de Yoon-seul, colocó el ungüento en la mesa con un golpe. Hyeon-oh, que había estado mordiéndose los labios, miró a Yoon-seul.

La mirada que se encontraron era afilada. No sabía si era enojo o preocupación. Solo podía ver que sus ojos azul marino estaban agitados.

"¿Enojo? ¿Te parezco enojado ahora?".

"Entonces, ¿por qué estás así?".

"...Ha".

"......".

"Es... preocupación".

Yoon-seul movió sus manos inquietamente. Los vendajes envueltos en la punta de su pulgar y dedo medio se tocaron suavemente.

"Pero hyung, tu brazo también...".

Hyeon-oh extendió su brazo.

"Pon ungüento o algo. Si te molesta tanto, hazlo".

Yoon-seul tomó el brazo de Hyeon-oh y le puso ungüento. También le puso una venda larga. ¿Cuánto lo había arañado? Una venda no era suficiente para cubrirlo. Hyeon-oh miró fijamente su brazo y luego apartó la mirada hacia Yoon-seul.

"Olvida esto. Estoy preocupado por ti, así que habla. Si no, me enojaré de verdad".

Como Yoon-seul seguía moviendo la mano vendada, Hyeon-oh le agarró la mano.

"Te la puse pensando en ti, ¿y ahora intentas quitártela? Qué insolente".

"No, eso es...".

"Siempre me dices todo directamente y actúas inteligente, pero en momentos como este, eres tan frustrante. Como un niño".

“... ¡Yo! ¿Qué!".

"Mira, reaccionas así cuando te digo que eres un niño. Entonces, ¿qué es? Dime. Así podré ir y matar a esos hijos de puta o lo que sea".

Yoon-seul sacó el labio inferior. Luego murmuró: "No podrás hacerlo de todos modos. Solo lo dices.". Solo entonces, Hyeon-oh se rió como si fuera ridículo.

"Ha... Este niño... De verdad".

De la boca de Hyeon-oh salieron risas. Hyeon-oh tiró de la muñeca de Yoon-seul y lo hizo sentarse a su lado. Entre Yoon-seul, que estaba sentado a una distancia, y Hyeon-oh, se creó un espacio del ancho de un dedo.

"¿Quién te hizo pasar por esto? Yoon-seul".

Sus ojos afilados lo presionaban, pero ahora, con una mirada suave, le hablaba con cariño. Esa mirada suave estaba llena de preocupación por él. Yoon-seul podía sentirlo claramente, y su garganta se cerró.

Su corazón comenzó a latir fuerte de nuevo. Ojalá esta mirada, este tono, no fueran un acto. Ojalá fueran reales, no la actuación en la que Hyeon-oh era el mejor.

"Ah. Eso es...".

"Sí".

"Fui a la agencia hoy. Me notificaron que cambiaron el lugar de la exposición. Dijeron que era por orden de la galería".

“... ¿Por qué?".

Hyeon-oh miró el rostro de Yoon-seul mientras preguntaba. Entre sus rostros, había espacio para un puño. El aliento cálido de Hyeon-oh caía directamente sobre el rostro de Yoon-seul.

"Eso... Te conté que volteé el mundo del arte".

"Sí".

"En realidad, fue porque mi profesor de posgrado robó mis ideas y composiciones".

"...Ah. Ese tipo es un verdadero hijo de puta".

Yoon-seul asintió en silencio. Hyeon-oh recostó su cabeza en el respaldo del sofá y acarició la cabeza de Yoon-seul. Cuando los gruesos nudillos de Hyeon-oh tocaron la nuca, el cuerpo de Yoon-seul se estremeció. Hyeon-oh retiró su mano.

"Entonces, ¿qué pasó?".

"Si solo fuera el color o la composición similar, podrían pensar que como soy su estudiante, y después de discutir ideas, se volvió similar... Pero el tema, el significado, los dispositivos que escondí en la pintura, todo era igual. Los métodos que uso para los detalles no son comunes, y esos detalles también tenían dispositivos que solo yo sabría. Todo era idéntico. No fue solo una o dos obras".

"¿Cómo lo sabes?".

"Vi las obras del profesor... Y durante la evaluación de la tesis...".

Los ojos de Hyeon-oh se volvieron afilados. Yoon-seul parecía estar midiendo, luego bajó la cabeza y habló suavemente.

"Antes de la exposición para la tesis de maestría, tienes que presentar una propuesta, ¿verdad? Ahí presentas no solo los métodos, sino también el significado, el tema. Y tienes que escribir un ensayo relacionado con la obra, por lo que mantienes un diario de investigación individual... En ese diario, estaba todo sobre mi trabajo. Detalles minuciosos sobre el proceso. Y el contenido de mis notas donde reuní ideas".

"Sí. ¿Y?".

Aunque parecía bastante calmado, la mano de Yoon-seul temblaba levemente. Hyeon-oh sostuvo suavemente el meñique de Yoon-seul.

"La exposición del profesor fue primero, y la de la tesis de maestría fue después... Sus obras se presentaron. Pero contenían cosas de mi diario de investigación y mis notas de ideas. Y durante la evaluación de la tesis, me atacaron. La evaluación se retrasó, la exposición se pospuso. Así es como me di cuenta, que el profesor robó todas mis ideas y composiciones que investigué con esfuerzo".

"Diablos. Un profesor que no investiga y roba el trabajo de los estudiantes. ¡Y de un estudiante de maestría!".

"Pensé que no robaría obras de un estudiante que aún no ha debutado, o que no copiaría algo de un simple estudiante de maestría, así que lo confirmé varias veces. Y era cierto. Pero las ideas no se reconocen como derechos de autor. Y él ya las presentó primero".

"Ese, diablos".

"Fue mi profesor durante la licenciatura y la maestría. La traición fue enorme".

Hyeon-oh presionó la rodilla de Yoon-seul una vez. Yoon-seul ahora sabía que era la forma de Hyeon-oh de consolarlo.

"Presenté una queja en la escuela, intenté publicarlo en el mundo del arte yendo a la asociación, e incluso lo publiqué en internet. Pero la escuela no aceptó mi queja. La asociación lo ignoró en silencio. Me preguntaron si iba a dejar de pintar. Si iba a desaparecer de este mundo. Ahí me di cuenta de lo conservador y basado en conexiones que es el mundo del arte. Al final, lo abandoné y dejé la escuela. Y he vivido en silencio en el taller, enfocándome solo en mis pinturas, participando en concursos. ¿Pero sabes qué? De repente, empecé a ser atacado. Como un joven insolente que se rebeló. Cualquier concurso en el que participaba, lo perdía todo, y mis compañeros de posgrado y amigos no querían saber nada de mí".

"Qué mierda. ¿Quieres que llame a algunos periodistas y lo haga público? ¿Que lo exponga todo? ¿Eh?".

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Yoon-seul se rió, puh. Hyeon-oh apretó las mejillas de Yoon-seul con el pulgar y el dedo medio.

"Pero. ¿Sabes qué fue lo más impactante?".

"¿Qué?".

"El tema que mencioné, mis pensamientos. Mis intenciones para guiar la obra. La composición y los colores que investigué, las técnicas de expresión. Todo lo que le conté al profesor. Robó mis notas de ideas".

"......".

"Fue mi exnovio".

La mano de Hyeon-oh, que había estado presionando las suaves mejillas de Yoon-seul, se detuvo. Yoon-seul evitó la mirada de Hyeon-oh que se encontraba con la suya. No pudo levantar la vista que había bajado al suelo. Hyeon-oh vio cómo el labio inferior de Yoon-seul se ponía blanco de tanto morderlo, y lo tocó con el pulgar. Al presionar suavemente el labio, Yoon-seul liberó el labio que había mordido.

“¿Y qué?”.

“¿Eh?”.

“Debe haber una razón para que estés contando esta historia ahora. Debe estar relacionada con la cancelación de la galería”.

“Ah…. La galería donde iba a exhibir mi trabajo está haciendo una exposición individual de mi ex”.

“¡Mierda, y eso qué tiene que ver con tu exposición!”.

“Él es el alumno favorito del profesor. Así que, incluso durante su doctorado, daba clases de pregrado, y todavía las da ahora. Pero, supongo que le molestaba exhibir en el mismo espacio que yo. De hecho, a mí me asignaron una sala de exposición mejor”.

“¡Ah, qué hijo de puta! ¿Es eso lo único que hace a su edad? ¿Cuántos años tiene ese tipo?”.

Esta vez, Yoon-seul presionó la rodilla de Hyeon-oh como para calmarlo. Hyeon-oh trató de regular su respiración agitada. Yoon-seul tocó su labio inferior con los dedos y luego lo empujó hacia fuera. Hyeon-oh observó esto y se lamió los labios.

“El profesor se convirtió en presidente de la asociación recientemente. Así que, supongo que usó su influencia de alguna manera. Mi agencia también se disculpó”.

“Ese profesor. ¿Todavía dibuja usando tus ideas?”.

“Uno de los trabajos en esta exposición parece ser así”.

“¿Dónde expone el profesor? ¿En esa misma galería?”.

“No. El profesor está en... el Museo Nacional de Arte”.

Hyeon-oh recostó su cabeza en el respaldo del sofá. Debido al impacto un poco fuerte, rebotó. Por alguna razón, Yoon-seul parecía estar observando la reacción de Hyeon-oh.

“¡Mierda. Qué asco. ¿Qué pasa? El mundo del arte es una mierda. ¿Verdad? Como el mundo del entretenimiento”.

“…De todos modos, así fue. Soy... demasiado infantil. Enfadarme por algo como eso. Y rasgar mis propios dibujos. Originalmente, no importa cuánto me disguste o me enoje, no se supone que deba rasgar dibujos”.

“Bueno, podría pasar. Me parece más impresionante que hayas conducido desde Seúl hasta aquí con calma, manteniendo la compostura”.

“… ¿Eh?”.

“Solo rasgaste tus dibujos. Condujiste con cuidado y no lastimaste a nadie. ¿No puedes expresar eso? Puedes hacerlo. Mierda, incluso si lo decapitaras, no sería suficiente. Hacer un desastre en el estudio es nada”.

“……”.

“Es un evento enorme en tu vida. Casi arruina tu vida. Algo como eso... no desaparece fácilmente de tu mente. Solo hiciste un lío en el estudio. Mierda, eres un santo en comparación”.

“Hyeon-oh hyung….”.

“No golpeaste a nadie. Cuando yo tenía tu edad, golpeé a alguien porque estaba enojado”.

Los ojos de Yoon-seul se abrieron como platos. Hyeon-oh se dio cuenta y pensó: 'Oh no', otra historia relacionada con Ryu Eun-seong.

Tal vez porque el tiempo conectado con Ryu Eun-seong fue de 17 años. En realidad, el tiempo que pasamos juntos fue corto, y no nos comunicamos cara a cara mucho, pero Ryu Eun-seong se infiltró ampliamente en mi vida.

Estando con Kim Yoon-seul, consolando a Kim Yoon-seul, compartiendo mis experiencias relacionadas con Ryu Eun-seong.

Me odiaba intensamente.

“…Como yo. Alguien que actúa de manera patética. Yoon-seul”.

“……”.

“Intenté encubrir eso. Hice de todo. Herí a muchas personas. Hice todo tipo de estupideces para encubrir eso. Soy un caso perdido”.

“Ah….”.

“Así que, esto está bien. Son esos bastardos los que te lastimaron y traicionaron. Hicieron algo que los humanos no deberían hacer, esos hijos de puta. Y no eres infantil. Lamento haber dicho que eras como un niño”.

“…Gracias”.

Yoon-seul bajó la cabeza y sollozó. La mano de Hyeon-oh acunó la mejilla de Yoon-seul. Se acercaron tanto que sus narices se tocaron. Hyeon-oh miró fijamente los ojos de Yoon-seul.

“Yoon-seul”.

“… ¿Sí?”.

“¿Puedo besarte?”.

Yoon-seul en lugar de responder, besó a Hyeon-oh. Los labios que se unieron apresuradamente se ralentizaron un tempo. Con movimientos cargados de anhelo, pero conteniéndolos, se aceptaron mutuamente con calma. Era un gesto cauteloso, como si se estuvieran abrazando completamente el uno al otro.

Hyeon-oh consolaba a Yoon-seul, y Yoon-seul a Hyeon-oh. Se besaron suavemente y con cuidado. Después de un beso corto, sus labios se separaron. Dejó un sonido tierno, y entre ellos se formó un hilo plateado. Viendo las mejillas sonrojadas de Yoon-seul y sus ojos hinchados y rojos, Hyeon-oh casi le quita la ropa.

Hyeon-oh se levantó, regulando su respiración. Yoon-seul lo miró con una expresión perpleja.

“Acabas de estar llorando descontroladamente. Ve a ducharte. Prepararé algo de comida. Debes tener hambre. Siéntate en el porche y tomemos una cerveza o algo. Vi que el cielo estaba claro. Probablemente haya estrellas”.

“Ah…. Sí”.

Yoon-seul se levantó y fue a la habitación para agarrar ropa cómoda. Se oyeron ruidos en la cocina.

“Hyung, no tengo hambre. No tienes que prepararme nada”.

“…Entonces come algo de fruta. Sacaré la cerveza”.

“Ah, sí…. Hyung, voy a ducharme ahora”.

Se oyó el sonido de la puerta del baño cerrándose. Pronto, el sonido del agua de la ducha comenzó.

Hyeon-oh, recostado en la nevera, trató de calmar su interior tembloroso. Ajustó su respiración agitada y parpadeó. Tocó continuamente los labios que habían tocado a Yoon-seul. Esto hizo que su estómago se revolviera intensamente.

“¡Ah, por qué... no se calma!”.

La imagen de Yoon-seul llorando, abriéndose con dificultad, con ojos hinchados y mejillas sonrojadas. Cada detalle era tan hermoso que sentía que podía morir.

“Estoy jodido, mierda….”.

Ahora, los pensamientos sobre Kim Yoon-seul se están volviendo más grandes.

Preocupaciones reales, el tiempo para lamentar el final de la relación, los sentimientos de un amor muerto. Todo eso se está volviendo borroso en comparación con lo mucho que estba pensando en Kim Yoon-seul, como para enloquecer.

La palabra 'ex' que sacó Yoon-seul le molestaba. A pesar de que su relación terminó de manera horrible, le enfurecia pensar en ese tipo, cuyo rostro ni siquiera conocia, como el ex de Kim Yoon-seul. Su estómago estába hirviendo y no se calmaba.

Tanto los sentimientos turbulentos hacia Yoon-seul como la ira hacia su ex. Todo se mezclaba y burbujeaba.

“¡Mierda!. Hyeon-oh, ¿es este el momento para juegos de amor?”.

Escuchando el sonido del agua en el baño, Hyeon-oh trató de calmar su interior tembloroso.

Orando para que se calme antes de que Yoon-seul salga, puso la cerveza que ni siquiera bebe bien y la fruta que ni come en una bandeja.

 

Máscara, Pintura, Amor 1